Más tensión: “Enterrar” a Camacho y citar a declarar a Evo el mismo día

“Que alguien le quite el bidón de gasolina a Lima” se leía anoche en la red social X, antes Twitter, luego de que se filtrara convenientemente a todos los medios el “mandamiento de comparendo” para el expresidente Evo Morales y su exvicepresidente, Álvaro García Linera, con el lugar fecha y hora donde deben ir a testificar dentro del conocido “caso Zapata”. Todos hemos visto las suficientes series de detectives como para saber que alguien puede entrar a declarar como testigo y acabar imputado y detenido preventivamente y el truculento caso Zapata no da para muchas bromas: Linera y Morales aseguraron haber conocido a aquel hijo de Gabriela Zapata que luego resultó muerto y luego inexistente, pero que alguien hizo aparecer justamente en otro procedimiento testifical.

Hacer coincidir esto con el mismo día en que se enterraba políticamente a Luis Fernando Camacho puede parecer mucha dosis, pero resulta ser una mera casualidad del destino y de los plazos procesales, que también suelen acomodarse a la agenda de actualidad.

El jueves la Sala Constitucional se cansó de esperar la voluntad del presidente del legislativo cruceño Zvonko Matkovic y cursó una conminatoria para que en 24 horas se posesionara al vicegobernador Mario Aguilera, que para eso está, o todos desfilando a la carceleta. Dicho y hecho, Matkovic había mareado la perdiz todo lo que le había sido posible buscando la forma de posesionar a un asambleísta más afín a su grupo, pero los números no le daban. El liderazgo de Camacho ha sido, sobre todo, destructor de su propia agrupación, demasiado joven como para trascenderle a sí mismo.

Aguilera trató de reivindicarse en su acto de posesión, negando “ser un traidor”, asegurando que asume por orden del tribunal y diciendo que se concentrará en la gestión, que ciertamente está de capa caída, pero en todo caso, el gobernador electo ya hacia días que lo había arrojado a los pies de los caballos con aquello de “el MAS se ha comprado un vicegobernador” y otras tantas lindezas emitidas desde el penal de la sierra paceña que, además, quedan escritas. Ni como negarlas.

El último gobernador independiente

Para analistas como Andrés Gómez, se trata de la caída del último “gobernador opositor”, entendiendo que otras fórmulas, incluida la que gobierna Tarija, están optando por dejar la confrontación pura y dedicarse a “coordinar” para hacer gestión, pero a tenor de lo visto en las calles cruceñas, el asunto estaba ya amortizado desde hacía días.

Camacho cumple estos días 13 meses en la prisión de alta seguridad de Chonchocoro acusado por su participación en el supuesto Golpe de Estado de octubre de 2019. El ministerio Público tardó en dar la orden y el Ministerio de Gobierno tardó en ejecutarla, pero lo cierto es que en pocas semanas, las que fueron del 28 de diciembre de 2022 al Carnaval, la situación estaba políticamente controlada.

Camacho ha intentado mantenerse vigente desde la lejanía, protagonizando protestas y eventos y quedándose con el bastón de mando mientras dejaba hacer a su círculo más cercano para levantar una gestión herida de muerte desde el principio y que los Demócratas de Rubén Costas, orillados por sus propios errores, no han dejado de poner en evidencia. Ha sido en vano.

Lecturas

La caída de Camacho tiene varias lecturas, pero no deja de ser el principal protagonista de la caída de Evo Morales en 2019, pues fue la figura que supo canalizar los ánimos de la protesta popular hasta un cambio tangible, independientemente de la convicción que se tenga sobre si hubo o no hubo un golpe de Estado.

Después, hay quien considera que su candidatura presidencial de 2020 fue un error movido por la vanidad, mientras que otros lo circunscriben al proyecto netamente cruceño: necesitaba una bancada suficientemente fuerte como para influir en los dos tercios y poder canalizar a nivel estatal las aspiraciones de autogobierno cruceño. Eso lo logró. Como logró después ser gobernador con un amplio margen de votos.

La deriva posterior aún debe reposar para el análisis. Pero la enumeración de hechos es así: El 13 de noviembre de 2022 el Comité Cívico invoca el derecho de autodeterminación de los pueblos; el 28 de diciembre Camacho es detenido y llevado a Chonchocoro; el 26 de abril cae el gran banco del desarrollo cruceño, el Fassil, intervenido casi en quiebra; el 13 de noviembre de 2023 el Comité Cívico ya habla de “profundizar la autonomía”; el 26 de enero Luis Fernando Camacho deja de ser gobernador en los hechos.

¿Tendrá raíz el camachismo como para retornar a la primera línea? El tiempo dictará sentencia.

 

Zapata, Lima y la oportunidad

La cita de Evo Morales y Álvaro García Linera en el Tribunal Departamental de Justicia es el próximo 30 de enero a las 14:00 horas y el morbo de ver al expresidente hacer el paseíllo hacia los juzgados seguro levanta mucha expectación, aunque en las apuestas va ganando un nuevo aplazamiento o una declaración intermediada, pues son testigos del hecho y no imputados.

El caso Zapata data de 2016 y es 2024, casualmente vuelve a coincidir que la cita es el día después de la cita al diálogo para viabilizar las elecciones judiciales convocada por David Choquehuanca y para la que tampoco hay confirmaciones oficiales de asistencia.

Varios analistas advierten que es un paso más en la campaña de difamación/confrontación entre Evo Morales y Luis Arce, que tiene en su ministro Iván Lima por estos días a su operador más afanado, sobre todo porque muchos señalan que también tiene cuentas personales pendientes y así sale más efectivo todo.

Lima ya fue el operador del “derecho humano a la Reelección” y ahora es a quien se señala de ser el ejecutor de la sentencia que incorpora el criterio sobre la “imposible” reelección de Morales en estos momentos. Sin duda es el que mejor maneja la técnica jurídica y sobre todo, sus tempos.

El diálogo del lunes nació tocado y nada bueno aportará esta cita con la Justicia, pero lo cierto es que a quien más le conviene que se alarguen los plazos es al propio equipo de Luis Arce, que de momento se asegura que no habrá rival en el MAS a menos que Morales de un paso al costado y deje a algunos de sus discípulos, sea Leo Loza, sea Andrónico Rodríguez, da ese paso.

El evismo y la oposición deben jugar bien sus cartas si no quieren quedar de nuevo entrampados: El bloqueo ya ha durado mucho más de lo que los más optimistas esperaban y se han multiplicado los puntos. La desconexión dirigencia/bases parece más que probada.