El escándalo y el litio

Y no es porque no haya hoteles inclusive más costosos, que los debe haber, sino porque el personaje, en este caso, no es un heredero de monumental fortuna, sino simple y llanamente un banquero.Por ahí comienzan los recelos y las sospechas. Luego, comienza a circular la versión de que todo era...

Y no es porque no haya hoteles inclusive más costosos, que los debe haber, sino porque el personaje, en este caso, no es un heredero de monumental fortuna, sino simple y llanamente un banquero.Por ahí comienzan los recelos y las sospechas. Luego, comienza a circular la versión de que todo era una conspiración (posiblemente del presidente Sarkozy, para anular un competidor en las elecciones ya próximas. Eso también, de entrada, se puede creer, porque de conspiraciones está lleno el mundo.Pero día que pasa se descubren nuevos detalles escandalosos, tan verosímiles los que acusan, como los que alegan conspiración. A tal punto, que cualquiera que sea la “verdad” lo único cierto es que de todas maneras será escandalosa.Y estamos ante un caso, un solo caso de abuso de poder, que es una situación cotidiana, en todas las latitudes, además. Incluido nuestro propio vecindario.Seguramente poco a poco nos iremos enterando de que Strauss Kahn, tiene un prontuario denso y posiblemente más grande que su “currículo”, por lo pronto, y de lo mucho que ya se sabe, por lo menos esto es imperioso conocer:  Siendo Ministro de finanzas, Strauss Kahn llevó a cabo una política claramente de derechas, es decir, sarkozysta antes de tiempo. Preparó y ejecutó una oleada masiva de privatizaciones de empresas públicas –entre las cuales France-Telecom, Crédit Lyonnais, Arcelor, Thomson, GAN y Aérospatiale–, se opuso a las jornada laboral de35 horas, inició la creación del COR, cuyo objetivo es la revisión del sistema de pensiones y abroga la ley Thomas sobre la regulación de los fondos de pensiones. Todo un personaje.Nicolas Dupont-Aignan, un candidato menor que terciará en las próximas elecciones francesas, y que trata de resucitar la tradición del gaullismo social, hizo quizás el comentario más atinado: afirma, contrariamente a muchos observadores, que la eliminación de DSK es un golpe de suerte para la izquierda. “Dominique Strauss-Kahn era un falso buen candidato para la izquierda y creo que la derecha cometería un error si se alegrara. Siempre he creído que había una especie de falaz moda pasajera en torno a Strauss-Kahn y que él era acaso el mejor contrincante que podía tener Nicolas Sarkozy…”.Antes de concluir, aclaremos que no le estamos dedicando tanto espacio a este asunto por morbosidad, sino porque en el alud de información que comenzó a aflorar, se comentó la amistad de este personaje, Dominique Strauss Kahn, con Vincent Bolloré, ese empresario francés sumamente interesado en el litio boliviano y que llegó a “sonar” seriamente como “socio” de Bolivia.Esta es solamente la punta del ovillo. Hay más.

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