Productos sexuales que ofrecen en redes no tienen certificación

En medio de publicaciones de inmuebles, ropa y artículos electrónicos, entre otros, en el Marketplace de Facebook están “escondidos” anuncios que ofrecen a los hombres productos que prometen aumentar el tamaño o mejorar su rendimiento sexual, pero ninguno de ellos cuenta con certificación ni supervisión médica. Se trata de estafas que ponen en riesgo la salud de sus compradores.

Son anuncios que corresponden especialmente a “sex shops” que buscan atraer clientes mediante redes sociales, especialmente de varones que no se sienten satisfechos con el tamaño de su órgano sexual y que relacionan esto a un mayor o menor placer en sus relaciones.

El médico urólogo Álvaro Ramallo advirtió que ninguno de estos productos cuenta con garantía real para su funcionamiento, por lo que se trata de “charlatanería” o publicidad engañosa.

Los anuncios ofrecen estos artículos a diferentes precios, que varían desde los 300 hasta los 1.300 bolivianos, o más, dependiendo de la presentación y el material de los mismos.

Ramallo explicó que se trata de una especie de “bomba al vacío que el paciente usa a tiempo de tener una relación sexual, el instrumento succiona el aire y es como si jalara el pene hasta obtener que se erecte, luego se jala una gomita en la base del miembro que impide que baje la sangre”.

Este artículo, según el especialista, se emplea sobre todo en parejas adultas que enfrentan algún problema sexual y que el varón no puede tomar viagra por alguna falla cardíaca. Pero no aumenta el tamaño del pene permanentemente. Para este mecanismo existen aparatos médicos certificados para usarlos con supervisión, lo que no ocurre con los que se venden libremente en estos anuncios que ofrecen insumos de baja calidad.

El médico explicó que existe un mecanismo denominado “Andropenix”, que logra que el pene crezca mediante la colocación de unas argollas que con el paso del tiempo estiran el miembro. Pero, aclaró que es un sistema que consigue un alargamiento de más o menos un centímetro, no más.

Sobre la demanda de este tipo de productos, indicó que en su mayoría son hombres jóvenes que buscan formas de hacer crecer su pene, los pacientes adultos buscan alternativas mayormente para obtener mayor potencia o duración, para lo que se puede recetar viagra, luego de una evaluación.

Riesgos para la salud

Motivados por mejorar su vida sexual, existen hombres que juegan con su salud, comprando y utilizando insumos que significan un riesgo, incluso para sus vidas.

Ramallo explicó que se presentó incluso el caso de un paciente que se había hecho inyectar ácido hialurónico, pensando que eso mejoraría su vida sexual.

“El ácido hialurónico tiene que ser empleado por un especialista. El paciente quería que su pene crezca y aumente su grosor, pero se fue a un extremo. Era demasiado grueso y le causaba dolor, no podía tener relaciones sexuales”, comentó. El caso tuvo que ser derivado a otro médico para su intervención.

En otra ocasión, un paciente se colocó un anillo que tuvo que ser retirado con una amoladora, pues estaba cortando la circulación de sangre a su pene, que ya presentaba un color morado oscuro.

Atribuyó situaciones de esta naturaleza a una falta de información y falta de criterio. Recalcó que al comprar o usar productos no certificados, el paciente juega con el futuro de su vida sexual y la de su pareja.

Importancia de recibir educación sexual

El urólogo Álvaro Ramallo señaló que estos problemas surgen a raíz de una falta de educación sexual, desde el interior de las familias hasta las escuelas.

“Es importante la orientación sexual, hasta para masturbarse hay que saber maneras y técnicas. Eso define a la larga la relación de pareja, porque de hacerse incorrectamente vienen problemas como la eyaculación precoz”.

Por la abundancia de información errónea, el médico señaló que es importante que al ingresar a la pubertad un adolescente visite a un especialista para conocer sobre educación sexual.