La UAJMS de Tarija abrió 55 procesos universitarios en ocho años
Las causales para abrir un proceso están referidas a actos en contra de la autonomía, sustracción de documentos, parcialidad en la calificación de pruebas, conducta inmoral y acoso, entre otros
En los últimos ocho años la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho (UAJMS) abrió 55 procesos internos, los cuales tienen que ver con denuncias de retraso en el cargado de notas por parte del docente, consumo de bebidas alcohólicas, falta de rendición de cuentas y de acoso sexual.
Según el Código de Ética y Reglamento de Procesos Universitarios, las causales para abrir un proceso están referidas a actos en contra de la autonomía, sustracción de documentos, parcialidad en la recepción y calificación de pruebas de evaluación, conducta inmoral, actos de acoso sexual, entre otros.
El presidente de la Comisión Sumariante de la UAJMS, Edgar Ortiz indicó que desde el año 2013 a la fecha recibieron 55 casos que fueron investigados y en un 90 por ciento pasaron al Tribunal Facultativo, instancia que debe valorar las pruebas remitidas y emitir una sanción o rechazar el proceso.
Explicó que los últimos casos que ingresaron a la Comisión fueron por consumo de bebidas alcohólicas en predios de la Universidad, por peleas y disturbios en las elecciones de la Federación Universitaria Local (FUL). También recuerda de un caso de acoso sexual en contra de un docente de Entre Ríos.
La Comisión Sumariante está conformada por el Vicedecano de la Facultad de Derecho, dos asesores legales, un representante estudiantil, un docente y un administrativo. Para Ortiz, la cantidad de miembros de esta comisión es grande, si toma en cuenta que solo realizan la fase preparatoria de los casos que se presentan. Entonces, al ser varios miembros, no todos coinciden con el mismo tiempo para reunirse y sesionar, eso también retrasa las investigaciones de las denuncias que llegan hasta esa instancia.
Actualización
Ante esa situación, el funcionario menciona que se debe actualizar el reglamento, el cual data del año 1998. Pide a las autoridades destinar a una sola persona (abogado) que se dedique de manera exclusiva a investigar esas causas, como sucede en otras instituciones estatales.
El vicepresidente de la Confederación Universitaria Boliviana (CUB), Roberto León coincide con Ortiz y recuerda que en años pasados pidieron que se disminuya la cantidad de miembros de la Comisión, con la finalidad de dar celeridad a las investigaciones de las denuncias que se presentan.
“En su momento se solicitó que se pueda modificar el reglamento, porque la comisión no se puede reunir y los casos quedan en nada – comentó el dirigente –. Se vio que, en algunos casos, los catedráticos intimidan a los estudiantes que conforman la comisión, en algunas ocasiones se ayudan entre docentes y no se puede sacar una resolución favorable a las víctimas o a la Universidad. Es un tema que está pendiente y debe resolverse”.
El vicerrector de la UAJMS, Ricardo Colpari, también es consciente de esa situación y explica que los reglamentos deben estar acorde al ritmo que avanza la institución, pero sostiene que por la pandemia el Consejo Universitario no puede sesionar, instancia que debe aprobar este tipo de cambios en las normativas de la estatal tarijeña.
Sanciones
El Código de Ética establece que las sanciones para autoridades, docentes, administrativos es acorde a la gravedad, descuento de haberes de hasta un 20 por ciento, suspensión de 30 y 90 días sin goce de haberes, destitución de la institución de uno a cinco años y destitución del Sistema Universitario de Bolivia.
Para los estudiantes las sanciones son económicas, equivalente a tres veces del valor de la matrícula, suspensión de una gestión académica en las materias que haya infringido las normativas, expulsión temporal de la “U” y del Sistema Universitario de Bolivia.