Se trata de un sacerdote
"Confesionario UCB" saca a la luz caso de acoso en Tarija
La víctima señala que habría sufrido estas agresiones por parte del "padre" que dictaba la materia Cristianismo a través del Cine.



Mediante la página de Facebook denominada “Confesionario UCB” se publicó una nueva denuncia de acoso sexual en contra de una ex estudiante de la Universidad Católica Boliviana. Esta vez de la regional Tarija, quien señala haber sido víctima de ataques por parte de un sacerdote a cargo de una de las materias de Cristianismo, quien habría intentado tocarla y besarla.
Se trata de la “confesión 117” que corresponde a una mujer de 36 años que asegura que el hecho ocurrió cuando a sus 21 cursaba la materia Cristianismo a través del Cine. Ella indica haber borrado de su memoria el nombre completo del sacerdote, pero sí recuerda que vivía en una iglesia del barrio La Tablada.
De acuerdo a su relato, todo empezó cuando el sujeto cambió su trato hacia ella, comenzó a hablarle de libros, películas y poesía. Es así que un día le dijo que fuera a su casa para poder entregarle material sobre el curso.
“Yo soy mamá, en ese entonces mi hija tenía dos años y él lo sabía. Cuando lo busqué por el ‘material’ que me tenía que entregar, cerró la puerta del cuarto y de manera forzada intentó tocarme y besarme. Me asusté muchísimo, solo quería que abra la puerta. Atiné a llamar al papá de mi hija y pedir que me soltara. Salí de allí forcejeando con él, nunca lo hablé en la universidad, solo quería que su materia terminara y no verlo nunca más”, dicta su historia.
La víctima indica que no quiso hablar ni denunciar en ese momento. No fue hasta que en pasados días vio cómo comenzaron a publicarse las historias de más de 30 mujeres que también sufrieron algún tipo de violencia sexual, hasta que dimensionó la gravedad del asunto y cobró valor para hacer pública su historia mediante esta plataforma.
“Es muy difícil hablar de estos temas, solo ahora que soy más grande entiendo la gravedad. Estos días que tantas hermanas se animaron a hablar se removió en mí el recuerdo y la rabia. Busqué por todos los medios su nombre completo, imagino que lo tienen registrado aún (…) Mi memoria lo enterró, no volví a hablar de eso por más de diez años. Me llenó de valor saber que visibilizar estas violencias es indispensable. Me sumo hermanas”, concluyó.
Además, en su relato ella comenta que al indagar sobre el sujeto tomó conocimiento de que él también acudía a prostíbulos con estudiantes y que había otras estudiantes que pasaron lo mismo que ella.
En respuesta a su historia, otras personas le expresaron su apoyo bajo la consigna “#Yotecreo”.
Al respecto, el director de la Fuerza Especial de Lucha contra la Violencia (FELCV), mayor Dulfredo Gorostiaga, señaló que “nosotros vamos a activar un mecanismo de verificación para comunicarnos con la víctima y si amerita iniciar la denuncia, lo vamos a hacer”.
Desde el Ministerio de Gobierno se instruyó investigar todas las denuncias, que permitieron incluso revelar una red de acoso que operaba en fiestas universitarias, y casos que se publicaron y la institución se ofreció a colaborar en estas tareas.