Brasil necesita materias primas

señaló el economista João Furtado durante una reunión con periodistas organizada por la Asociación Brasileña de la Industria Química (Abiquim).   La exploración de las reservas de petróleo y gas en el presal, frente a las costas brasileñas, y el desarrollo de fuentes renovables de...

señaló el economista João Furtado durante una reunión con periodistas organizada por la Asociación Brasileña de la Industria Química (Abiquim).

 

La exploración de las reservas de petróleo y gas en el presal, frente a las costas brasileñas, y el desarrollo de fuentes renovables de insumos, por ejemplo, ayudarán a sostener el crecimiento en los próximos años, según el economista.

 

El plan químico y petroquímico de la Abiquim prevé que la industria deberá invertir US$167.000mn hasta el 2020 para mantener el ritmo del crecimiento del PIB, terminar con el déficit comercial, obtener beneficios del presal e impulsar la elaboración de químicos ecológicos.

 

También se anticipa una inversión de US$32.000mn adicionales solo en investigación y desarrollo en la década.

 

Furtado explicó que en los últimos años no se han asignado suficientes recursos en la cadena de producción de químicos, por lo que las importaciones han aumentado para abastecer el creciente consumo aparente del país. A raíz de ello, el déficit comercial de esta industria se calcula en US$25.000mn este año y en US$45.000mn en el 2020 si no se efectúan nuevas inversiones, agregó.

 

"Deseamos reemplazar importaciones por productos nacionales, además de incrementar las exportaciones", dijo el economista. También sostuvo que los nuevos proyectos que implementará la industria química deben enfocarse en el mercado brasileño y en las oportunidades que surjan fuera del país.

 

Asimismo, es muy posible que la industria química brasileña ocupe el quinto lugar a nivel mundial dentro de cinco años, indicó. El año pasado se ubicó en la octava posición. No obstante, la disponibilidad de insumos competitivos es fundamental para lograr esta meta.

 

Un importante desafío consiste en garantizar que la producción interna sea suficiente para satisfacer la demanda local. De acuerdo con estimaciones de la Abiquim, el consumo químico de Brasil sumará US$260.000mn el 2020 frente a los US$145.000mn del 2008. La asociación se basó en los resultados del 2008 para su plan, dada las distorsiones que generó la crisis económica el 2009.

 

"Pero para aprovechar estas oportunidades se deben resolver algunos problemas", explicó el economista.

 

La industria enfrenta una serie de problemas que afectan el crecimiento, tales como el sistema tributario, cuellos de botella en infraestructura y logística, y la necesidad de contar con nuevas tecnologías. Furtado también apunta al tipo de cambio.

 

 

El presidente ejecutivo de la Abiquim, Nelson Pereira dos Reis, sostuvo que la asociación presentó su plan al ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior y al presidente del banco nacional de desarrollo, BNDES.

 

También indicó que la Abiquim tiene previsto mostrar el plan a otras entidades gubernamentales, tales como los Ministerios de Hacienda y de Ciencia y Tecnología.

 


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