Mejor de frente
Si algo contribuye a lograr una gestión transparente es evitar las sombras detrás de las autoridades o de cualquier otra figura pública. Que el ciudadano sepa a qué atenerse cuando alguien habla y que aquel que exige respuestas no se vea envuelto en una maraña de burocracia porque siempre...
Si lo importante es el presente y el futuro, el pasado también cuenta. Cada cual debe hacerse responsable de lo hecho y también de los momentos en los que se dijo sí sin haber hurgado un poco más en el contenido. El resto es construir sobre la mentira. O peor, sobre el delito.En el caso del nombramiento de Waldemar Peralta como secretario de la Gobernación, supone un paso al frente de una persona que nunca engañó a nadie cuando ejerció como presidente del Comité Cívico, lo que le valió un buen puñado de críticas, fundadas, pues su relación con el hoy gobernador y su afinidad política no llegaba ni siquiera a secreto a voces. Negarlo era un error. Edulcorarlo, cinismo. Hoy Peralta ocupa el lugar que todos esperaban o preveían y que de alguna forma ya había empezado a ejercer en estos primeros meses de gestión. Sin duda el paso al frente es una buena noticia para la transparencia institucional.Se vienen tiempos complicados en el departamento, con agobios y calculadoras echando humo. En estos casos la familia supone el principal instrumento de la protección social y de la seguridad. Los equilibrios se sostienen mejor con sonrisas y buen humor, porque cualquier grito de más puede hacer caer a cualquiera. En cualquier caso, bajar la cuerda al suelo y aislar la posibilidad de empujones parece la mejor receta para llegar hasta la meta, al menos hasta que se desate la tormenta.El editor@lamanodelmoto