A Entre Rios
Como un remanso dormido entre dos ríos de plata, emerge cubriendo el prado con su manto de esperanza. Entre la florida alfombra y sus tejados umbrosos, se evaporan blancas nubes exprimidas de llovizna. Anfora de greda el río en ramilletes de fronda, de mariposas y rondas y canto...



Como un remanso dormido
entre dos ríos de plata,
emerge cubriendo el prado
con su manto de esperanza.
Entre la florida alfombra
y sus tejados umbrosos,
se evaporan blancas nubes
exprimidas de llovizna.
Anfora de greda el río
en ramilletes de fronda,
de mariposas y rondas
y canto de chulupías.
Tu lujuriante campiña
perfumada de arrayán,
con dulzor de zarzamoras
y rojos ceibos en flor
La blanca hostia de la luna
en el cáliz de las nubes,
en comunión con la noche
alumbra los pajonales.
entre dos ríos de plata,
emerge cubriendo el prado
con su manto de esperanza.
Entre la florida alfombra
y sus tejados umbrosos,
se evaporan blancas nubes
exprimidas de llovizna.
Anfora de greda el río
en ramilletes de fronda,
de mariposas y rondas
y canto de chulupías.
Tu lujuriante campiña
perfumada de arrayán,
con dulzor de zarzamoras
y rojos ceibos en flor
La blanca hostia de la luna
en el cáliz de las nubes,
en comunión con la noche
alumbra los pajonales.