Intercesión

Es un hablarle a Dios, es buscar a Dios que es nuestro Padre y a El acudimos con nuestras súplicas, estas oraciones están llenas de matices, pedir, reclamar, invocar, llamar, gritar, clamar en la oración.Ya en las religiones primitivas la necesidad de la presencia y la ayuda de un Dios,...

Es un hablarle a Dios, es buscar a Dios que es nuestro Padre y a El acudimos con nuestras súplicas, estas oraciones están llenas de matices, pedir, reclamar, invocar, llamar, gritar, clamar en la oración.Ya en las religiones primitivas la necesidad de la presencia y la ayuda de un Dios, obligó al hombre a orar, oprimido por el peso de diversos males, el hombre buscó la divinidad, buscó a ese ser superior que podría ayudarlo; y lo buscó orando y ofreciendo dones.Las expresiones son: ¡Escucha! ¡Ten piedad! ¡Recíbenos!, etc.Es el sentimiento de nuestra miseria que  nos lleva a buscar la protección de Dios.La oración es un encuentro con Dios, así no hayamos alejado de El, la oración es ya un retorno a El.Cuando un grupo de personas se reúnen para orar por otros, es un grupo de intercesión, también puede interceder cualquier persona que  ore a Dios por los demás.Hay hermanos a los que Dios mismo ha constituido centinelas a los cuales les ha dado un carisma particular de intercesión en beneficio de los hermanos y por lo tanto gozan de un favor especial de Dios; estos son los hermanos que normalmente forman parte del grupo de intercesión por determinadas necesidades sobretodo de sufrimiento personal.Es la oración de intercesión uno de los tipos característicos de la oración cristiana que nos acerca a Jesús único intercesor ante el Padre a favor de los pecadores (Rom 8,34) El propio Espíritu santo intercede por nosotros.Interceder es pedir a favor de otro, es lo propio de un corazón sensible ante el sufrimiento del hermano y conforme a la misericordia de Dios.La intercesión cristiana participa de la de Cristo, es la expresión de la comunión de los santos.En la intercesión el que ora busca no su propio interés, sino el de los demás; hasta rogar por los que les hacen el mal.Las primeras comunidades cristianas vivieron intensamente esta forma de oración, la intercesión de los cristianos no tiene fronteras, se pide por todos los hombres, por los pobres, por los enfermos, por los huérfanos, por las familias, por los que rechazan el evangelio, etc.Para interceder no es necesario un lugar especial, se puede orar en la intimidad de tu habitación, en la iglesia, frente a la Eucaristía, o reuniéndose con otras personas; orar con otros nos ayuda, nos sostiene y tiene una potencia peculiar sobre Dios, porque la promesa de Jesús se cumple: “Donde hay dos o tres reunidos en mi nombre yo estoy en medio de ellos”.Ese orar juntos es también establecer con los otros una comunión intensa de oración.La oración de Intercesión requiere algunas condiciones esenciales  como la fe o sea la confianza, la perseverancia, el perdón y la asistencia del Espíritu Santo.Debemos pedir a Dios no solo por las cosas espirituales sino que tenemos que aprender a dejarlo entrar en todos los aspectos de nuestra vida. “No se angustien por nada, sino que en toda necesidad, manifiesten a Dios, sus necesidades con oraciones, súplicas y acciones de gracias” (Fil.. 4,6)Jesucristo dice que la respuesta de Dios es segura frente a la oración llena de fe: “Todo lo que pidan con fe en la oración lo obtendrán” (Mt. 21,22) Sin embargo parece que a veces Dios no nos quiere escuchar.En realidad ciertas  cruces que no estamos en condiciones de comprender, son necesarias para nuestro bien, para nuestra sanación mas profunda, para nuestra salvación o conversión.Debemos orar por los demás, por las personas que sabemos que están sufriendo, eso es caridad y caridad es amor,  lo que Dios quiere de nosotros

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