“Violencia hacia la mujer”

y eso solo en cifras oficiales. Las personas que de alguna u otra forma trabajamos en derechos humanos, en igualdad y equidad de género y temas relacionados sabemos muy bien que estas cifras son mucho mayores y que requieren una mayor atención.Después de recordar este 25 último el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, asistir a una serie de actos, escuchar discursos, notas de presa, etc., etc., etc., me quedo en la sesera con más de una pregunta sin responder  ¿Cuántas personas entienden lo que es la violencia hacia la mujer?, ¿Cuántas mujeres tienen consciencia de vivir en situación de violencia?, ¿Cuántos hombres entienden lo que es ser agresor, o las formas en que ejercen violencia? ¿Cuántos están dispuestos a cambiar?, ¿Cuántas están dispuestas a denunciar?... de seguro ningún lector me podrá dar respuestas y a más de uno le puede avergonzar solo en pensar en su situación actual, de algún ser querido o conocido que vive o ejerce violencia…. ¿No es así? Porque la violencia hacia la mujer se ha naturalizado tanto que ni nos damos cuenta hasta que algo o alguien nos hace entender que somos agresores… o somos víctimas.En este trajín de actos, pude participar de la presentación del proyecto de “Ley Integral para Garantizar una  Vida Libre de Violencia a las Mujeres” el cual trato de resumir un punto que me parece importante. La ley actual reconoce solo la violencia física, psicológica y sexual…. Esta nueva nos muestra un abanico muy amplio y que puede sorprender a más de uno, estas son:a) Violencia física; b) Violencia Femnicida; c) Violencia Psicológica; d)Violencia Mediática; e) Violencia Simbólica y/o encubierta; f) Violencia por Discriminación Racial; g) Violencia Sexual; h) Acosos Sexual; i) Violencia a los derechos sexuales; j) Violencia a los derechos reproductivos; k) Violencia Obstétrica; l)Violencia por Esterilización Forzada; m) Violencia por interrupción forzada de embarazo; n) Violencia Económica; ñ) Violencia Patrimonial; o)Violencia Laboral; p) Violencia en los ámbitos educativos; q) Violencia política; r) Violencia Institucional; y s) cualquier otra forma análoga que dañe la dignidad humana, integridad o la libertad de las mujeres.Otra cosa que me sorprende es que las penas en algunos casos de violencia hacia las mujeres son más fuertes y que se plantea la creación de casas de refugio y también de centros de “re – habilitación” de los agresores. Todos estos aspectos son importantes, como psicólogo se de los tremendos efectos de la violencia a las mujeres sobre su psique, su sexualidad, su físico y sé que se requiere de un nivel de especialización para poder tratar a estas personas. En el caso de los agresores es también un proceso que lleva años de terapia.Hoy, de momento deseo alegrarme de estas iniciativas, e invitarles a que puedan tomarse un minuto de sus vidas par a reflexionar sobre la violencia…  ¿Soy victima? ¿Soy Aresor(a)? ¿Soy ambos (as)?... cualquiera que sea tu respuesta, veras que todos necesitamos trabajar sobre el asunto. Las mujeres que en su mayoría son víctimas y necesitan empoderarse de sus derechos para hacerlos respetar, y los hombres que generalmente son los agresores y que necesitan empezar a cambian  la forma en que ejercen el poder en sus relaciones. Tanto hombres y mujeres tenemos muchas veces demasiado estructuradas cogniciones de género, prejuicios, ideas machistas, patriarcalistas y colonialistas, por ello todos debemos de trabajar para cambiar la forma en que pensamos. De seguro nos haremos un bien primero a nosotros y luego a nuestro medio social. Mucho ánimo y muchos éxitos…!!!!*Psicólogo / Director de la Organización para el Desarrollo Humano integral