Incremento salarial: CNC espera reunión con el Gobierno
La Cámara Nacional de Comercio (CNC) manifestó su interés de reunirse con el Gobierno para definir el incremento salarial, pero vio grandes reparos en dialogar con la Central Obrera Boliviana (COB), por considerar que la actual dirigencia no representa los verdaderos intereses de los...



La Cámara Nacional de Comercio (CNC) manifestó su interés de reunirse con el Gobierno para definir el incremento salarial, pero vio grandes reparos en dialogar con la Central Obrera Boliviana (COB), por considerar que la actual dirigencia no representa los verdaderos intereses de los trabajadores del país.
“Tenemos nuestros grandes reparos de reunirnos con la COB porque creemos que la actual dirigencia no representa los verdaderos intereses del país (…). Creo que la negociación debe encaminarse sobre la base de inflación que está en el orden del 1,5%, esa debe ser la base para la negociación salarial”, manifestó el presidente de la CNC, Marco Antonio Salinas.
El máximo representante de la Cámara Nacional de Comercio dijo que confía en reunirse con el ministro de Economía, Luis Arce, quien retornó al gabinete tras dos años de ausencia por razones de salud. “Nosotros siempre buscamos diálogo con el Gobierno que es la contraparte natural del sector privado, nos vamos a reunir con el Ministro”, señaló.
La posición es compartida con el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Horacio Villegas quien advirtió en diciembre del año pasado que la Central Obrera Bolivia sólo representa a un grupo de dirigentes privilegiados con empleo asegurado y de altos ingresos. Denunció que muchos de esos dirigentes afines al Gobierno se encuentran declarados en comisión hace varios años y por tanto perciben un salario sin trabajar.
“No creemos que la COB sea representativa en la medida que sus dirigentes, un grupo privilegiado que tiene empleo asegurado, altos ingresos que sorprendentemente haya estado en contra de que sea menos de 10 mil bolivianos (el tope) para el doble aguinaldo, lo que significa que ganan más que eso, son gente que está en comisión hace muchos años, conocemos casos que están hace 15 años”, aseguró.
El presidente de los industriales aseguró que los dirigentes de la COB no tienen el menor interés en generar nuevo empleo. “Lo que les interesa es proteger el empleo de ellos mismos. Es un grupo privilegiado y egoísta y lo digo con toda claridad”, afirmó.
Horacio Villegas dijo que hace diez años el 22% de los ciudadanos con empleo estaba afiliado a algún sindicato, y que actualmente sólo el 15% lo está, pero de ese porcentaje la mitad pertenece a las empresas públicas, por tanto tienen apenas un 7% de representatividad.
“La COB tiene compromisos políticos con el Gobierno, ahí queda en duda la representatividad, tienen representación profunda en el Ministerio de Trabajo y son responsables del doble aguinaldo, de la inflexible política de contratación y desvinculación laboral que ha promovido la COB en coordinación con el Ministerio de Trabajo que desincentivan la generación de empleo nuevo, formal y productivo e incluso la mantención del actual sistema”, dijo.
Sobre los incrementos salariales, afirmó que el sector industrial tiene una particular preocupación por el empoderamiento y la influencia de la COB en las decisiones del Gobierno nacional, lo que ha generado una serie de factores adversos para la inversión privada industrial.
“Tenemos nuestros grandes reparos de reunirnos con la COB porque creemos que la actual dirigencia no representa los verdaderos intereses del país (…). Creo que la negociación debe encaminarse sobre la base de inflación que está en el orden del 1,5%, esa debe ser la base para la negociación salarial”, manifestó el presidente de la CNC, Marco Antonio Salinas.
El máximo representante de la Cámara Nacional de Comercio dijo que confía en reunirse con el ministro de Economía, Luis Arce, quien retornó al gabinete tras dos años de ausencia por razones de salud. “Nosotros siempre buscamos diálogo con el Gobierno que es la contraparte natural del sector privado, nos vamos a reunir con el Ministro”, señaló.
La posición es compartida con el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Horacio Villegas quien advirtió en diciembre del año pasado que la Central Obrera Bolivia sólo representa a un grupo de dirigentes privilegiados con empleo asegurado y de altos ingresos. Denunció que muchos de esos dirigentes afines al Gobierno se encuentran declarados en comisión hace varios años y por tanto perciben un salario sin trabajar.
“No creemos que la COB sea representativa en la medida que sus dirigentes, un grupo privilegiado que tiene empleo asegurado, altos ingresos que sorprendentemente haya estado en contra de que sea menos de 10 mil bolivianos (el tope) para el doble aguinaldo, lo que significa que ganan más que eso, son gente que está en comisión hace muchos años, conocemos casos que están hace 15 años”, aseguró.
El presidente de los industriales aseguró que los dirigentes de la COB no tienen el menor interés en generar nuevo empleo. “Lo que les interesa es proteger el empleo de ellos mismos. Es un grupo privilegiado y egoísta y lo digo con toda claridad”, afirmó.
Horacio Villegas dijo que hace diez años el 22% de los ciudadanos con empleo estaba afiliado a algún sindicato, y que actualmente sólo el 15% lo está, pero de ese porcentaje la mitad pertenece a las empresas públicas, por tanto tienen apenas un 7% de representatividad.
“La COB tiene compromisos políticos con el Gobierno, ahí queda en duda la representatividad, tienen representación profunda en el Ministerio de Trabajo y son responsables del doble aguinaldo, de la inflexible política de contratación y desvinculación laboral que ha promovido la COB en coordinación con el Ministerio de Trabajo que desincentivan la generación de empleo nuevo, formal y productivo e incluso la mantención del actual sistema”, dijo.
Sobre los incrementos salariales, afirmó que el sector industrial tiene una particular preocupación por el empoderamiento y la influencia de la COB en las decisiones del Gobierno nacional, lo que ha generado una serie de factores adversos para la inversión privada industrial.