Una espalda armoniosa
José Arciénaga Preparador físico Si bien los pectorales, los brazos y las piernas son indispensables en un cuerpo trabajado, la espalda es elemental para cambiar el aspecto corporal, pues es una zona difícil de trabajar, pero una vez que se realiza un buen trabajo, el grupo muscular que...



José Arciénaga Preparador físico
Si bien los pectorales, los brazos y las piernas son indispensables en un cuerpo trabajado, la espalda es elemental para cambiar el aspecto corporal, pues es una zona difícil de trabajar, pero una vez que se realiza un buen trabajo, el grupo muscular que marca un buen volumen para el resto del torso estará asegurado.
José Arciénaga, preparador físico, explica que una espalda trabajada correctamente permite lucir un torso esbelto. Éste aspecto muy trabajado por quienes se inclinan al fisicoculturismo. Al mismo tiempo indica que los músculos de la espalda tienen que ver con la asimetría del pecho, por lo que trabajarlos debe ser una de las prioridades a la hora de entrenar.
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Por ello aconseja que es necesario especificar a los entrenadores cuál es la expectativa que se quiere alcanzar en esta parte del cuerpo, ya que una sobredimensión podría significar un resultado que es generalmente bien recibido por los hombres pero no por la mayoría de las mujeres, que prefieren un estilo más tonificado y afinado.
Si bien los pectorales, los brazos y las piernas son indispensables en un cuerpo trabajado, la espalda es elemental para cambiar el aspecto corporal, pues es una zona difícil de trabajar, pero una vez que se realiza un buen trabajo, el grupo muscular que marca un buen volumen para el resto del torso estará asegurado.
José Arciénaga, preparador físico, explica que una espalda trabajada correctamente permite lucir un torso esbelto. Éste aspecto muy trabajado por quienes se inclinan al fisicoculturismo. Al mismo tiempo indica que los músculos de la espalda tienen que ver con la asimetría del pecho, por lo que trabajarlos debe ser una de las prioridades a la hora de entrenar.
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Por ello aconseja que es necesario especificar a los entrenadores cuál es la expectativa que se quiere alcanzar en esta parte del cuerpo, ya que una sobredimensión podría significar un resultado que es generalmente bien recibido por los hombres pero no por la mayoría de las mujeres, que prefieren un estilo más tonificado y afinado.