Mujer vive calvario junto a alcohólico por sus amenazas
Una mujer finalmente perdió el temor y se animó a denunciar a su concubino, cansada de las agresiones y amenazas que recibía constantemente de él; un sujeto que tenía problemas con la bebida pero que además la insultaba, golpeaba y amenazaba con quitarse la vida si es que ella lo...
Una mujer finalmente perdió el temor y se animó a denunciar a su concubino, cansada de las agresiones y amenazas que recibía constantemente de él; un sujeto que tenía problemas con la bebida pero que además la insultaba, golpeaba y amenazaba con quitarse la vida si es que ella lo denunciaba.
De acuerdo a la denunciante V.J.U. (según sus iniciales), de 40 años de edad y que vive en la comunidad de Rujero, su pareja L.R.G. (de acuerdo a sus iniciales) sería el causante del calvario que ella vive desde hace varios años, pero que empeoró desde que le arrebataron a su hijo por culpa de sus agresiones y alcoholismo.
La mujer declaró que la última agresión que recibió de él, ocurrió cuando ella y su concubino se encontraban en su terreno trabajando y de pronto el sindicado comenzó a consumir bebidas alcohólicas. Con el pasar de las horas el sujeto se puso agresivo y comenzó a insultar a su pareja con adjetivos denigrantes, por lo que ella reaccionó y le dijo que se callara, ya que por su culpa le habían quitado a su hijo de 5 años de edad, en agosto del año pasado.
Aquel reclamo de la víctima fue suficiente para enfurecer al sujeto quien tras escuchar decir aquello a la mujer, procedió a darle un lapo a la víctima, golpe que la tiró al suelo y con esto, el sujeto comenzó a patearle en la espalda, así como arrastrarle por el suelo.
Tras esto, la víctima declaró que se fue llorando a su casa y unas horas más tarde, su concubino llegó a su domicilio donde empezó nuevamente a insultarla, acusándola de estar con otro hombre, pero además, la amenazó diciendo que si ella lo denunciaba, él se iba a quitar la vida. Tras decir todo esto, él la sacó de su casa y no la dejó entrar más hasta el día siguiente.
Ella recordó que ese día, una vez más, decidió no denunciarlo temerosa de que él cumpliera su palabra, puesto que afirmó que su concubino tiene problemas con las bebidas y que incluso asiste ocasionalmente a terapias de rehabilitación en Intraid.
Él varias veces me amenazó, no me dejó salir donde mi familia y hasta me quitó mi celular para que no me comunique con nadie, y en todas esas ocasiones, le hago caso porque tengo miedo de que me pegue o que se quite la vida.
De acuerdo a la denunciante V.J.U. (según sus iniciales), de 40 años de edad y que vive en la comunidad de Rujero, su pareja L.R.G. (de acuerdo a sus iniciales) sería el causante del calvario que ella vive desde hace varios años, pero que empeoró desde que le arrebataron a su hijo por culpa de sus agresiones y alcoholismo.
La mujer declaró que la última agresión que recibió de él, ocurrió cuando ella y su concubino se encontraban en su terreno trabajando y de pronto el sindicado comenzó a consumir bebidas alcohólicas. Con el pasar de las horas el sujeto se puso agresivo y comenzó a insultar a su pareja con adjetivos denigrantes, por lo que ella reaccionó y le dijo que se callara, ya que por su culpa le habían quitado a su hijo de 5 años de edad, en agosto del año pasado.
Aquel reclamo de la víctima fue suficiente para enfurecer al sujeto quien tras escuchar decir aquello a la mujer, procedió a darle un lapo a la víctima, golpe que la tiró al suelo y con esto, el sujeto comenzó a patearle en la espalda, así como arrastrarle por el suelo.
Tras esto, la víctima declaró que se fue llorando a su casa y unas horas más tarde, su concubino llegó a su domicilio donde empezó nuevamente a insultarla, acusándola de estar con otro hombre, pero además, la amenazó diciendo que si ella lo denunciaba, él se iba a quitar la vida. Tras decir todo esto, él la sacó de su casa y no la dejó entrar más hasta el día siguiente.
Ella recordó que ese día, una vez más, decidió no denunciarlo temerosa de que él cumpliera su palabra, puesto que afirmó que su concubino tiene problemas con las bebidas y que incluso asiste ocasionalmente a terapias de rehabilitación en Intraid.
Él varias veces me amenazó, no me dejó salir donde mi familia y hasta me quitó mi celular para que no me comunique con nadie, y en todas esas ocasiones, le hago caso porque tengo miedo de que me pegue o que se quite la vida.