Revolución del 16 de julio
Luis Arce celebra los 215 años de La Paz
Durante el tradicional encendido de la tea de Pedro Domingo Murillo por los 215 años de la gesta libertaria de La Paz, el presidente Luis Arce afirmó que libertad es un derecho inalienable por el que vale la pena sacrificarse e instó a mantener la unidad ante cualquier amenaza de generar enfrentamientos.
“El legado de Murillo y de sus compañeros perduran como un faro de esperanza y coraje, recordándonos que la libertad es un derecho inalienable por el cual vale la pena sacrificarse”, afirmó en un corto mensaje en el Museo Casa de Murillo, en el marco de los actos por la conmemoración de la Revolución del 16 de julio de 1809 de La Paz.
Liderados por Murillo, la noche del 16 de julio de 1809, los paceños lograron la renuncia del gobernador y del obispo, eligiendo un gobierno patriota denominado “Junta Tuitiva” e instaurar el primer gobierno independiente del continente que entre sus primeras medidas decretó la igualdad, señalando que “ya no hay eso del pueblo bajo o pueblo alto, todos son iguales”.
Sin embargo, la “Junta Tuitiva” fue disuelta el 30 de septiembre de 1809 y meses después sus impulsores, entre ellos Murillo, Mariano Graneros, Juan Baptista Sagarnaga, Buenaventura Bueno, Melchor Jiménez, Basilio Catacora, Juan Antonio Figueroa, Gregorio García Lanza y Apolinar Jaén, fueron ejecutados en la horca.
Antes de morir, Murillo dijo la famosa y célebre frase: “La tea que dejo encendida, nadie la podrá apagar”.
Evocando ese histórico hecho, Arce reafirmó que “la tea que ellos encendieron no se apagó ni se apagará jamás en la mente y el corazón de todas las bolivianas y todos los bolivianos”.
Luego del acto, el presidente encabezó el Desfile de Teas.