Consulta técnica
Maíz transgénico: Se agudiza la pugna entre México y EEUU
El mandatario mexicano alertó de que irá hasta el final para evitar que el grano transgénico de EE.UU. llegue a los consumidores de su país
El Gobierno de Estados Unidos solicitó una nueva consulta técnica al Gobierno mexicano por el decreto presidencial que aligeró las prohibiciones de importación de maíz amarillo proveniente del vecino país del norte para permitir que el cereal genéticamente modificado aún pueda ser adquirido como forraje para la alimentación animal y para su uso industrial en la alimentación humana, más no para su consumo directo.
Basándose en el Capítulo sobre Medidas Sanitarias y Fitosanitarias del T-MEC, el Departamento de Agricultura estadounidense alega que el decreto presidencial firmado a mediados de febrero, "amenaza con interrumpir miles de millones de dólares en el comercio agrícola y sofocará la innovación que es necesaria para enfrentar la crisis climática y los desafíos de seguridad alimentaria si no se aborda".
Por su parte, Andrés Manuel López Obrador insiste en que la salud de los mexicanos está por encima de cualquier acuerdo. El presidente de México destacó que hay un plazo de 30 días para lograr un entendimiento con EE.UU. antes de tener que llegar a un panel de solución de controversias. Por ello, se busca que las agencias reguladoras sanitarias de ambos países investiguen los posibles daños a la salud humana por el consumo de maíz amarillo, aclaró.
"Ningún tratado en el mundo permite que se compren mercancías dañinas a la salud o que se vendan. En el mismo tratado hay cláusulas que protegen a los consumidores", argumentó el mandatario mexicano.
La Secretaría de Economía mexicana insistió en que la intención del decreto presidencial es preservar que la tortilla sea elaborada con maíz nativo, asegurando así la conservación de la biodiversidad de las más de 64 clases de maíz que hay en el país, de las cuales 59 son endémicas.