Cierre de campañas en Tarija
Ruiz vs Montes, campañas vistas para su sentencia
Los dos candidatos quemaron sus últimas balas en sus cierres de campaña, donde Ruiz estuvo arropado por Morales y Arce, y Montes por todos sus aliados tarijeños. La inversión y el empleo marcan la agenda
Se cerró definitivamente la carrera electoral más larga de la historia de Bolivia, una carrera que empezó a principios de octubre de 2018, poco después de perder el mar en La Haya, y que ha terminado ayer mismo, a tres días de la votación del balotaje en cuatro departamentos para elegir a su Gobernador. Ni qué contar lo que ha pasado en estos dos años y medio.
En Tarija la campaña ha ido a su propio ritmo y con sus habituales particularidades, porque seguramente es el único departamento donde importa más las subnacionales que las nacionales, y por tanto las segundas son solo la preparación de las primeras, pero esta vez hubo más protagonismo del habitual. En 2019 el FRI cedió la sigla a Carlos Mesa y Adrián Oliva se convirtió en aliado importante, a la vez que el MNR corría en solitario con Virginio Lema y Óscar Montes sumaba a Óscar Ortiz. En la de 2020, el FRI seguía con Mesa, que se llevaba al alcalde Rodrigo Paz de primer senador, y Oliva y Montes saltaban al lado de Jeanine Áñez.
De aquellas campañas salieron los mimbres para la actual, que llega a su fin con las fuerzas más equilibradas que nunca luego de un virtual empata a 38% entre Álvaro Ruíz (MAS) y Óscar Montes (Unidos) con dos discursos enraizados en lo nacional y que han buscado su vida propia en lo departamental.
Álvaro Ruíz se ha presentado como el candidato de la recuperación, aquel que tiene las llaves para llevarse bien con el Gobierno y así, superar la crisis. Óscar Montes inicialmente también se presentó así, lo que le sirvió para superar a Adrián Oliva, (devorado por el contexto agotador de la pandemia), pero que no ha podido utilizar en la recta final por motivos evidentes.
Ayer el MAS armó su escenario en la plaza Uriondo, de nuevo a rebosar con medidas de bioseguridad más que discutibles, y Ruiz contó con el respaldo de Evo Morales y Luis Arce, para que quedara claro cuál es su mensaje, redondeado en los últimos días: inversión de 700 millones de dólares en 100 días; vacunación en 100 días; bono de 500 dólares.
Por su parte, Unidos lo hizo en la mismísima plaza principal y no con más medidas de bioseguridad. Montes, aún tocado por el resultado del debate del lunes, pero arropado por las fuerzas políticas de su alianza, insistió en la seguridad y solvencia de su candidatura y en la necesidad de mantener una Gobernación firme contra el Gobierno central. Su propuesta es empleo y emprendedurismo.
Los cierres
Después de tantas adhesiones compartidas y contraídas durante la segunda vuelta, se esperaban algunos reencuentros sobre el escenario, que finalmente no se dieron.
Gonzalo Torres, por ejemplo, no compartió espacio con Evo Morales y tampoco Luis Alfaro, su lugarteniente durante más de una década en Tarija cuya relación se rompió luego de que este le negara la opción de ser el candidato en 2015 y devino en profundo enemigo.
En el escenario de Unidos brilló en ausencia Mario Cossío, un fichaje contra natura que le dio un perfil diferente al inicialmente pretendido, pero que, además, nunca más volvió a intervenir en campaña.
Pero también hubo amigos. Ruiz no solo estuvo acompañado de amigos de la región, como Carlos Brú y José Luis Ábrego, autoridades electas el 7 de marzo, o de la carismática “Chelita” (Celinda Villaroel), candidata a subgobernadora, sino que también se hicieron presentes el expresidente Evo Morales, el excandidato a gobernador de Santa Cruz, Mario Cronenbold, y claro no podía faltar el presidente Luis Arce.
De lado de Montes estaban sus ya conocidos allegados, como Alberto Valdez, su fiel militante, Mauricio Lea Plaza, en representación de Camino al Cambio, Álan Echart, allegado de Adrián Oliva, pero que esta vez actúa por cuenta propia.
En cuanto a los discursos, Ruiz mantuvo el mensaje que ha sabido calar durante las últimas semanas, quitar el poder a las “roscas que se han llevado la plata de Tarija”, un discurso que secundó el Presidente, quien recalcó que las vacunas contra el Covid serán “para los médicos, para el pueblo, no para la familia de los ricos, para la oligarquía tarijeña”.
Mientras que Montes se notó apagado, con poca algarabía, no hizo énfasis en la propuesta dictatorial de su contrincante, como en anteriores ocasiones, ni al hecho de que exige respeto del Gobierno nacional. Agradeció el trabajo hormiga de sus militantes y recalcó que ya hizo todo lo que tenía que hacer.
Como sea, la campaña queda vista para sentencia, una sentencia que dictarán más de 370.000 tarijeños llamados a las ánforas este 11 de abril y de los que aproximadamente 70.000 no votaron ni por uno ni por otro. El partido está abierto.
elDATO
Votantes
Más de 370.000 tarijeños están llamados a votar este domingo 11 de abril