Papa a poderosos: ¡Basta de usar a Oriente Medio!
Ayer sábado, el papa Francisco envió un mensaje a “quienes tienen el poder”, invitándolos a trabajar al servicio de la paz y no de los intereses propios: “¡Basta de usar a Oriente Medio para obtener beneficios ajenos a Oriente Medio!”. “¡Basta del beneficio de unos pocos a costa...



Ayer sábado, el papa Francisco envió un mensaje a “quienes tienen el poder”, invitándolos a trabajar al servicio de la paz y no de los intereses propios: “¡Basta de usar a Oriente Medio para obtener beneficios ajenos a Oriente Medio!”.
“¡Basta del beneficio de unos pocos a costa de la piel de muchos! ¡Basta de las ocupaciones de las tierras que desgarran a los pueblos! ¡Basta con el prevalecer de las verdades parciales a costa de las esperanzas de la gente! ¡Basta de usar a Oriente Medio para obtener beneficios ajenos a Oriente Medio!”, exclamó el pontífice.
Desde Bari, Italia, donde se encontraba en una reunión junto a representantes de todas las Iglesias cristianas de Oriente, el papa recordó el drama de la guerra en Siria y destacó que “muchos conflictos han sido fomentados también por formas de fundamentalismo y fanatismo disfrazados de pretextos religiosos”.
Asimismo, criticó que “no se puede levantar la voz para hablar de paz mientras a escondidas se siguen desenfrenadas carreras de rearme” ya que aquello “es una gravísima responsabilidad que pesa sobre la conciencia de las naciones, especialmente de las más poderosas”.
Francisco dijo sentirse “profundamente angustiado” por la situación en Jerusalén y reiteró su llamado para que sea “preservada más allá de las distintas disputas y tensiones, y cuyo status quo exige que sea respetado de acuerdo con lo deliberado por la Comunidad internacional”.
Además, insistió en que “solo una solución negociada entre israelíes y palestinos, firmemente deseada y favorecida por la Comunidad de naciones, podrá conducir a una paz estable y duradera, y asegurar la coexistencia de dos Estados para dos pueblos”.
El papa, también se refirió al “aterrador número” de niños que en Oriente Medio “llora a causa de muertes violentas en sus familias y ve amenazada su tierra natal, a menudo con la única posibilidad de tener que huir”.
“Que la humanidad escuche el grito de los niños, cuya boca proclama la gloria de Dios. Solo secando sus lágrimas el mundo encontrará la dignidad. Que Oriente Medio no sea más un arco de guerra tensado entre los continentes, sino un arca de paz acogedora para los pueblos y los credos”, rogó el sumo sacerdote.
El papa llegó ayer sábado a las 08H00 (hora local) a la Plaza Cristóbal Colón, de la ciudad de Apulia, al sur de Italia. Allí, se trasladó a la Basílica de San Nicolás, en donde veneró las reliquias del santo.
“¡Basta del beneficio de unos pocos a costa de la piel de muchos! ¡Basta de las ocupaciones de las tierras que desgarran a los pueblos! ¡Basta con el prevalecer de las verdades parciales a costa de las esperanzas de la gente! ¡Basta de usar a Oriente Medio para obtener beneficios ajenos a Oriente Medio!”, exclamó el pontífice.
Desde Bari, Italia, donde se encontraba en una reunión junto a representantes de todas las Iglesias cristianas de Oriente, el papa recordó el drama de la guerra en Siria y destacó que “muchos conflictos han sido fomentados también por formas de fundamentalismo y fanatismo disfrazados de pretextos religiosos”.
Asimismo, criticó que “no se puede levantar la voz para hablar de paz mientras a escondidas se siguen desenfrenadas carreras de rearme” ya que aquello “es una gravísima responsabilidad que pesa sobre la conciencia de las naciones, especialmente de las más poderosas”.
Francisco dijo sentirse “profundamente angustiado” por la situación en Jerusalén y reiteró su llamado para que sea “preservada más allá de las distintas disputas y tensiones, y cuyo status quo exige que sea respetado de acuerdo con lo deliberado por la Comunidad internacional”.
Además, insistió en que “solo una solución negociada entre israelíes y palestinos, firmemente deseada y favorecida por la Comunidad de naciones, podrá conducir a una paz estable y duradera, y asegurar la coexistencia de dos Estados para dos pueblos”.
El papa, también se refirió al “aterrador número” de niños que en Oriente Medio “llora a causa de muertes violentas en sus familias y ve amenazada su tierra natal, a menudo con la única posibilidad de tener que huir”.
“Que la humanidad escuche el grito de los niños, cuya boca proclama la gloria de Dios. Solo secando sus lágrimas el mundo encontrará la dignidad. Que Oriente Medio no sea más un arco de guerra tensado entre los continentes, sino un arca de paz acogedora para los pueblos y los credos”, rogó el sumo sacerdote.
El papa llegó ayer sábado a las 08H00 (hora local) a la Plaza Cristóbal Colón, de la ciudad de Apulia, al sur de Italia. Allí, se trasladó a la Basílica de San Nicolás, en donde veneró las reliquias del santo.