Ex juez gobernará de manera interina Pakistán
Pakistán designó el lunes al expresidente de la Corte Suprema Nasir-Ul-Mulk como primer ministro interino hasta unas elecciones generales del 25 de julio, que se prevé que den paso a la segunda transición democrática en el país de 208 millones de habitantes, que cuenta con armamento...



Pakistán designó el lunes al expresidente de la Corte Suprema Nasir-Ul-Mulk como primer ministro interino hasta unas elecciones generales del 25 de julio, que se prevé que den paso a la segunda transición democrática en el país de 208 millones de habitantes, que cuenta con armamento nuclear.
El Gobierno interino usualmente no toma grandes decisiones hasta que se elija a un Gobierno nuevo, aunque podría verse forzado a actuar para apuntalar a la economía ante un empeoramiento del panorama macroeconómico.
La designación del lunes, anunciada por el primer ministro ShahidKhaqanAbbasi, tuvo lugar ante una creciente inestabilidad política y económica y pone fin a semanas de disputas entre el oficialista partido Liga Musulmana de Pakistán y la oposición.
“Ningún paquistaní puede levantar un dedo (contra) un nombre como ese”, dijo Abbasi a los periodistas, sentado junto a SyedKhurshid Ahmed Shah, que encabezó las negociaciones en representación del opositor Partido del Pueblo de Pakistán.
A diferencia del período previo a las dos elecciones anteriores, que fueron opacadas por frecuentes ataques por parte de militantes islamistas, Pakistán ha visto un fuerte declive en la militancia en los últimos años.
Sin embargo, las acusaciones de intromisión por parte de los poderosos militares, con tendencia a realizar golpes de Estado, abundan antes de las elecciones y la Liga Musulmana de Pakistán los acusa de tratar de debilitarla.
Los militares, que han gobernado Pakistán por cerca de la mitad de su historia desde su independencia en 1947, niegan entrometerse en política.
El Gobierno interino usualmente no toma grandes decisiones hasta que se elija a un Gobierno nuevo, aunque podría verse forzado a actuar para apuntalar a la economía ante un empeoramiento del panorama macroeconómico.
La designación del lunes, anunciada por el primer ministro ShahidKhaqanAbbasi, tuvo lugar ante una creciente inestabilidad política y económica y pone fin a semanas de disputas entre el oficialista partido Liga Musulmana de Pakistán y la oposición.
“Ningún paquistaní puede levantar un dedo (contra) un nombre como ese”, dijo Abbasi a los periodistas, sentado junto a SyedKhurshid Ahmed Shah, que encabezó las negociaciones en representación del opositor Partido del Pueblo de Pakistán.
A diferencia del período previo a las dos elecciones anteriores, que fueron opacadas por frecuentes ataques por parte de militantes islamistas, Pakistán ha visto un fuerte declive en la militancia en los últimos años.
Sin embargo, las acusaciones de intromisión por parte de los poderosos militares, con tendencia a realizar golpes de Estado, abundan antes de las elecciones y la Liga Musulmana de Pakistán los acusa de tratar de debilitarla.
Los militares, que han gobernado Pakistán por cerca de la mitad de su historia desde su independencia en 1947, niegan entrometerse en política.