Entrevista a Efraín Alvarado, presidente de la Asociación de Empresarios Privados Integrados del Chaco
Alvarado: “Con el contrabando no podemos hablar de reactivación”
Los empresarios de la Región Autónoma del Chaco han decidido aunar esfuerzos para sacar adelante a las pocas industrias que quedan y de esa manera reactivar el aparato productivo
De las crisis surgen las oportunidades. Con esa mentalidad se creó la Asociación de Empresarios Privados Integrados del Chaco (AEPI), que tiene como principal objetivo reactivar las industrias y de esa manera la economía de diferentes sectores.
Efraín Alvarado, presidente de esta organización, conversó con El País sobre las expectativas que tiene el sector empresarial en torno a las nuevas autoridades que asumirán en todo el departamento.
Hay metas concretas, como ya no depender de los recursos que genera el gas, concretar la alianzas públicos-privadas y, quizás la más importante, frenar el contrabando por los pasos fronterizos. Pues considera que no se podrá reactivar el aparato productivo si los mercados siguen abarrotados de productos argentinos a bajos precios. Y para ello, espera el apoyo decidido del Estado.
El País (EP): Se aproxima el cambio de autoridades, el 3 de mayo serán posesionadas. ¿Cuál es la expectativa del sector empresarial en el Chaco? Tomando en cuenta que el principal compromiso ha sido la reactivación económica.
Efraín Alvarado (EA): La expectativa es grande. Después de haber tenido años muy complicados, por la pandemia, por el ambiente político que ha sido bastante irregular y por la crisis económica, las expectativas son enormes. Debido a que el sector privado es el sector más importante que tiene cualquier región, porque si en nuestro sector hay estabilidad y condiciones para crecer, con seguridad que no solo el sector empresarial mejoraría su situación sino la población en general mejoraría sus condiciones de vida.
Por eso la expectativa es bastante grande.
EP: Yacuiba es zona fronteriza y tiene dos grandes infraestructuras estatales, la Planta Separadora de Líquidos y la Termoeléctrica del Sur. ¿Estas características han beneficiado al empresariado local de Yacuiba?
EA: Lamentablemente muy poco. La Plata Separadora de Líquidos ha sido construida netamente con mano obra de afuera, incluso hasta los catering fueron contratados desde la ciudad de Santa Cruz, muy poca gente de aquí trabajó en este proyecto.
Y no queremos que se vuelva a repetir esto. Nosotros, como Asociación de Empresarios Privados Integrados del Chaco, estamos en nuestro tercer mes de la renovación de la directiva, así que nuestra mentalidad y nuestro objetivo es que todos los proyectos que se vayan a ejecutar dentro de la Región Autónoma del Gran Chaco se hagan con gente del pueblo. En caso de que no tengamos las condiciones para dar un servicio o la venta de algún producto, recién recurrir a las ciudades vecinas.
Esa es mentalidad y dinámica que vamos a adoptar de ahora en adelante. El objetivo de la Asociación es la integración de toda la Región Autónoma del Chaco, ya no queremos que haya esa mezquindad y esa división que geográficamente, a veces, nos hace daño. Villa Montes por un lado, Yacuiba y Caraparí por otro, y obviamente la ciudad de Tarija por el suyo.
En todo caso, la premisa nuestra es la unificación, primero entre nosotros en el Chaco, y eso nos va llevar a que podamos agarrar al toro por las astas, como se dice por aquí, y los trabajos que se van a ejecutar puedan dinamizar realmente la economía de la región.
EP: ¿Qué es lo primero que deberán hacer las nuevas autoridades para avanzar en la reactivación económica?
EA: Hay mucho por hacer y gran parte depende del Estado. Como sector nos hemos reunido con el Ministro de Obras Públicas, con la Ministra de Planificación y con los representantes de la región en la Asamblea Plurinacional, como es el senador Rejas, la senadora Gallo y la diputada Tupa.
Y eso queremos también destacar, que, por primera vez, vemos a los representantes del pueblo en el Parlamento que se relacionan y se retroalimentan sobre las cosas que debemos hacer en la región.
Y una de las principales tareas que hay que asumir es el freno, o por lo menos la disminución, del contrabando. Porque no podemos hablar de reactivar la economía, el despegue y trabajo de las industrias, las pocas que quedan en la región, si el contrabando sigue azotando nuestra economía.
Y para esto necesitamos la participación y colaboración decidida, pero decidida, de parte del Estado. Ya no con discurso, si no con hechos. Nos hemos reunido con la presidenta de la Aduna Nacional y hemos coincidido en varios puntos de vista. Esperamos que las estrategias que vayan a ejecutar no tarden mucho, porque ya nos hemos reunido con ella hace dos meses y seguimos con lo mismo, seguimos viendo pasar 14 o 15 camiones por las noches, salen de la nada, se desaparecen por obra y gracias, por las trancas no dejan registro, es algo muy complicado.
