¡Sorpresa! hombre en bolsa de residuo “resucitó”
Las guerras narco en México suelen cobrarse víctimas a menudo. Y sus cuerpos aparecen diseminados por todos lados. Un lugar común es el costado de la ruta, y justo a la vera de la que une Distrito Federal con Querétaro apareció uno. O al menos eso creyeron los policías que se aceraron...
Las guerras narco en México suelen cobrarse víctimas a menudo. Y sus cuerpos aparecen diseminados por todos lados. Un lugar común es el costado de la ruta, y justo a la vera de la que une Distrito Federal con Querétaro apareció uno.
O al menos eso creyeron los policías que se aceraron alertados por la presencia de un cuerpo. El mismo estaba tapado con una bolsa negra, de la cintura hacia arriba. Inmóvil, el NN yacía sin dar indicios de vida, por lo que los uniformados decidieron delimitar el lugar para realizar las pericias.
Y fue en ese momento, donde se dieron cuenta que “el hombre de la bolsa” no estaba muerto, sino que estaba profundamente dormido.
Al parecer la bolsa le servía para taparse los rayos del sol y después de un interrogatorio con los policías, el joven fue apodado como “El Lázaro”, en referencia al personaje de la religión católica porque volvió a la vida.
Los efectivos contaron que pensaron que el hecho se trataba de un nuevo caso de un asesinado por los grupos sicaros mexicanos, que dejan a sus víctimas generalmente en bolsas negras.
O al menos eso creyeron los policías que se aceraron alertados por la presencia de un cuerpo. El mismo estaba tapado con una bolsa negra, de la cintura hacia arriba. Inmóvil, el NN yacía sin dar indicios de vida, por lo que los uniformados decidieron delimitar el lugar para realizar las pericias.
Y fue en ese momento, donde se dieron cuenta que “el hombre de la bolsa” no estaba muerto, sino que estaba profundamente dormido.
Al parecer la bolsa le servía para taparse los rayos del sol y después de un interrogatorio con los policías, el joven fue apodado como “El Lázaro”, en referencia al personaje de la religión católica porque volvió a la vida.
Los efectivos contaron que pensaron que el hecho se trataba de un nuevo caso de un asesinado por los grupos sicaros mexicanos, que dejan a sus víctimas generalmente en bolsas negras.