En Tarija se registra cada día un parto adolescente
El hospital Regional San Juan de Dios atendió 143 partos en adolescentes entre enero y abril de 2018, lo cual es un número muy alto, según el jefe de la Unidad de Ginecología, Elvio Fernández, y corresponde al 15 por ciento del total registrado en ese nosocomio. Esas adolescentes provienen...



El hospital Regional San Juan de Dios atendió 143 partos en adolescentes entre enero y abril de 2018, lo cual es un número muy alto, según el jefe de la Unidad de Ginecología, Elvio Fernández, y corresponde al 15 por ciento del total registrado en ese nosocomio. Esas adolescentes provienen de regiones periféricas de la ciudad y del área rural.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Bolivia, expone que todos los días 20.000 niñas menores de 18 años dan a luz en países en desarrollo, entre ellos Bolivia. Esto equivale a 7,3 millones de partos cada año sin incluir el número total de embarazos que culminan en abortos, la mayoría de ellos clandestinos por la ilegalidad constitucional. Si se incluyen todas las gestaciones, el número de embarazos en adolescentes es mucho mayor.
Preocupación
Fernández informó ayer que hasta abril se atendieron 697 partos, de los cuales se hicieron 278 cesáreas y 143 corresponde a adolescentes, que es un número alto, lo que más o menos hace un 15 por ciento del total de atenciones en mujeres con embarazos a término.
“Lo más preocupante es que hay varias mujeres menores a 19 años que tienen más de un bebé. Sin embargo, existen extremos, hace dos años atendimos a una niña embarazada de 12 años proveniente de Tariquía, pero los partos más frecuentes en esta población se dan entre los 15 y 18 años”, explicó Sin embargo, existen excepciones –apuntó-, por ejemplo la semana pasada atendieron una adolescente de 14 años.
Contó que el contexto de donde provienen estas chicas son por lo general de condiciones socioeconómicas particulares, de pocos ingresos económicos, sólo viven con la madre y otras veces tienen un padrastro. Son muy pocas las que provienen de familias con un matrimonio estable.
Provienen por lo general de lugares alejados, de barrios periféricos de la ciudad o del área rural. Menos del 40 por ciento tienen una pareja estable y ninguna es casada. El mayor número son adolescentes sin estudios, que sólo terminaron la primaria y hubo un caso de una que estaba en colegio.
“Gracias a Dios, el hospital tiene la mortalidad más baja de Bolivia en madres parturientas porque se toman los recaudos necesarios”, aseguró a tiempo de explicar que la secuela es que cuando asumen la maternidad deben abandonar muchas cosas como los estudios y asumir las obligaciones propias de criar un bebé.
Fernández expresó su preocupación y apuntó que como asistentes en salud reproductiva utilizan todos los mecanismos de educación sexual para tratar de que la población en este grupo etario no tenga embarazos en los que probablemente la mayoría de ellos no son planificados.
“La planificación familiar es la opción más accesible para evitar el embarazo no deseado y es una responsabilidad de toda la sociedad”, subrayó.
Normas y datos sobre esta realidad
Según los datos del UNFPA, Cercado maneja un 18 por ciento de embarazos adolescentes, mientras que San Lorenzo tiene el 50 y Villa Montes el 25. La media nacional es del 19 por ciento. Sin embargo, Bolivia ocupa uno de los primeros puestos entre los 20 países latinoamericanos con mayor índice de embarazo adolescente.
La diputada, Sonia Condori, señaló en días pasados que se reparten al menos 2.000 preservativos para mujeres y hombres en la entrada del carnaval de Tarija porque las autoridades aprovechan la aglomeración de jóvenes. Pero, ¿Es suficiente brindar información y repartir preservativos en una sociedad en donde la sexualidad es un tabú?
El Código Niña, Niño y Adolescente, en su artículo 24 sobre Protección a la Maternidad, establece que corresponde al Estado, en todos sus niveles, proteger la maternidad garantizando el acceso a la salud. En caso de la niña o adolescente embarazada, se priorizará la prestación de servicios de apoyo psicológico y social, durante el período de gestación, parto y post-parto.
[gallery ids="28445,28438"]
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Bolivia, expone que todos los días 20.000 niñas menores de 18 años dan a luz en países en desarrollo, entre ellos Bolivia. Esto equivale a 7,3 millones de partos cada año sin incluir el número total de embarazos que culminan en abortos, la mayoría de ellos clandestinos por la ilegalidad constitucional. Si se incluyen todas las gestaciones, el número de embarazos en adolescentes es mucho mayor.
Preocupación
Fernández informó ayer que hasta abril se atendieron 697 partos, de los cuales se hicieron 278 cesáreas y 143 corresponde a adolescentes, que es un número alto, lo que más o menos hace un 15 por ciento del total de atenciones en mujeres con embarazos a término.
“Lo más preocupante es que hay varias mujeres menores a 19 años que tienen más de un bebé. Sin embargo, existen extremos, hace dos años atendimos a una niña embarazada de 12 años proveniente de Tariquía, pero los partos más frecuentes en esta población se dan entre los 15 y 18 años”, explicó Sin embargo, existen excepciones –apuntó-, por ejemplo la semana pasada atendieron una adolescente de 14 años.
Contó que el contexto de donde provienen estas chicas son por lo general de condiciones socioeconómicas particulares, de pocos ingresos económicos, sólo viven con la madre y otras veces tienen un padrastro. Son muy pocas las que provienen de familias con un matrimonio estable.
Provienen por lo general de lugares alejados, de barrios periféricos de la ciudad o del área rural. Menos del 40 por ciento tienen una pareja estable y ninguna es casada. El mayor número son adolescentes sin estudios, que sólo terminaron la primaria y hubo un caso de una que estaba en colegio.
“Gracias a Dios, el hospital tiene la mortalidad más baja de Bolivia en madres parturientas porque se toman los recaudos necesarios”, aseguró a tiempo de explicar que la secuela es que cuando asumen la maternidad deben abandonar muchas cosas como los estudios y asumir las obligaciones propias de criar un bebé.
Fernández expresó su preocupación y apuntó que como asistentes en salud reproductiva utilizan todos los mecanismos de educación sexual para tratar de que la población en este grupo etario no tenga embarazos en los que probablemente la mayoría de ellos no son planificados.
“La planificación familiar es la opción más accesible para evitar el embarazo no deseado y es una responsabilidad de toda la sociedad”, subrayó.
Normas y datos sobre esta realidad
Según los datos del UNFPA, Cercado maneja un 18 por ciento de embarazos adolescentes, mientras que San Lorenzo tiene el 50 y Villa Montes el 25. La media nacional es del 19 por ciento. Sin embargo, Bolivia ocupa uno de los primeros puestos entre los 20 países latinoamericanos con mayor índice de embarazo adolescente.
La diputada, Sonia Condori, señaló en días pasados que se reparten al menos 2.000 preservativos para mujeres y hombres en la entrada del carnaval de Tarija porque las autoridades aprovechan la aglomeración de jóvenes. Pero, ¿Es suficiente brindar información y repartir preservativos en una sociedad en donde la sexualidad es un tabú?
El Código Niña, Niño y Adolescente, en su artículo 24 sobre Protección a la Maternidad, establece que corresponde al Estado, en todos sus niveles, proteger la maternidad garantizando el acceso a la salud. En caso de la niña o adolescente embarazada, se priorizará la prestación de servicios de apoyo psicológico y social, durante el período de gestación, parto y post-parto.
[gallery ids="28445,28438"]