Lo mató y se hizo un collar con su oreja
Larry Mark, de 58 años, quien cumple una condena a cadena perpetua por un asesinato cometido en 1981, mató a su compañero de celda, le sacó los ojos y una oreja, a la que usó como collar. El hecho ocurrió en el penal Columbia de Lake City, donde son alojados los reos más peligrosos del...



Larry Mark, de 58 años, quien cumple una condena a cadena perpetua por un asesinato cometido en 1981, mató a su compañero de celda, le sacó los ojos y una oreja, a la que usó como collar.
El hecho ocurrió en el penal Columbia de Lake City, donde son alojados los reos más peligrosos del estado, y el macabro hallazgo recién fue descubierto horas después, cuando el criminal fue a tomar el desayuno exhibiendo la oreja cercenada como un trofeo.
Entonces, los guardias revisaron su celda y encontraron el cuerpo ensangrentado, envuelto en sábanas. Según trascendió, los dos presos mantenían una mala relación, por lo que se habían provocado durante mucho tiempo, incluyendo la amenaza de “comerse” los ojos.
Sin embargo, se desconoce qué ocurrió con los órganos que le arrancaron a la víctima. “Cualquier pérdida humana a manos de un preso es intolerable, estamos trabajando con las autoridades para investigar esta muerte y asegurar que el culpable sea tratado con el peso de la ley”, anunció, en medio de la consternación general, una vocera del Departamento de Correccionales de Florida.
El hecho ocurrió en el penal Columbia de Lake City, donde son alojados los reos más peligrosos del estado, y el macabro hallazgo recién fue descubierto horas después, cuando el criminal fue a tomar el desayuno exhibiendo la oreja cercenada como un trofeo.
Entonces, los guardias revisaron su celda y encontraron el cuerpo ensangrentado, envuelto en sábanas. Según trascendió, los dos presos mantenían una mala relación, por lo que se habían provocado durante mucho tiempo, incluyendo la amenaza de “comerse” los ojos.
Sin embargo, se desconoce qué ocurrió con los órganos que le arrancaron a la víctima. “Cualquier pérdida humana a manos de un preso es intolerable, estamos trabajando con las autoridades para investigar esta muerte y asegurar que el culpable sea tratado con el peso de la ley”, anunció, en medio de la consternación general, una vocera del Departamento de Correccionales de Florida.