Los pasos de Ferrufino
Se acerca el día D y quien más quien menos va tomando posiciones. Walter Ferrufino no la tiene fácil. El subgobernador de O´Connor, que completa quince años en la “élite” política departamental, ha desarrollado su estrategia desafiante y no parece que le haya salido del todo bien. La...
Se acerca el día D y quien más quien menos va tomando posiciones. Walter Ferrufino no la tiene fácil. El subgobernador de O´Connor, que completa quince años en la “élite” política departamental, ha desarrollado su estrategia desafiante y no parece que le haya salido del todo bien.
La política de tierra quemada con la que se ha impulsado la Ley de Redistribución de Regalías, más conocida como Ley del 45% le ha generado críticos no solo en el Chaco, sino entre los sectores que ven en riesgo la unidad departamental, pero sobre todo, ha aniquilado cualquier posibilidad suya de ser el candidato a la Gobernación de Tarija por el Movimiento Al Socialismo (MAS), para el que cualquier expectativa de éxito pasa por que se cumplan las eternas promesas de los conversos en la Región Autónoma de firmar mayorías absolutísimas y que obviamente no funcionarían tras perder parte de las regalías.
El meteoro
Ferrufino fue en algún momento la mejor ficha del MAS Tarija para aspirar a la Gobernación. Ganadero, abogado, sombrero y pinta de jinete – pasión casi vicio que le ha puesto en situaciones riesgosas más de una vez -. No es un “masista originario”, pero perfectamente representa a la base social rural agrícola. Y también de su oligarquía.
Ferrufino ya dio guerra en tiempos de Mario Cossío. Representante en el Consejo Departamental durante la elaboración del Estatuto Departamental en 2006-2007, él protagonizó las primeras intervenciones en las que se pedía la elección directa de subprefectos, posteriormente ejecutivos provinciales y finalmente ejecutivos seccionales; eso que se ha convertido en la franca competencia con los alcaldes devorando recursos en estructuras.
Contundente en su despliegue, con cierto carisma y argumento, Ferrufino fue electo ejecutivo seccional de O´Connor y no tardó en organizar la Asociación de Ejecutivos, un lobby – sindicato que decía Luis Alfaro – para hacer presión desde las provincias hacia el nivel central de la Gobernación. Duró tan poco Mario Cossío y fue tan débil su sucesor Lino Condori, que la Asociación se convirtió de facto en un Consejo de Administración en el que se repartían millones en el territorio sin atender a criterios objetivos.
Ferrufino hizo buenas alianzas con el entorno más cercano de Lino Condori. Roberto Ruíz, Fohad Amás… Darío Gareca encontró refugio posteriormente en la subgobernación. Una semana antes de renunciar para repostular en 2014, Ferrufino firmó contratos por casi cien millones de dólares sin otro respaldo que una declaración jurada de disponibilidad presupuestaria que ya entonces estaba en duda, pues el barril de petróleo había empezado a caer estrepitosamente.
Antes de eso, su nombre se había colocado en lo más alto de la pizarra que presidía la reunión de la Coordinadora Departamental del Cambio (Codelcam) y que al final no sirvió para nada, porque Evo Morales acabó eligiendo por su cuenta primero a Carlos Cabrera y después, cuando se ventiló lo de su renuncia tardía, a Pablo Canedo.
Fue el momento en el que se sintió más cerca del triunfo. Solo tenía que administrar bien sus cinco años en O´Connor, darse algo de proyección departamental, tratar de no meter la pata y la nominación, con mucha probabilidad, sería suya.
Sin embargo, le pudo la impaciencia. Ferrufino no encontró el respaldo de Morales para culminar sus muchas obras en marcha y tuvo que entrar al juego de la Gobernación. Inmediatamente le supuso una salida del círculo. Después, y ante la urgencia, las regiones productoras impulsaron la mencionada ley del 45%, cuya estrategia lleva el sello de Ferrufino, que lo niega vehementemente,
Ferrufino ha removido la paz chaqueña en un movimiento que no beneficia en nada al MAS, pero también retó al propio Presidente Evo Morales. En 2018, mientras Morales inauguraba la Entre Ríos Palos Blancos a finales de abril, Ferrufino aseguró que respetaría las conquistas chaqueñas. Eran días en que se amenazaba con bloqueos para forzar la nueva Ley. Unos días antes Morales había pedido que se permitiera la exploración y que después se hablaría. Unos días después los cívicos de Entre Ríos bloquearon el ingreso de las máquinas perforadoras al Jaguar X6. Cuando pasó la conmoción y Morales se desplazó hasta el lugar a inaugurar la perforación, no hubo ni rastro de Ferrufino.
Desde entonces no se ha recuperado. Le crecen los problemas – Tariquía, Palos Blancos, débitos – y no anda muy comunicativo. Dos días antes de abril se dio el lujo de inaugurar la Palos Blancos – Choere sin incluirla en la agenda del Presidente. Unos aseguran que se dedicará a los caballos o a los coches de carreras, otros que pecha por ser senador. Lo cierto es que la estrella parece apagada.