Humala ayudará a justicia en caso lavado de activos
El ex presidente peruano Ollanta Humala y su esposa, Nadine Heredia, ratificaron su decisión de someterse a la justicia, dos días después de haber sido liberados, mientras su futuro político es materia de pronósticos controvertidos. La pareja visitó al fiscal que los investiga, Germán...



El ex presidente peruano Ollanta Humala y su esposa, Nadine Heredia, ratificaron su decisión de someterse a la justicia, dos días después de haber sido liberados, mientras su futuro político es materia de pronósticos controvertidos.
La pareja visitó al fiscal que los investiga, Germán Juárez, según informó Humala a su salida de la sede del Ministerio Público, y le ratificaron su disposición a colaborar con las investigaciones, pues ambos son los más interesados en que se aclare el caso de lavado de activos por el que son indagados.
Libres
Tras permanecer más de nueve meses en prisión preventiva, Humala y Heredia fueron liberados el pasado domingo por orden del Tribunal Constitucional que falló a favor de un hábeas corpus y declaró su encierro ilegal y atentatorio contra los derechos constitucionales.
El ex gobernante y su esposa visitaron también el Poder Judicial para coordinar su comparecencia mensual y confirmar su permanencia en Lima, condición que regía antes de su detención y a la que se añade la de no salir de la ciudad sin autorización del juez a cargo del caso.
Preguntado sobre versiones periodísticas en torno a nuevos elementos procedentes de Brasil que lo inculparían de recibir fondos de empresas brasileñas, se abstuvo de comentarios por la reserva del proceso de investigación y ratificó que la pareja se considera inocente.
También anunció que próximamente dará una conferencia de prensa en la que hablará de temas políticos. Apenas salió de la cárcel, Humala anunció la retoma de la conducción de su Partido Nacionalista (PNP).
Al respecto, las proyecciones futuras de la pareja son materia de controversia, pues sus detractores consideran que están políticamente sepultados por corrupción, mientras otros analistas consideran que la prisión injusta sufrida los potencia políticamente.
‘Lo que no nos mata nos hace más fuertes’, dijo Humala tras salir de la cárcel, aunque para comentaristas que lo adversan, como Fernando Rospigliosi, el exmandatario y su esposa están muy desacreditados por las denuncias de corrupción, por lo que no tienen perspectivas en un futuro inmediato.
Según el politólogo David Sulmont, el encarcelamiento sufrido, sin que hubieran sido formalmente acusados, da a los Humala-Heredia una imagen de víctimas de persecución política.
‘Eso puede generar eventualmente simpatías en ciertos sectores de la población, que han visto una especie de ensañamiento de sectores políticos de mantenerlos en la cárcel sin que haya todavía una acusación fiscal’, aseveró.
Sulmont agregó que Humala se beneficia del contraste entre la estabilidad política y económica de su gobierno y el mal desempeño de su sucesor, el empresario conservador Pedro Pablo Kuczynski, quien tuvo que renunciar por un escándalo de corrupción.
La pareja visitó al fiscal que los investiga, Germán Juárez, según informó Humala a su salida de la sede del Ministerio Público, y le ratificaron su disposición a colaborar con las investigaciones, pues ambos son los más interesados en que se aclare el caso de lavado de activos por el que son indagados.
Libres
Tras permanecer más de nueve meses en prisión preventiva, Humala y Heredia fueron liberados el pasado domingo por orden del Tribunal Constitucional que falló a favor de un hábeas corpus y declaró su encierro ilegal y atentatorio contra los derechos constitucionales.
El ex gobernante y su esposa visitaron también el Poder Judicial para coordinar su comparecencia mensual y confirmar su permanencia en Lima, condición que regía antes de su detención y a la que se añade la de no salir de la ciudad sin autorización del juez a cargo del caso.
Preguntado sobre versiones periodísticas en torno a nuevos elementos procedentes de Brasil que lo inculparían de recibir fondos de empresas brasileñas, se abstuvo de comentarios por la reserva del proceso de investigación y ratificó que la pareja se considera inocente.
También anunció que próximamente dará una conferencia de prensa en la que hablará de temas políticos. Apenas salió de la cárcel, Humala anunció la retoma de la conducción de su Partido Nacionalista (PNP).
Al respecto, las proyecciones futuras de la pareja son materia de controversia, pues sus detractores consideran que están políticamente sepultados por corrupción, mientras otros analistas consideran que la prisión injusta sufrida los potencia políticamente.
‘Lo que no nos mata nos hace más fuertes’, dijo Humala tras salir de la cárcel, aunque para comentaristas que lo adversan, como Fernando Rospigliosi, el exmandatario y su esposa están muy desacreditados por las denuncias de corrupción, por lo que no tienen perspectivas en un futuro inmediato.
Según el politólogo David Sulmont, el encarcelamiento sufrido, sin que hubieran sido formalmente acusados, da a los Humala-Heredia una imagen de víctimas de persecución política.
‘Eso puede generar eventualmente simpatías en ciertos sectores de la población, que han visto una especie de ensañamiento de sectores políticos de mantenerlos en la cárcel sin que haya todavía una acusación fiscal’, aseveró.
Sulmont agregó que Humala se beneficia del contraste entre la estabilidad política y económica de su gobierno y el mal desempeño de su sucesor, el empresario conservador Pedro Pablo Kuczynski, quien tuvo que renunciar por un escándalo de corrupción.