Gobierno de Macron busca negociar con los huelguistas
Francia registró manifestaciones, la jornada del sábado 11 de enero, en París cuando se cumplen 37 días de huelga en los sectores del transporte público contra la reforma de pensiones que prevé el Gobierno del presidente Emmanuel Macron, que informó que está "dispuesto a retirar...
Francia registró manifestaciones, la jornada del sábado 11 de enero, en París cuando se cumplen 37 días de huelga en los sectores del transporte público contra la reforma de pensiones que prevé el Gobierno del presidente Emmanuel Macron, que informó que está "dispuesto a retirar temporalmente" la edad de 64 años del proyecto de ley.
Las nuevas manifestaciones fueron convocadas por los sindicatos franceses Confederación General del Trabajo (CGT), Federación Sindical Unitaria (FSU) y lo Solidarios, entre otros, y es la segunda manifestación sindical en solo 48 horas.
En ambas ocasiones se registraron enfrentamientos entre la Policía y grupos radicales encapuchados que destrozaron mobiliario urbano y provocaron hogueras en la calle, por lo que agentes antidisturbios recurrieron al lanzamiento de gases lacrimógenos para dispersarlos.
No obstante, en los últimos días el Gobierno francés ha defendido la labor policial ante las acusaciones de uso excesivo de la violencia para reprimir a los manifestantes, cuyas imágenes han provocado la apertura de investigaciones internas en el seno de las fuerzas del orden.
Esta es la quinta vez, en poco más de un mes, que los franceses protestan contra la reforma de pensiones y coincidió con otra manifestación de los chalecos amarillos, que han salido a las calles de forma ininterrumpida todos los sábados desde noviembre de 2018.
Estas protestas también se registraron en otras ciudades de Francia, entre ellas Marsella, Toulouse, Lyon y Nantes.
Debido a los incidentes, el Ejecutivo de Francia anunciará propuestas con vistas a encontrar una solución al conflicto por la reforma de pensiones que pretende sustituir los 42 regímenes de pensiones vigentes, así como una edad de equilibrio de 64 años para acceder al retiro sin descuentos.
En una carta que envió el primer ministro francés Edouard Philippe a sindicatos y organizaciones de empleadores, menciona que esta decisión se toma “para demostrar mi confianza en los interlocutores sociales”.
“Y no prejuzgar el resultado de su trabajo con respecto a las medidas que se tomarán para lograr el equilibrio en 2027, estoy dispuesto a retirar del proyecto de ley la medida a corto plazo que yo había propuesto, que consistía en converger gradualmente desde 2022 a una edad de equilibrio de 64 años en 2027”, se lee en la carta.
Dentro de los puntos concretos que presenta el mandatario, se afirma que la conferencia de financiamiento, solicitada por la central sindical CFDT, emitirá sus conclusiones a finales de abril.
Philippe condicionó el retiro definitivo de esta medida a que se encuentre un acuerdo sobre "el equilibrio y el financiamiento de las pensiones" durante un encuentro previsto con las organizaciones sindicales y patronales.
A la huelga de los transportistas públicos se han sumado los sectores de los ferroviarios, abogados, del magisterio, de las refinerías, entre otros.
Las nuevas manifestaciones fueron convocadas por los sindicatos franceses Confederación General del Trabajo (CGT), Federación Sindical Unitaria (FSU) y lo Solidarios, entre otros, y es la segunda manifestación sindical en solo 48 horas.
En ambas ocasiones se registraron enfrentamientos entre la Policía y grupos radicales encapuchados que destrozaron mobiliario urbano y provocaron hogueras en la calle, por lo que agentes antidisturbios recurrieron al lanzamiento de gases lacrimógenos para dispersarlos.
No obstante, en los últimos días el Gobierno francés ha defendido la labor policial ante las acusaciones de uso excesivo de la violencia para reprimir a los manifestantes, cuyas imágenes han provocado la apertura de investigaciones internas en el seno de las fuerzas del orden.
Esta es la quinta vez, en poco más de un mes, que los franceses protestan contra la reforma de pensiones y coincidió con otra manifestación de los chalecos amarillos, que han salido a las calles de forma ininterrumpida todos los sábados desde noviembre de 2018.
Estas protestas también se registraron en otras ciudades de Francia, entre ellas Marsella, Toulouse, Lyon y Nantes.
Debido a los incidentes, el Ejecutivo de Francia anunciará propuestas con vistas a encontrar una solución al conflicto por la reforma de pensiones que pretende sustituir los 42 regímenes de pensiones vigentes, así como una edad de equilibrio de 64 años para acceder al retiro sin descuentos.
En una carta que envió el primer ministro francés Edouard Philippe a sindicatos y organizaciones de empleadores, menciona que esta decisión se toma “para demostrar mi confianza en los interlocutores sociales”.
“Y no prejuzgar el resultado de su trabajo con respecto a las medidas que se tomarán para lograr el equilibrio en 2027, estoy dispuesto a retirar del proyecto de ley la medida a corto plazo que yo había propuesto, que consistía en converger gradualmente desde 2022 a una edad de equilibrio de 64 años en 2027”, se lee en la carta.
Dentro de los puntos concretos que presenta el mandatario, se afirma que la conferencia de financiamiento, solicitada por la central sindical CFDT, emitirá sus conclusiones a finales de abril.
Philippe condicionó el retiro definitivo de esta medida a que se encuentre un acuerdo sobre "el equilibrio y el financiamiento de las pensiones" durante un encuentro previsto con las organizaciones sindicales y patronales.
A la huelga de los transportistas públicos se han sumado los sectores de los ferroviarios, abogados, del magisterio, de las refinerías, entre otros.