Vive pensando que algún día te vas a morir

Cuántas veces nos la pensamos tanto para ponernos ese vestido por mil motivos: que si estoy gorda, que si se me ve muy corto; cuando al final algún familiar o algún médico de la morgue nos va a terminar vistiendo como les dé la gana.

Cuántas veces lo pensamos para realizar un viaje en auto porque es cansador, porque es muy largo; cuando al final nos van a transportar en una carroza fúnebre hacia un lugar del que nunca vamos a salir.

Cuántas veces nos arreglamos y vemos ciertas marcas en la cara y en el cuerpo y nos quejamos y nos da pena, cuando al final tendremos una marca enorme que nos dejara la autopsia.

Cuántas veces nos quejamos de nuestra familia sin pensar que algún día estaremos solos con completos desconocidos en un cuarto frío.

Valora todo, cada momento cada sensación: el aire, los árboles, lo bueno y lo malo, ¡atrévete! Haz ese viaje, ponte ese vestido... porque al final de cuentas algún día estaremos cubiertos de tierra.