Rebeldes en Siria acuerdan pacto de rendición
Rebeldes del sur de Siria acordaron el viernes entregar las armas en un alto el fuego patrocinado por Rusia, dijeron fuentes insurgentes, cediendo la provincia de Deraa al gobierno en otra gran victoria para el presidente Bashar al-Assad y su aliada Moscú. No obstante, un corresponsal de la...



Rebeldes del sur de Siria acordaron el viernes entregar las armas en un alto el fuego patrocinado por Rusia, dijeron fuentes insurgentes, cediendo la provincia de Deraa al gobierno en otra gran victoria para el presidente Bashar al-Assad y su aliada Moscú.
No obstante, un corresponsal de la televisión estatal dijo que las negociaciones para la rendición en Deraa continúan aún y no hay acuerdo final por diferencias entre los grupos rebeldes.
Los medios estatales reportaron que el gobierno sirio recuperó el paso fronterizo de Nassib con Jordania, controlado por los rebeldes durante tres años, tras un asalto sobre territorio insurgente a lo largo de la frontera apoyado por ataques aéreos rusos.
Fuentes rebeldes dijeron que Rusia garantizará el retorno seguro de los civiles que huyeron de la ofensiva gubernamental en el mayor éxodo de la guerra, con 320.000 personas desplazadas de sus hogares.
Tras siete de años de una guerra en la que han muerto cientos de miles de personas, Bashar al-Assad controla ahora la mayoría de Siria con el apoyo de sus aliados, aunque la mayor parte del norte y una parte del este siguen fuera de sus dominios. Sin embargo, parece haber pocas posibilidades de alcanzar una paz negociada en un conflicto que ha generado la salida al extranjero de seis millones de sirios como refugiados y 6,5 millones más de desplazados a nivel interno.
Rusia ha estado en la vanguardia de la campaña de Deraa, tanto bombardeando como negociando con los rebeldes, a los que se dijo al principio de la ofensiva que no esperaran la ayuda de Estados Unidos.
El próximo objetivo de Assad en el suroeste parece ser las zonas rebeldes de la provincia de Quneitra, en la frontera con los Altos del Golán, un territorio ocupado por Israel donde los combates entre insurgentes y Damasco escalaron el viernes.
No obstante, un corresponsal de la televisión estatal dijo que las negociaciones para la rendición en Deraa continúan aún y no hay acuerdo final por diferencias entre los grupos rebeldes.
Los medios estatales reportaron que el gobierno sirio recuperó el paso fronterizo de Nassib con Jordania, controlado por los rebeldes durante tres años, tras un asalto sobre territorio insurgente a lo largo de la frontera apoyado por ataques aéreos rusos.
Fuentes rebeldes dijeron que Rusia garantizará el retorno seguro de los civiles que huyeron de la ofensiva gubernamental en el mayor éxodo de la guerra, con 320.000 personas desplazadas de sus hogares.
Tras siete de años de una guerra en la que han muerto cientos de miles de personas, Bashar al-Assad controla ahora la mayoría de Siria con el apoyo de sus aliados, aunque la mayor parte del norte y una parte del este siguen fuera de sus dominios. Sin embargo, parece haber pocas posibilidades de alcanzar una paz negociada en un conflicto que ha generado la salida al extranjero de seis millones de sirios como refugiados y 6,5 millones más de desplazados a nivel interno.
Rusia ha estado en la vanguardia de la campaña de Deraa, tanto bombardeando como negociando con los rebeldes, a los que se dijo al principio de la ofensiva que no esperaran la ayuda de Estados Unidos.
El próximo objetivo de Assad en el suroeste parece ser las zonas rebeldes de la provincia de Quneitra, en la frontera con los Altos del Golán, un territorio ocupado por Israel donde los combates entre insurgentes y Damasco escalaron el viernes.