Parques naturales violados
Los cocaleros avanzan sobre los parques sin ningún control. Y ahora el gobierno prepara licencias (para matar parques) también a favor de las petroleras. El caso más ruidoso de amenaza a un parque es la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, porque ha sido diseñada para atravesar el...
El caso más ruidoso de amenaza a un parque es la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, porque ha sido diseñada para atravesar el Isiboro-Sécure.
En la ABC se comenta que el presidente ha ordenado hacer la carretera pese a quien pese.
Y los que se oponen son los pueblos originarios de la zona, que podrían ser escuchados y atendidos por el gobierno si tuvieran más votos. Pero son muy pocos. Un dirigente beniano dijo que para el gobierno los únicos originarios que cuentan son los aymaras y los quechuas, porque sus votos pesan mucho en las elecciones.
La empresa brasileña OAS, que no goza de mucho prestigio en su país, tendrá a su cargo la construcción de la “rodovía de la cocaína”, como definió el candidato opositor José Serra a la segunda carretera para el Chapare.
Los técnicos de ABC dicen que si la carretera tuviera que ser desviada a fin de evitar el parque, la ruta alternativa sería un terreno anegadizo y habría que construir un puente de 50 kilómetros, con un costo de US$ 10.000 por cada metro.
El presidente ha pedido que se haga una campaña para suavizar la posición de los originarios de la zona.
De parte de los originarios ha surgido la idea de llevar el caso a conocimiento, arbitraje y monitoreo internacional.
Hay una repartición de la ONU que se ocupa de la preservación de los parques naturales y los bosques.
Alguien tendría que ayudar a los pobres –y minoritarios- pueblos originarios del oriente.