Proyecto de agua duplicará producción de vid en Tarija
El proyecto de construcción de riego Guadalquivir-Cenavit-Calamuchita, que se entregó manera provisional el 7 de agosto, permitirá duplicar la producción de uva que actualmente se tiene en el valle central de Tarija; también se traduce en multiplicar por dos los ingresos económicos que...
El proyecto de construcción de riego Guadalquivir-Cenavit-Calamuchita, que se entregó manera provisional el 7 de agosto, permitirá duplicar la producción de uva que actualmente se tiene en el valle central de Tarija; también se traduce en multiplicar por dos los ingresos económicos que genera esa actividad en la región.
Según la ficha técnica, la obra tuvo un costo de 201.887.0040, 57 bolivianos, la supervisión demandó 4.795.195,45 y el acompañamiento, significó 2.952.379,57. Lo que hace una suma total de 209.634.615,59 bolivianos.
El proyecto consiste en la construcción de un sistema de riego por gravedad, con una capacidad de conducción de 3.500 litros por segundo. Tiene la capacidad de regar 4.742 hectáreas.
Para el gobernador de Tarija, Adrián Oliva, esta obra, en tema productivo, se constituye en la primera de impacto y con proyección a futuro de toda la era del gas. En el entendido que permitirá regar 3.400 nuevas hectáreas, eso significa que se duplicará la producción de la vid, porque actualmente en el departamento se tiene 3.200.
La autoridad sostiene que la cadena de uvas, vinos y singanis genera actualmente 160.000.000 de dólares anuales, pero con el nuevo sistema de riego se llegará a más de 230.000.000 de dólares.
Al margen de lo que significa ese movimiento económico, para habilitar las hectáreas que están contempladas para ese proyecto, se necesita cerca de 80.000.000 de dólares, que ya están en proceso de inversión por los propios productores.
“Lo más importante, nos permite mirar el futuro en un nuevo modelo de desarrollo. Si San Jacinto cambió la vida del valle central de Tarija, este proyecto duplicará el alcance, y lo que se hará en los próximos años, es triplicar el alcance -comentó Oliva- es así que en solo tres proyectos de riego se permitirá tener nueve mil hectáreas de vid bajo riego”.
El Gobernador explicó que para concretar el nuevo modelo de desarrollo, es necesaria la alianza público-privada, por ello pidió al presidente de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija (ALDT), Guillermo Vega, aprobar la ley que da viabilidad a esa iniciativa, porque no todo lo puede hacer el Estado, sino que también se necesita del aporte de los empresarios.
El secretario general de la comunidad de Calamuchita, Jacinto Pérez, dice que la frontera agrícola no crece si no se tiene agua para riego. Al mismo tiempo, muestra que el sector del agro es bueno para producir, pero falta trabajar en la parte de mercados de comercialización. Este año hubo intento, pero lamentablemente no se pudo concretar. De lo contrario, se tendrá un efecto negativo.
Por su parte, el ejecutivo de la Central de Campesinos del municipio de Uriondo, Alfredo Caiguara, pide a la Gobernación acelerar los trámites de personería jurídica para las asociaciones de productores de uva de las comunidades, que son 52, porque en la actualidad hay mucha burocracia para conseguir ese documento.
Las comunidades beneficiarias del proyecto entregado son 16: Ancón Grande, Ancón Chico Pampa La Villa Grande, Pampa La Villa Chica, Fuerte la Compañía, Valle Bajo, Chorrillos, La Pintada, La Angostura, La Compañía, Concepción, La Higuera, Calamuchita, Muturayo, Colón Norte, Nuevo Amanecer y San Nicolás.
La construcción estuvo a cargo de la Asociación Accidental de Guadalquivir, la supervisión bajo la responsabilidad de la Asociación Accidental Cepas del Valle. Se tiene un total de conducción, entre tubería y canales de riego, de 65,01 kilómetros.
Entre las obras más importantes dentro del proyecto está un puente sobre el río Guadalquivir de 80 metros, la construcción de un túnel de 430 metros y la construcción de 6,89 kilómetros de sifones de 900, 800, 700 y 400 milímetros de diámetro.
Según la ficha técnica, la obra tuvo un costo de 201.887.0040, 57 bolivianos, la supervisión demandó 4.795.195,45 y el acompañamiento, significó 2.952.379,57. Lo que hace una suma total de 209.634.615,59 bolivianos.
El proyecto consiste en la construcción de un sistema de riego por gravedad, con una capacidad de conducción de 3.500 litros por segundo. Tiene la capacidad de regar 4.742 hectáreas.
Para el gobernador de Tarija, Adrián Oliva, esta obra, en tema productivo, se constituye en la primera de impacto y con proyección a futuro de toda la era del gas. En el entendido que permitirá regar 3.400 nuevas hectáreas, eso significa que se duplicará la producción de la vid, porque actualmente en el departamento se tiene 3.200.
La autoridad sostiene que la cadena de uvas, vinos y singanis genera actualmente 160.000.000 de dólares anuales, pero con el nuevo sistema de riego se llegará a más de 230.000.000 de dólares.
Al margen de lo que significa ese movimiento económico, para habilitar las hectáreas que están contempladas para ese proyecto, se necesita cerca de 80.000.000 de dólares, que ya están en proceso de inversión por los propios productores.
“Lo más importante, nos permite mirar el futuro en un nuevo modelo de desarrollo. Si San Jacinto cambió la vida del valle central de Tarija, este proyecto duplicará el alcance, y lo que se hará en los próximos años, es triplicar el alcance -comentó Oliva- es así que en solo tres proyectos de riego se permitirá tener nueve mil hectáreas de vid bajo riego”.
El Gobernador explicó que para concretar el nuevo modelo de desarrollo, es necesaria la alianza público-privada, por ello pidió al presidente de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija (ALDT), Guillermo Vega, aprobar la ley que da viabilidad a esa iniciativa, porque no todo lo puede hacer el Estado, sino que también se necesita del aporte de los empresarios.
El secretario general de la comunidad de Calamuchita, Jacinto Pérez, dice que la frontera agrícola no crece si no se tiene agua para riego. Al mismo tiempo, muestra que el sector del agro es bueno para producir, pero falta trabajar en la parte de mercados de comercialización. Este año hubo intento, pero lamentablemente no se pudo concretar. De lo contrario, se tendrá un efecto negativo.
Por su parte, el ejecutivo de la Central de Campesinos del municipio de Uriondo, Alfredo Caiguara, pide a la Gobernación acelerar los trámites de personería jurídica para las asociaciones de productores de uva de las comunidades, que son 52, porque en la actualidad hay mucha burocracia para conseguir ese documento.
Las comunidades beneficiarias del proyecto entregado son 16: Ancón Grande, Ancón Chico Pampa La Villa Grande, Pampa La Villa Chica, Fuerte la Compañía, Valle Bajo, Chorrillos, La Pintada, La Angostura, La Compañía, Concepción, La Higuera, Calamuchita, Muturayo, Colón Norte, Nuevo Amanecer y San Nicolás.
La construcción estuvo a cargo de la Asociación Accidental de Guadalquivir, la supervisión bajo la responsabilidad de la Asociación Accidental Cepas del Valle. Se tiene un total de conducción, entre tubería y canales de riego, de 65,01 kilómetros.
Entre las obras más importantes dentro del proyecto está un puente sobre el río Guadalquivir de 80 metros, la construcción de un túnel de 430 metros y la construcción de 6,89 kilómetros de sifones de 900, 800, 700 y 400 milímetros de diámetro.