Anhelos de paz
Paz anhela todo, el planeta y sus criaturas humanas, paz es la briza que nos besa, es la lluvia que nos baña, es la quietud de la noche bajo un paisaje de estrellas, paz la inundación de la luz de las brillantes auroras. Paz al canto de las aves sus vuelos de libertad, es la...
Paz anhela todo, el planeta
y sus criaturas humanas,
paz es la briza que nos besa,
es la lluvia que nos baña,
es la quietud de la noche
bajo un paisaje de estrellas,
paz la inundación de la luz
de las brillantes auroras.
Paz al canto de las aves
sus vuelos de libertad,
es la naturaleza en calma,
sus efluvios de nacencia.
La paz nos la enseña Jesús
Nuestro sabio y gran Señor
Con su verbo, con su amor.
¡No! A la guerra nos dice
¡No bombas, no matanzas,
¡No! armas químicas
dañinas, mortíferas.
¡No! discriminación ni racismo
a los seres humanos
que son nuestros hermanos.
¡No! a la soberbia y orgullo
de los pueblos del mundo.
Ya no al feminicidio,
ya no al infanticidio,
un NO al vicio: del alcohol
basta de drogadicción,
basta de barbaries
no perdamos la razón.
Reine la paz en los hogares,
en los colegios,
las universidades,
en instituciones,
en la mente de gobernantes.
La paz es una estrella cautiva
en el corazón del hombre
y la tiene aprisionada,
no la alimente, no la acreciente
no le abre sus puertas,
no le rompe sus cadenas
Brote la paz como renuevo
de los corazones humanos,
florezcan las voluntades
de los pueblos y naciones,
el nervio de la violencia
se lo extirpe para siempre,
la semilla de la paz germine,
la flor de la- alegría se retoñe.
Seamos justos, razonemos
para ganar las aureolas
de la paz anhelada
en medio del. Desierto
de la Insensatez humana,
busquemos los perdidas oasis
en el corazón de Cristo,
bebamos de sus aguas,
escuchemos su palabra,
caminemos por sus sendas.
Sólo Jesús es maestro y señor
de justicia, de concordia,
Dios es quien nos mostrará
¡La paz bendita del amor.
y sus criaturas humanas,
paz es la briza que nos besa,
es la lluvia que nos baña,
es la quietud de la noche
bajo un paisaje de estrellas,
paz la inundación de la luz
de las brillantes auroras.
Paz al canto de las aves
sus vuelos de libertad,
es la naturaleza en calma,
sus efluvios de nacencia.
La paz nos la enseña Jesús
Nuestro sabio y gran Señor
Con su verbo, con su amor.
¡No! A la guerra nos dice
¡No bombas, no matanzas,
¡No! armas químicas
dañinas, mortíferas.
¡No! discriminación ni racismo
a los seres humanos
que son nuestros hermanos.
¡No! a la soberbia y orgullo
de los pueblos del mundo.
Ya no al feminicidio,
ya no al infanticidio,
un NO al vicio: del alcohol
basta de drogadicción,
basta de barbaries
no perdamos la razón.
Reine la paz en los hogares,
en los colegios,
las universidades,
en instituciones,
en la mente de gobernantes.
La paz es una estrella cautiva
en el corazón del hombre
y la tiene aprisionada,
no la alimente, no la acreciente
no le abre sus puertas,
no le rompe sus cadenas
Brote la paz como renuevo
de los corazones humanos,
florezcan las voluntades
de los pueblos y naciones,
el nervio de la violencia
se lo extirpe para siempre,
la semilla de la paz germine,
la flor de la- alegría se retoñe.
Seamos justos, razonemos
para ganar las aureolas
de la paz anhelada
en medio del. Desierto
de la Insensatez humana,
busquemos los perdidas oasis
en el corazón de Cristo,
bebamos de sus aguas,
escuchemos su palabra,
caminemos por sus sendas.
Sólo Jesús es maestro y señor
de justicia, de concordia,
Dios es quien nos mostrará
¡La paz bendita del amor.