Un tercio del personal de salud del país se encuentra de baja y aún no se concretan los reemplazos
Santa Cruz es la ciudad más afectada y donde mayor cantidad de personal médico se encuentra hospitalizado por el Covid-19, informó El Deber.



El Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública (Sirmes) exige con urgencia la dotación de ítems al sistema público de salud,. Fernando Romero, secretario general de Sirmes en La Paz que no se renovó el contrato a unos 500 trabajadores que reforzaban la atención en los diferentes centros de salud públicos de La Paz, según informa el portal web de El Deber.
El Decreto 222 permite a los trabajadores de salud que se encuentren en los grupos de riesgo, ya sea por edad o por enfermedades de base, declararse en baja laboral. Si a ellos se suman los trabajadores que concluyeron contrato y los que padecen síntomas de Covid-19 y deben guardar aislamiento.
Romero señala que los hospitales de La Paz se encuentran al borde del colapso puesto que “este virus es muy agresivo”. Explica que de las 120 a 150 camas de terapia en los centros públicos, todas se encuentran ocupadas. Además, reclama que el sistema sanitario no se ha preparado y denuncia que “los políticos no han tomado las previsiones y prefieren atender sus candidaturas”.
El secretario de relaciones del Sirmes Cochabamba, Carlos Ángel Nava Guzmán, indica que la “salud esta debilitada por falta de rectoría, por falta un plan estratégico de contingencia y, lo más grave, por falta de política de sostenibilidad y mantenimiento para las unidades de terapia intensiva”.
Al igual que en La Paz, hay la urgencia por contar con recursos humanos que palíe las ausencias y bajas es prioridad. Nava contempla un requerimiento de “16.000 trabajadores de salud en todo el país que deben entrar en acción de manera inmediata para evitar el colapso de los hospitales”. Pero para eso, concluye, hace falta “decisión política”.
Como muestra de la crítica situación, Nava expone el caso del Hospital del Norte que cuenta con “solo 20 profesionales y hace falta 280”. Detalla que es un hospital bien equipado y “cuenta con 10 camas de terapia intensiva pero no hay internistas para poder recibir a los pacientes”.
El Santa Cruz, el presidente del Colegio Médico departamental, Wilfredo Anzoátegui, revela una situación de colapso de las Unidades de terapia intensiva. “No hay espacio ni en la parte privada, ni en la seguridad social, ni en el sector público” detalla. Anzoátegui aclara que existen espacios físicos disponibles, pero la falta de terapistas y de personal sanitario auxiliar limitan la atención.
Según el presidente del Colegio Médico, “el San Juan de Dios tiene 23 camas de terapia intensiva para pacientes Covid-19, pero solo se disponen 7 camas porque no tiene personal especializado para atención”. Lo mismo ocurre en el domo del hospital Japonés, con 21 camas de terapia sin atención.
Anzoátegui apunta a la parte burocrática que “está frenando la contratación del personal que urgen en esto centros”. Señala, además, que las particularidades especiales de las UTI requieren la dotación de un médico especializado por cada seis o siete pacientes, según estipula la OMS. Y recuerda que deben considerarse tres turnos para la rotación de los profesionales.
Para completar la atención sanitaria en Santa Cruz, Wilfredo Anzoátegui apunta a que se requiere restituir un 40% del personal sanitario habitual, es decir, unos 1.200 trabajadores.