Fernanda y Marcelo Romero innovan con jugos de uva en Tarija
El emprendimiento inició con la intención de aportar a la economía de su hogar.
María Fernanda y Marcelo Pantaleón Romero Romero son dos hermanos tarijeños de 20 y 26 años que crearon juntos El Cumpa, un emprendimiento basado en jugos analcohólicos de uva. A la par, Fernanda cursa el último año de la carrera de Ingeniería Financiera, mientras que Marcelo es Ingeniero Agrónomo, por lo que conjugan sus conocimientos para trabajar en su negocio.
La familia de estos dos hermanos tiene una larga tradición ligada a las uvas y viñedos. Fernanda cuenta que su abuelo fue de los primeros en tener un viñedo en El Valle, donde nació su madre y heredó el oficio. Los problemas con el precio de la uva para los productores locales afectaron a la familia. El contrabando y la pandemia por covid-19 terminaron de ponerlos en jaque. Motivo por el cual Fernanda y Marcelo empezaron a cuestionarse cómo apoyar a su familia.
Sabían que debían trabajar con algún derivado de la uva. Tras descartar la mermelada y el vino, optaron por los jugos sin alcohol, ya que, con el ejemplo de Brasil, vieron el potencial que tenía el producto. Era diciembre de 2020 y la idea comenzaba a tomar forma.
“Creamos El Cumpa para aportar a la economía de nuestra familia”.
En febrero de 2021 inició la producción, hasta marzo. Contaron con el apoyo de su familia e invirtieron sus ahorros para la maquinaria, principalmente los de Marcelo, quien tenía más, confiesa Fernanda. La primera etapa consistió en ofrecer el producto a familiares y amigos
En julio lanzaron los jugos oficialmente al mercado y empezaron a promocionarse por redes sociales. Actualmente tienen dos tipos de jugo: jugo blanco de uva moscatel y jugo tinto de uva red globe, ambos sin alcohol ni conservantes, a Bs.15 la botella de 500 ml. Para el futuro planean ampliar el abanico de productos.
Uno de sus logros es formar parte de los 47 emprendimientos seleccionados por la Incubadora de Empresas.
Fernanda resalta que la creación de la marca, y la elección del nombre, se trabajó con miras a ventas a nivel nacional, pues tienen confianza en que su producto pronto trascenderá los límites del departamento. Además, menciona también que el jugo de uva tiene buenas propiedades para la salud.
Para el futuro, Fernanda y Marcelo tienen en mente no solo ampliar la variedad de productos, sino también consolidar una bodega y, algún día, lograr exportaciones al extranjero. Cada uno trabaja con los conocimientos de su área de estudio y se complementan con ellos, por lo que la confianza no es algo que les falte.