“Qué tiempos aquellos...”
El mapa de la ofensa a Tarija, previo y en la Guerra del Chaco
Producido el mes de febrero de 1927



Producido el mes de febrero de 1927, en fortín Sorpresa, uno de los choques de armas más fuertes entre Bolivia y Paraguay, se crea un Comité Patriótico Nacional en todas las capitales del país. Inicialmente los funcionarios del Estado y luego el pueblo se adscribe a la organización y sostenimiento de las actividades de este Comité.
Entre las varias acciones están la de crear un fondo para huérfanos, en caso de guerra; fondo económico para hospitales de campaña, en fin. Otra iniciativa fue la de imprimir y difundir la mayor cantidad de mapas de Bolivia y en especial del Chaco, señalando los límites del mismo.
Si bien se denominaba en general “Chaco” a los territorios en disputa, específicamente el área territorial en que se daban estos permanentes choques era el que más cerca al río Pilcomayo estaba; es decir los que administrativa y políticamente correspondían a Tarija. Pues fue Tarija la puerta de ingreso y salida de tropas a esa región y era Tarija la que más aportaba con hombres y recursos para que los fortines en dicho territorio se mantengan.
Sin embargo por algún motivo quienes se encargaron del diseño del mapa del Chaco en cuestión no pusieron, como era de esperar, las letras de Tarija sobre esa franja de territorio, sólo pusieron “CHACO BOLIVIANO”, y esto causó inmediata reacción en la población tarijeña que no aceptaba que tal mapa se diera a difusión masiva.
Quejas, representaciones, memorándums, cartas, nada valió. Porque al pasar de un tiempo llegaron a Tarija algunos ejemplares del mencionado mapa. Para qué es decir lo sucedido. Manifestaciones de un lado y del otro salieron elevando la protesta contra el gobierno central que ignoraba de esa manera los esfuerzos de Tarija en bien del avance sobre el territorio en disputa con el vecino país.
Esta cantidad de presión social llegó a los 3 mil y más metros de altura en que estaban los jerarcas del país, en La Paz; pero lo que no pudieron hombres políticos, manifestaciones ruidosas, amenazas y discursos, lo pudo la sagacidad, inteligencia y el tino de una dama tarijeña, cuyo nombre no se nos es permitido dar a publicidad, pero cuyas gestiones resultaron en una urgente solicitud salida desde el Estado Mayor y dirigida al gobierno exigiendo se retiren esos mapas de circulación.
El gobierno central de La Paz haciendo caso a dicha solicitud recogió los más de mil mapas impresos y en una de las colinas cercanas a aquella urbe procedió a quemar el material. Desde ese momento los ejemplares de ese mapa que escaparon a las llamas quedaron como “rara avis” y objeto de persecución por parte de aquellos coleccionistas de documentos únicos o extraños.[1]
En Tarija quedaron algunos ejemplares que pasando el tiempo fueronse perdiendo entre los papeles de familias o de instituciones, mas uno fue recuperado y está en exhibición pública, como un ornamento más, en un local del centro de esta capital.
Te propongo mi querido lector que busques el local donde podrás encontrar en exhibición esa joya de la mapoteca nacional, tal vez uno de los pocos que sobrevivieron al fuego. Por otro lado, el nombre de la dama que logró que se retirara de circulación ese mapa se guarda bajo una cruz de navajas, un ramo de Lilas, en una antigua lápida del cementerio.
[1] El año 1932 el mismo Comité Patriótico, de mano del gobierno central, sacó a publicación otro mapa, sólo que esta vez la ofensa y herida contra Tarija fue más directa. En el mapa mencionado se ponen los límites y nombres al territorio correspondiente al Chaco Chuquisaqueño y Chaco Cruceño, en cuanto toca al territorio perteneciente a Tarija sólo se ven las letras: “Chaco Boliviano”…..