Denuncian torturas y vejámenes en un cuartel del Beni
Al presentar la denuncia, una de las madres mencionó que su hijo llegó a las 12:30 de la medianoche y no pudo dormir porque estaba “trastornado”



Un caso genera consternación en los padres de los conscriptos del Regimiento Militar de la comunidad de Casarabe de Trinidad, Beni. Imágenes e informes preliminares dan cuenta de vejámenes y torturas que ahora son investigados por la Fiscalía.
El fiscal Departamental de Beni, Gerardo Balderas, informó el sábado que la institución a su cargo inició una investigación al Sargento 2do Cristian F. P. Q., de 28 años de edad, quien es sindicado por el delito de vejaciones y torturas, lesiones graves y leves y coacción, en contra de soldados del citado cuartel militar. El uniformado fue aprehendido y se encuentra en celdas policiales a la espera de que se defina su situación legal.
El fiscal de materia, Yery Mamani, informó que el hecho ocurrió el 4 de febrero de 2025, en horas de la noche. Según el cuaderno de investigación, el militar pidió a uno de los soldados traer un palo de tacuara y con él empezó a golpear a los conscriptos.
No conforme con eso. Les ordenó que se desnuden y con un cable volvió a golpear a las víctimas. Luego los metió a un pozo del que después todos escaparon.
Tres soldados se quedaron con el sargento para ayudarlo a identificar y buscar a quienes escaparon al monte. Algunos regresaron para recoger sus ropas, logrando llegar a sus casas en la tarde y noche.
Al presentar la denuncia, una de las madres mencionó que su hijo llegó a las 12:30 de la medianoche y no pudo dormir porque estaba “trastornado”.
Defensoría
La Defensoría del Pueblo se pronunció sobre este caso y en un comunicado indicó que “tomó conocimiento de la vulneración de derechos humanos y dignidad de ocho soldados del Regimiento de Infantería 29 “Capitán Echeverría”.
Los “padres de los soldados agredidos física y psicológicamente interpusieron una denuncia ante el Ministerio Público para dar con los responsables de las vejaciones a sus hijos, hechos que además estarían ligados a cobros económicos irregulares”, se añade.
Además puntualizó que “se tiene conocimiento que, de los ocho soldados víctimas de agresiones, solo cinco fueron valorados por el médico forense, uno no dio su consentimiento y los otros dos serían menores de edad y aún no habría recibido valoración de un médico forense; por lo que, desde la Defensoría del Pueblo se realizan las gestiones para la intervención de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA)”.