Se conmemoraron 106 años de la matanza de 1,5 millones de armenios
Biden reconoce genocidio armenio y enoja a Turquía
La Cancillería turca informó haber convocado al embajador de EE.UU. en Ankara y agregó haberle transmitido al diplomático la “fuerte reacción” de Turquía
El presidente estadounidense, Joe Biden, describió el sábado como “genocidio” la matanza de 1,5 millones de armenios por el Imperio Otomano en 1915, una medida que promete aumentar las tensiones con Turquía. En un comunicado para conmemorar el 106 aniversario del inicio de esa masacre, Biden se convirtió en el primer presidente estadounidense en ejercicio que reconoce formalmente lo ocurrido como genocidio, algo que sus predecesores han evitado para no poner en riesgo la crucial alianza con Turquía. El presidente utilizó dos veces en el comunicado la palabra “genocidio”, cumpliendo así una de sus promesas electorales y llevando a término una fuerte campaña de presión de congresistas y grupos de estadounidenses de origen armenio que llevan años pidiendo que se use ese término. “Cada año, en este día, recordamos las vidas de todos los que murieron en el genocidio armenio de la época otomana y nos comprometemos de nuevo a impedir que vuelva a producirse una atrocidad semejante”, dijo Biden.
Entre tanto, el ministro de Exteriores de Turquía, Mevlüt Çavusoglu, rechazó el uso del término “genocidio” utilizado por el presidente de Estados Unidos para describir los acontecimientos en Armenia en 1915. La posición de Turquía sobre los acontecimientos de 1915 es que la muerte de armenios en Anatolia oriental tuvo lugar cuando algunos se pusieron del lado de los invasores rusos y se rebelaron contra las fuerzas otomanas. El posterior traslado de armenios provocó numerosas víctimas. Turquía se opone a la presentación de estos incidentes como un “genocidio”, ya que los considera una tragedia en la que ambas partes sufrieron bajas.
Convocan a embajador de EE.UU.
La Cancillería turca informó haber convocado al embajador de EE.UU. en Ankara y agregó haberle transmitido al diplomático la “fuerte reacción” de Turquía.
Desde el ministerio turco señalaron que el viceministro de Exteriores, Sedat Onal, le comunicó al embajador estadounidense, David Satterfield, que la declaración del presidente norteamericano no tenía base legal y que Ankara “la rechazó, la encontró inaceptable y la condenó en los términos más duros”.