Gobierno rinde homenaje a la bandera nacional y a la Wiphala
Con un acto en la plaza Murillo en la ciudad de La Paz, el presidente y vicepresidente del estado Luis Arce Catacora y David Choquehuanca, rindieron homenaje este miércoles a la bandera nacional y a la Wiphala en conmemoración al aniversario de creación de la primera insignia boliviana en 1825, que se recuerda cada 17 de agosto desde 1925.
El primer mandatario instó a la población a fortalecer el civismo con la mirada puesta en el bicentenario de la patria en 2025.
En el acto, que contó con la presencia de diplomáticos acreditados en el país y representantes de las organizaciones sociales, el Jefe de Estado señaló que la tricolor nacional “sintetiza los más altos ideales de independencia, libertad y soberanía”, pero también “la unidad, la dignidad y el orgullo de ser bolivianas y bolivianos”.
“Este inmenso amor y respeto a nuestra insignia nacional se teje con gran fervor patriótico desde las gestas independentistas, una historia que no podemos olvidar para proyectar un futuro que debemos de construir entre todas y todos los bolivianos y que hoy emerge con toda la fuerza desde el tejido de nuestra plurinacionalidad que se convierte en nuestra mayor riqueza”, expresó.
Enfatizó que “esa larga historia de lucha valentía, resistencia y sacrificio del pueblo que engrandece a nuestra tricolor, es la misma que hoy dignifica a nuestra Wiphala, es por eso que con mucha alegría ahora vemos flamear a nuestras dos banderas más juntas y más fuertes que nunca”.
“Nuestra tricolor late en el corazón de todos los bolivianos. Jurar a nuestro rojo, amarillo y verde es el más alto honor para un militar, ver esos colores inspira a los deportistas, a nuestros niños y jóvenes y se constituye en la mejor bienvenida para las y los compatriotas que salen al exterior y que retornan a nuestra querida patria”, aseguró.
En consecuencia, señaló que “ahora avanzamos hacia nuestro Bicentenario, con el gran desafío de reconstruir nuestra Patria y también de fortalecer nuestro civismo, de amar, defender y respetar cada día nuestros símbolos patrios”.
Luego de recordar que hace años, en cada 6 de agosto la tricolor flameaba en el campo y la ciudad, en oriente y occidente, señaló que “ese civismo debemos recuperarlo y fortalecerlo para que las nuevas generaciones lleven en alto nuestra tricolor y nuestra Wiphala con mucho orgullo y con mucho amor”.
En la parte final de su discurso, el dignatario citó una parte del Himno a la Bandera, compuesta por Ricardo Mujía, la letra, y Manuel Benavente, la música: “Pabellón tricolor que te ostentas, de Bolivia en el cielo radiante, como el iris de gloria triunfante, como emblema de paz y de unión”. “Unidos rumbo a nuestro bicentenario”, expresó Arce.
Ya por su cuenta de Twitter, el presidente escribió: “En el #DíaDeLaBanderaBoliviana, rendimos honores a nuestra Tricolor, que significa independencia, libertad y soberanía; y nuestra Wiphala, símbolo de integración, solidaridad, reciprocidad, complementariedad e igualdad entre todas y todos”.
Día de la Bandera
La enseña fue creada por un decreto ley de la Asamblea Deliberante. Esa primera bandera solo tenía el rojo y verde que identificaban a la republiqueta de Ayopaya “conformada por patriotas independentistas que lucharon contra la colonia española”, refirió Arce.
Esa bandera fue modificada en dos oportunidades, en 1826 cuándo se incorporó el amarillo, y luego en 1851 y 1888 se reordenaron sus colores, y tras un período de cambios del emblema nacional, el 31 de octubre de 1851 se adoptó la tricolor actual con el rojo, amarillo y verde que flameó por primera vez el 7 de noviembre de 1851, en el Faro de Conchupata, en la ciudad de Oruro.
El 5 de agosto de 2009, el Gobierno nacional aprobó el Decreto 241 que norma las características y el uso de la tricolor, del himno boliviano, del escudo de armas, de la whipala, la escarapela, la flor de la kantuta y la flor de patujú, que constituyen símbolos del Estado, de acuerdo a lo establecido en el párrafo dos del artículo seis de la Constitución Política del Estado.
El color rojo representa la sangre derramada por los héroes para el nacimiento y preservación de la República y consolidación del Estado Plurinacional de Bolivia; la franja central, de color amarillo, representa las riquezas minerales y del subsuelo del pueblo boliviano; y la franja inferior, de color verde, representa a la riqueza de la naturaleza y esperanza como un valor principal de la sociedad.