Algunos optaron por el comercio informal para sobrevivir
Pandemia: 84% de la población LGTBI perdió su fuente laboral
Desde la gestión 2020 viene trabajando propuestas de proyectos para solicitar a las entidades estatales fondos de capital semilla que les permita reactivar su economía y generar ingresos
Afectados por la crisis económica y sanitaria a causa de pandemia del Covid-19, la población de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales (LGBTI) en Tarija busca alternativas para generar ingresos económicos y sobrevivir, ya que el 84 por ciento de ese grupo perdió su fuente laboral, tras la cuarentena de la gestión pasada. En algunos casos optaron por el comercio informal.
El 28 de junio se conmemoró el Día Internacional del Orgullo, de la Diversidad de Género y Orientación Sexual, si bien la Gobernación de Tarija a través de la Secretaría de Desarrollo Humano y el Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges), realizó la entrega de reconocimientos a miembros LGTBI, para los activistas de esta población aún existen tareas pendientes por atender. Entre ellas, el acceso a la vivienda, la salud, seguridad social y el tema jurídico.
Joel Vela, activista en Derechos Humanos para la población LGBTI en Tarija, señala que la pandemia del coronavirus afectó mucho al sector, en diferentes aspectos, no solo perdieron su fuente laboral, ya que la mayoría generaba sus propios ingresos económicos con diversas actividades y emprendimientos, pero por la cuarentena y luego por las bajas ventas la situación se tornó preocupante. También se acrecentó más la brecha para el cumplimiento de sus derechos.
Según datos recogidos la gestión pasada, Vela refiere que al menos el 27 por ciento del sector está emprendiendo en actividades alternas a modo de sobrellevar esa falta de recursos económicos.
El acceso a la vivienda
Además, una de las grandes brechas de la población LGTBI es el acceso a la vivienda propia, pues al caer sus ingresos y en pandemia se han visto “obligados a volver a sus hogares”, pero en algunos casos sus familiares al conocer su orientación sexual, los condicionaron y atraviesan una “violencia simbólica”.
“El tema de la vivienda preocupa sobre todo la población Trans, que son las más vulnerables, ya que ellas en su mayoría el 84% se dedica al trabajo sexual, porque no tiene oportunidad laboral en otros espacios y al ver reducido sus recursos se limita el acceso a la vivienda, ya sea en alquileres o anticrético”.
Por su parte, María Libertad Chirilla, miembro activo del Colectivo LGTBI Tarija, señala que debido a la discriminación y al no contar con el apoyo familiar, la mayoría de la población desarrolla un trabajo informal y con emprendimientos propios, pero tras la cuarentena y las restricciones sanitarias las ventas son mínimas. Es así que desde la gestión 2020 se viene trabajando propuestas de proyectos para solicitar fondos de capital semilla que les permita reactivar su actividad productiva.
“A pesar que la discriminación persiste en Tarija, se han logrado muchos avances, es así que se lograron alianzas estratégicas con organizaciones, entre colectivos LGTBI y feministas y se está logrando un trabajo bueno en Tarija, para lograr una Tarija libre de discriminación”.
Sin embargo, coincide con Vela, que el acceso a la vivienda es uno de los principales problemas que afrontan. “Es un tema que preocupa mucho, sobre todo las personas adulto mayores que han estado más desamparadas en cuestión de vivienda en la pandemia”, comenta.
Mientras, Hugo Maraz, dirigente del colectivo LGBTI, en el marco de las normativas vigentes, manifestó que exigirán a la Gobernación de Tarija la creación del Consejo Departamental de las Diversidades Sexuales. Además del cumplimiento de la Ley 045, para reactivar los Comités de Lucha Contra la Violencia. “Estos son instrumentos donde nosotros podemos denunciar la intolerancia que muchas veces se tiene todavía hacia la población LGBTI”.
No se cumplen protocolos en salud para el sector LGTBI
Si bien, en la gestión pasada se elaboraron los protocolos de atención para las poblaciones LGTBI, el activista Joel Vela señala que “nunca han sido implementados por los centros de salud”, por tanto, incide para que se cometa indirectamente situaciones de discriminación contra las poblaciones Trans. “Hay una situación que tiene que cambiar, el sistema de salud tiene que abrirse a estas otras realidades y ser más empático. Lo hemos visto también con compañeros que querían donar sangre”.