Violencia en Nicaragua deja 7 heridos y un muerto
Integrantes de grupos desestabilizadores en el departamento de Boaco, Nicaragua dejaron un saldo de siete personas heridas pertenecientes al del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Los enfrentamientos se deben a una presión popular que le exige al Gobierno encontrar una salida...



Integrantes de grupos desestabilizadores en el departamento de Boaco, Nicaragua dejaron un saldo de siete personas heridas pertenecientes al del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
Los enfrentamientos se deben a una presión popular que le exige al Gobierno encontrar una salida pacífica a la difícil crisis que atraviesa Nicaragua mediante un diálogo nacional con la mediación de la Iglesia.
Sin embargo el Presidente de turno considera que aquello pasa por un intento de golpe de estado, razón por la cual se niega a aceptar el diálogo. Los grupos violentos arremetieron contra las víctimas mientras estos se dirigían a rescatar a un grupo de mujeres que fueron agredidas en dicha localidad por solicitar paz para su país.
Los heridos fueron trasladados de emergencia a la sede del centro hospitalario José Nieborowsky, donde fueron atendidos por especialistas.
También en Boaco un grupo de mujeres que salieron a las calles con banderas para pedir que cese el cierre de las calles y se permita la libre circulación, fueron agredidas con piedra, según reportaron los medios locales.
A estas acciones vandálicas se suma el asesinato del guardia de seguridad privado, José David Oviedo, a quien le segaron la vida en la localidad de Managua, ubicada en la costa sur de ese país, mientras conducía su motocicleta. Los medios difundieron que Oviedo se movilizaba en su vehículo en el sector de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN) cuando fue asesinado por delincuentes.
Pese a este arremetimiento por parte de los grupos violentos, el pueblo nicaragüense continúa exigiendo que se reestablezca la normalidad en las calles de la nación de América Central.
Los enfrentamientos se deben a una presión popular que le exige al Gobierno encontrar una salida pacífica a la difícil crisis que atraviesa Nicaragua mediante un diálogo nacional con la mediación de la Iglesia.
Sin embargo el Presidente de turno considera que aquello pasa por un intento de golpe de estado, razón por la cual se niega a aceptar el diálogo. Los grupos violentos arremetieron contra las víctimas mientras estos se dirigían a rescatar a un grupo de mujeres que fueron agredidas en dicha localidad por solicitar paz para su país.
Los heridos fueron trasladados de emergencia a la sede del centro hospitalario José Nieborowsky, donde fueron atendidos por especialistas.
También en Boaco un grupo de mujeres que salieron a las calles con banderas para pedir que cese el cierre de las calles y se permita la libre circulación, fueron agredidas con piedra, según reportaron los medios locales.
A estas acciones vandálicas se suma el asesinato del guardia de seguridad privado, José David Oviedo, a quien le segaron la vida en la localidad de Managua, ubicada en la costa sur de ese país, mientras conducía su motocicleta. Los medios difundieron que Oviedo se movilizaba en su vehículo en el sector de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN) cuando fue asesinado por delincuentes.
Pese a este arremetimiento por parte de los grupos violentos, el pueblo nicaragüense continúa exigiendo que se reestablezca la normalidad en las calles de la nación de América Central.