Tarija: Las nuevas estafas se hacen hackeando cuentas de WhatsApp

Robos y estafas son las principales consecuencias de los hackeos de las cuentas de redes sociales. En las últimas semanas los estafadores comenzaron a valerse de la inteligencia artificial y de su viveza para apropiarse particularmente del WhatsApp de sus víctimas, a fin de hacerse pasar por ellas y pedir dinero a sus contactos.

Algunos casos llamaron la atención de la ciudadanía. Aunque hay personas que dicen no caerían en estos engaños, los antisociales se las ingenian para engañar a sus víctimas.

Inteligencia artificial

El País recopiló algunos casos de víctimas que fueron afectadas por los nuevos modus operandi de antisociales, que se valen de la tecnología para estafar.

Uno de los casos más recientes es el que ocurrió en Santa Cruz, donde la propietaria de una tienda admitió haber caído en un engaño. Los antisociales usaron inteligencia artificial para imitar la voz del asambleísta, Svonko Matcovic.

Estafa La estrategia consiste en usar identidades ajenas para pedir dinero a los contactos de los afectados

La empresaria creyó que era el conocido político quien le estaba haciendo un pedido de pastillas dietéticas y accedió a depositar a una cuenta 3.000 bolivianos, creyendo que Matcovic le iba a devolver ese monto cuando le entregara la mercadería. Luego se dio cuenta que había depositado su dinero a estafadores.

Aunque el caso parezca irreal, le ha pasado a otras personas también en Tarija. Un caso es el de la diseñadora María Yeske, a quien le hackearon la cuenta de WhatsApp y la usaron para estafar con la supuesta venta de dólares.

Con una oferta de tipo de cambio de 7,70 bolivianos, más de uno creyó en el mensaje que le llegó de la empresaria, indicando que supuestamente estaba vendiendo la divisa norteamericana. A quienes creyeron le pidieron un depósito a una cuenta bancaria y cuando las víctimas pretendían recoger los dólares, los delincuentes desaparecían.

Similar estafa se dio con un conocido periodista en Bermejo, quien supuestamente estaba vendiendo dólares. Sus colegas se encargaron de alertar que le hackeaeron la cuenta de WhatsApp.

El uso de fotos de perfil con imágenes de empresas telefónicas, de la Gestora Pública u otras instituciones conocidas, fueron también herramientas útiles para los estafadores que consiguieron hacerse pasar por empleados de estas empresas para ganarse la confianza de sus víctimas y que les dieran los códigos de verificación de su Whatsapp.

La estrategia consiste en usar identidades ajenas para pedir dinero a los contactos de los afectados.

Consejos

El ingeniero y especialista Gabriel Coronado habló con El País para dar sus recomendaciones a la población a fin de prevenir este tipo de estafas.

“Lo primero es que tengan su dispositivo actualizado, tanto en el sistema Android como WhatsApp. Lamentablemente a la gente no le gusta actualizar porque dicen que su teléfono se pone pesado o que les consume megas. Generalmente lo que se da es una vulnerabilidad a los hackeos, porque la gente tiene versiones antiguas”, aseveró.

Coronado recomendó aplicar la verificación en dos pasos, nunca descargar nada que considere sospechoso, desactivar la descarga automática de archivos y nunca abrir links desconocidos.

Expertos internacionales se suman a esta lucha contra la inseguridad cibernética enfocándose en los consejos para tener contraseñas seguras. Lo imprescindible es no crear claves demasiado fáciles, no reutilizarlas, no guardarlas en el mismo dispositivo ni compartirlas con terceras personas.

No dude en denunciar si fue víctima de estafa

En caso de que usted reciba llamadas de supuestas empresas, como la Gestora Pública o cualquier número que no tenga registrado, evite dar datos personales y mucho menos códigos de sus cuentas.

Si es que cayó en alguna trampa, lo urgente es que reporte a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) el número de teléfono que lo haya contactado.

Finalmente, si fue víctima de una estafa, debe acudir también a la entidad bancaria a la que haya hecho el depósito, para que se pueda identificar al titular y se pueda investigar los movimientos de la cuenta.