Los amigos del Gobierno
Cuenta la leyenda que una vez el Movimiento Al Socialismo (MAS) fue el partido del pueblo, que se construyó entre el descontento de las organizaciones sociales y recibió el apoyo masivo de la población que creía que otra forma de gobernar era posible. Cuentan también que sin apoyo...



Cuenta la leyenda que una vez el Movimiento Al Socialismo (MAS) fue el partido del pueblo, que se construyó entre el descontento de las organizaciones sociales y recibió el apoyo masivo de la población que creía que otra forma de gobernar era posible.
Cuentan también que sin apoyo mediático ni institucional más allá del Juguete Rabioso de Chávez y sus cuatro spots de bajo presupuesto, ganaron la elección del 2005 (eso lo dicen los datos) con un 54 por ciento de la votación, algo nunca antes visto.
Cuentan que desde el Gobierno libró sus batallas e impulsó una nueva Constitución, muy mayoritariamente respaldada en las urnas, que le valió su primera reelección en 2009 con más del 60 por ciento.
Cuentan que entonces le empezó a gustar el poder, y reproducirse se convirtió en el único objetivo. De ahí los precios del gas se fueron a las nubes y los bienvestidos se fueron acercando, porque todo apuntaba a que se quedaría para siempre.
Ganó sin nadie al frente en 2014, y en ese momento, alguien decidió quedarse para siempre. Para entonces, el régimen comandado por Álvaro García Linera ya había logrado cooptar docenas de medios de comunicación, que asfixiados por impuestos y otras medidas laborales sucumbieron a las mieles del poder. El siguiente paso era crear medios allí donde no había logrado imponer su voluntad.
Tarija, con apenas un 5 por ciento de la población votante, ha resultado ser uno de los departamentos donde el Gobierno de Evo Morales puso más dinero. Concretamente entre 2017 y 2019, según los datos del Ministerio de Comunicación, entregó 6.669.960 bolivianos entre 12 medios.
El 67% de ello, lo recibió el diario El Periódico, fundado el mismo día de las elecciones de 2014. Concretamente 4.493.000 bolivianos. Semanarios y revistas semidesconocidos como Trinchera Tarijeña, Moto Méndez, El Chiriguano, Nueva Tarija o Visión Tarijeña recibieron 1.046.500.
Periódicos más antiguos como El País, que cobija este suplemento, facturó 681.160 bolivianos y Nuevo Sur 280.000.
¿Y cómo le fue al MAS?
La estrategia, aparentemente, tenía que servir para que el MAS lograra una imagen más positiva que se tradujera en una buena proporción de votos, sin embargo, los resultados son elocuentes.
En la elección presidencial de 2009, el MAS en Tarija sacó un 51,09 por ciento de los votos según los datos del Atlas Electoral, mientras que en las elecciones a Gobernador de 2010 logró un 44,08 histórico que estuvo a punto de arrebatarle la Gobernación al mejor Mario Cossío.
En la elección de 2014, antes de poner en marcha su plan, el MAS aun ganó la elección Presidencial en Tarija con un 51,69% de los votos. A partir de ahí, el descenso ha sido progresivo.
En la elección a Gobernador de 2015, el MAS en Tarija se quedó en el 36,17%. En el referéndum constitucional de 2016, hito clave en su estrategia mediática, logró un pírrico 39,88% y en la elección fallida de 2019, el MAS se quedó en el 40,2%.
Luis Arce Catacora, ex ministro y actual candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS), con mucha familia en Tarija, tal vez tenga que volver a repasar su estrategia. También aquellos que han pensado que podía ser buena idea, deberían evaluar sus resultados.
Cuentan también que sin apoyo mediático ni institucional más allá del Juguete Rabioso de Chávez y sus cuatro spots de bajo presupuesto, ganaron la elección del 2005 (eso lo dicen los datos) con un 54 por ciento de la votación, algo nunca antes visto.
Cuentan que desde el Gobierno libró sus batallas e impulsó una nueva Constitución, muy mayoritariamente respaldada en las urnas, que le valió su primera reelección en 2009 con más del 60 por ciento.
Cuentan que entonces le empezó a gustar el poder, y reproducirse se convirtió en el único objetivo. De ahí los precios del gas se fueron a las nubes y los bienvestidos se fueron acercando, porque todo apuntaba a que se quedaría para siempre.
Ganó sin nadie al frente en 2014, y en ese momento, alguien decidió quedarse para siempre. Para entonces, el régimen comandado por Álvaro García Linera ya había logrado cooptar docenas de medios de comunicación, que asfixiados por impuestos y otras medidas laborales sucumbieron a las mieles del poder. El siguiente paso era crear medios allí donde no había logrado imponer su voluntad.
Tarija, con apenas un 5 por ciento de la población votante, ha resultado ser uno de los departamentos donde el Gobierno de Evo Morales puso más dinero. Concretamente entre 2017 y 2019, según los datos del Ministerio de Comunicación, entregó 6.669.960 bolivianos entre 12 medios.
El 67% de ello, lo recibió el diario El Periódico, fundado el mismo día de las elecciones de 2014. Concretamente 4.493.000 bolivianos. Semanarios y revistas semidesconocidos como Trinchera Tarijeña, Moto Méndez, El Chiriguano, Nueva Tarija o Visión Tarijeña recibieron 1.046.500.
Periódicos más antiguos como El País, que cobija este suplemento, facturó 681.160 bolivianos y Nuevo Sur 280.000.
¿Y cómo le fue al MAS?
La estrategia, aparentemente, tenía que servir para que el MAS lograra una imagen más positiva que se tradujera en una buena proporción de votos, sin embargo, los resultados son elocuentes.
En la elección presidencial de 2009, el MAS en Tarija sacó un 51,09 por ciento de los votos según los datos del Atlas Electoral, mientras que en las elecciones a Gobernador de 2010 logró un 44,08 histórico que estuvo a punto de arrebatarle la Gobernación al mejor Mario Cossío.
En la elección de 2014, antes de poner en marcha su plan, el MAS aun ganó la elección Presidencial en Tarija con un 51,69% de los votos. A partir de ahí, el descenso ha sido progresivo.
En la elección a Gobernador de 2015, el MAS en Tarija se quedó en el 36,17%. En el referéndum constitucional de 2016, hito clave en su estrategia mediática, logró un pírrico 39,88% y en la elección fallida de 2019, el MAS se quedó en el 40,2%.
Luis Arce Catacora, ex ministro y actual candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS), con mucha familia en Tarija, tal vez tenga que volver a repasar su estrategia. También aquellos que han pensado que podía ser buena idea, deberían evaluar sus resultados.