Para la toma de decisiones en la gestión de riesgos
Información y conexión, “armas” al cambio climático en el Chaco
El enfoque de la Adaptación Basada en Ecosistemas no parece ser suficiente, sino que es enriquecido con un enfoque de Adaptación Basada en Comunidades, es decir, con los saberes de sus habitantes
La importancia del acceso y derecho a la información certera y a tiempo para encarar los desafíos del cambio climático, permitirá adoptar decisiones en el ámbito de gestión del riesgo, agricultura, pesca, gestión del agua, turismo, transporte y salud pública, entre otros. Es lo que cita parte de un documento publicado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) es conmemoración al Día de la Madre Tierra, celebrado el pasado 22 de abril.
En ese entendido es que iniciativas como NANUM Mujeres Conectadas y la red del Gran Chaco, Redes Chaco, trabajan bajo el enfoque de Soluciones Basadas en Ecosistemas, como el camino hacia una economía más sostenible para la región chaqueña.
Y es que esta zona, que la componen territorios de Argentina, Bolivia y Paraguay, es considerada la más vulnerable a las adversidades del cambio climático, con efectos en la erosión de suelos, en la desertificación y en el régimen hidrológico.
Estudios de vulnerabilidad climática del Gran Chaco prevén importantes impactos en las próximas tres décadas, particularmente por el mayor riesgo de sequías e inundaciones, según las distintas zonas y el aumento de los fenómenos climáticos extremos, advierte la iniciativa trinacional de resiliencia climática, Gran Chaco Proadapt.
“Esta nueva variabilidad climática ya está afectando a las poblaciones y a sus sistemas productivos, con pérdida de agro productividad, la reducción de la calidad y la disponibilidad del agua, desbordes de ríos, incendios. Urge acelerar la creación de nuevas capacidades, instrumentos, conocimientos y modelos de producción y comercialización que permitan a las comunidades del Gran Chaco y a sus ecosistemas reducir su vulnerabilidad”, señala Mauricio Moresco, coordinador de Gran Chaco Proadapt.
Frente a esta realidad, la importancia de trabajar bajo el enfoque de Adaptación Basada en Ecosistemas cobra más relevancia, como también llegar con conectividad e información a las comunidades más vulnerables.
Bajo esta lógica, la iniciativa NANUM busca conectar a 5.000 familias del Gran Chaco a través del internet para acceder a información climática, compartir el conocimiento y comercializar sus productos, sin embrago, el enfoque de la Adaptación Basada en Ecosistemas no parece ser suficiente, sino que es enriquecido con un enfoque de Adaptación Basada en Comunidades.
“Las comunidades son el lugar donde está el conocimiento para operar sobre el ecosistema. No entendemos la Adaptación Basada en Ecosistemas sin la Adaptación Basada en Comunidades”, señala Agustín Noriega, director de Fundación Gran Chaco.
Si bien las poblaciones del Gran Chaco en su mayoría están conformadas por grupos sociales vulnerables, con los más altos indicadores de pobreza y mortalidad materno-infantil, en la actualidad ellos capitalizan el conocimiento y el saber local que puede ayudar a una adaptación climática real. Alcanzar la conectividad puede acelerar esa adaptación.
“En el mundo actual, caracterizado por un avance tecnológico importante y acelerado al igual que los efectos negativos del cambio climático, la información es clave a la hora de tomar decisiones acertadas frente a estos eventos, teniendo presente la urgencia de emprender acciones para mitigar, adaptarse y monitorear sus impactos en una región altamente vulnerable”, señala Marcela Zamora, gerenta país de NANUM Mujeres Conectadas en Bolivia.
Cambio climático y género
Otro de los factores que resaltan en los últimos años para lograr mecanismos de adaptación es la mirada con perspectiva de género. El cambio climático no es neutral al género, sino que tiende a exacerbar las desigualdades de género existentes.
Si se considera, por ejemplo, que el cambio climático afecta principalmente a las poblaciones pobres del mundo y que el 70% de las personas pobres del mundo son mujeres, se comprende como los efectos negativos que enfrentan las mujeres son mayores. Tanto es así, que las mujeres, niñas y niños tienen 14 veces más posibilidades de morir durante una emergencia o desastre ambiental que los hombres.
“La mirada sobre la comunidad y sobre el ambiente es diferencial. Hay estudios que demuestran que cuando las mujeres van al monte miran otras cosas y hacen un uso distinto que los hombres. Entonces, esta triple mirada de Adaptación Basada en ecosistemas, basada en comunidades y en género son estratégicas para la adaptación en el Gran Chaco”, añade Noriega.
El Gran Chaco y su rol en el planeta
Para Pablo Frere, secretario de Redes Chaco, el Gran Chaco Americano es fundamental para el cuidado del ambiente, es un sitio donde existen especies únicas en el planeta y esta biodiversidad, como su rol de pulmón para el planeta al igual que la Amazonía, es vital.
Recordó que el Gran Chaco Americano es considerado el corazón de Sudamérica, con un bosque de más de 110 millones de hectáreas en el que habitan alrededor de 9 millones de personas, con presencia de más de 20 pueblos originarios y migrantes. Donde habitan más de 3.400 especies de plantas, 500 de aves, 150 de mamíferos, 20 de reptiles y más de 100 especie de anfibios.