Pero si no empezamos a frenar este flagelo del contrabando, muy difícilmente vamos a poder hablar de una reactivación en serio. Porque no podemos competir. Por ejemplo, tenemos la Pil Chaco, pero no podemos competir con los procesados y derivados de la leche que entran de la parte argentina. Incluso hasta los productores de granos y de uva han sido afectados, los productores de miel, todos se ven perjudicados por el contrabando.
Entonces, la reactivación no va tener frutos si no frenamos el contrabando.
EP: Se dice que el Chaco ha sido uno de los grandes beneficiados de la explotación petrolera, debido a las regalías. ¿Ese beneficio lo ha sentido el sector privado?
EA: Si, efectivamente. Pero eso también ha hecho que el Chaco se vuelva monodependiente, que simplemente se quede esperando a que el Estado venga a hacer algunas cosas.
Algunas autoridades, en su momento, no han planificado un desarrollo sistemático y sostenible dentro de la región y es por eso que ahora nos encontramos como estamos. Seguimos esperamos que la reactivación en las alcaldías y Gobernación se haga efectiva para que haya algo de inversión pública.
EP: ¿Ha tenido acercamientos con el ejecutivo regional electo, José Luis Ábrego?
EA: Sí, nos hemos reunido con él la anterior semana. Tenemos bastantes esperanzas, porque coincidimos en varios temas e incluso nos ha propuesto que trabajemos en una agenda conjunta, para llevar a cabo una cumbre regional, donde podamos ser parte los empresarios, los actores políticos y que puedan bajar dos o tres ministros con quienes sería fundamental conversar, el Ministro de Planificación, de Obras Públicas, de Economía y de Medio Ambiente y Agua, porque el Chaco necesita soluciones estructurales.
Hemos coincidido bastante con Ábrego y esperamos poder trabajar en esa agenda que de manera preliminar ya la hemos marcado. Si es que las autoridades mantienen esa dinámica que han mostrado hasta ahora, nos va ir bien. Porque las autoridades salientes, y es una pena decirlo, en su miopía administrativa, pensaban que eran la solución a todo, sin tomar en cuenta que la parte privada absorbe más del 70 por ciento de la mano de obra de un pueblo.
En todo caso, las autoridades entrantes están con otra visión, más proactiva, más dinámica y aplaudimos esa actitud, tanto de Ábrego como del señor Carlos Brú, con quien también hemos tenido una reunión preliminar y nos dio a conocer la predisposición que tiene de trabajar con el sector privado y de poner en práctica esa tan anhelada sociedades públicos-privadas.
EP: ¿Cuántas empresas forman parte de esta organización que ahora usted está dirigiendo?
EA: La conforman 18 sectores y tenemos 22 instituciones que son parte de AEPI. La conforman la Asociación de Hoteleros, están los transformadores de materia prima, los prestadores de servicios, están medios de comunicación, la parte de los productores de granos, los ganaderos, los productores de miel, de leche, en fin, todos los sectores que aportan con un granito de arena, que aportan a la economía de la región.
El objetivo de nuestra organización es ser un articulador entre las unidades productivas, para darles mejores condiciones dentro de sus mercados, en lo que se mueven cada una de ella.
Le vuelvo a poner el ejemplo de la Pil Chaco, que necesita 20 mil litros de leche, es el déficit diario que tiene, y esa leche la están comprando de Santa Cruz, imagínese. Entonces, nosotros estamos siendo el puente entre la Pil Chaco y los productores de leche, que dejaron de producir porque no había a quién vender. En todo caso, estamos viendo de generar al interior de esa cadena productiva otro tipo de emprendimientos, como el transporte de lácteos, el mantenimiento de la cadena de frío, el tema de la producción forrajera para los diferentes hatos ganaderos que se pueden formar dentro de nuestra región.
Creemos que por ahí es la verdadera reactivación económica. Nos hemos reunido con el Banco de Desarrollo Productivo, que aparentemente es una panacea y la solución para todo, para algunos funcionarios del Estado. Pero, lamentablemente el BDP no se acomoda a nuestra realidad, porque al parecer está pensando para alguna ciudad en específico o para otro tipo de región, como en todo, como el eje central, donde ya tienen desarrollada su matriz industrial.
Pero nosotros nada, cero, y no podemos acceder a los créditos. Por decirle, si me quiero dedicar a la producción piscícola, según la capacidad de inversión que necesita mi proyecto, necesito un año o tres de experiencia en ese rubro. O sea, son cosas que limitan y la reactivación que requerimos debe ser inmediata.
En todo caso, en la Región del Chaco, tenemos un fondo rotatorio, el cual cuenta con 400 millones de bolivianos, por ahí estamos tratando. Esperamos que desde ahí se pueda acceder a los créditos que hacen falta para mover a la economía que está totalmente desacelerada en nuestra región.