FARC: nosotros quemamos la nave de la guerra
Nosotros quemamos la nave de la guerra, esa determinación nos parece que es la correcta, aseguró Rodrigo Granda, integrante del Consejo Político Nacional del partido colombiano Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC). Frente a eso, la extrema derecha angustiada porque además...
Nosotros quemamos la nave de la guerra, esa determinación nos parece que es la correcta, aseguró Rodrigo Granda, integrante del Consejo Político Nacional del partido colombiano Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC).
Frente a eso, la extrema derecha angustiada porque además está en pleno funcionamiento la Comisión de la Verdad y la Jurisdicción Especial para la Paz, ve que la impunidad que había pretendido se les agota y que va a tener que responder ante los tribunales en Colombia o si no también ante la justicia internacional, declaró Granda a Prensa Latina.
La extrema derecha y el fascismo no se han resignado todavía a que en este país haya un proceso de paz, quieren revivir todos los asesinatos, el baile rojo de los años 80 y 90 (del siglo pasado) en el exterminio que fue el genocidio político más grande de América Latina y el Caribe contra la Unión Patriótica, remarcó Granda.
A su juicio, las circunstancias han cambiado ya que a pesar de la que la gente siente todavía alguna angustia, no tiene el temor de antes ni se siente totalmente desprotegida, está mirando el espejo de Argentina, de Ecuador.
Asimismo, precisó que han sido asesinados 150 antiguos guerrilleros, 50 de sus familiares y más de 700 líderes sociales. 'Es la cuota inicial de un desangre nacional muy grande si no logramos, entre las fuerzas democráticas, populares y progresistas, poner en cintura a los bárbaros'.
El jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz, manifestó recientemente en el Consejo de Seguridad su preocupación ante los ataques y la violencia que persiste contra los excombatientes.
Tan solo este año se ha verificado el asesinato de 24 ex miembros de la otrora guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), señaló.
En ese sentido, llamó a reforzar las investigaciones de tales homicidios para que los responsables respondan ante la justicia.
Frente a eso, la extrema derecha angustiada porque además está en pleno funcionamiento la Comisión de la Verdad y la Jurisdicción Especial para la Paz, ve que la impunidad que había pretendido se les agota y que va a tener que responder ante los tribunales en Colombia o si no también ante la justicia internacional, declaró Granda a Prensa Latina.
La extrema derecha y el fascismo no se han resignado todavía a que en este país haya un proceso de paz, quieren revivir todos los asesinatos, el baile rojo de los años 80 y 90 (del siglo pasado) en el exterminio que fue el genocidio político más grande de América Latina y el Caribe contra la Unión Patriótica, remarcó Granda.
A su juicio, las circunstancias han cambiado ya que a pesar de la que la gente siente todavía alguna angustia, no tiene el temor de antes ni se siente totalmente desprotegida, está mirando el espejo de Argentina, de Ecuador.
Asimismo, precisó que han sido asesinados 150 antiguos guerrilleros, 50 de sus familiares y más de 700 líderes sociales. 'Es la cuota inicial de un desangre nacional muy grande si no logramos, entre las fuerzas democráticas, populares y progresistas, poner en cintura a los bárbaros'.
El jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz, manifestó recientemente en el Consejo de Seguridad su preocupación ante los ataques y la violencia que persiste contra los excombatientes.
Tan solo este año se ha verificado el asesinato de 24 ex miembros de la otrora guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), señaló.
En ese sentido, llamó a reforzar las investigaciones de tales homicidios para que los responsables respondan ante la justicia.