El lucrativo negocio de tener un micro en Tarija
El servicio de un microbús recauda mensualmente unos 30.758 bolivianos al mes, de ese monto se debe realizar una serie de gastos para el mantenimiento del vehículo, como ser el cambio de aceite, engrase, repuestos, cambio de llantas y batería una vez al año, y otros. Según un dirigente del...



El servicio de un microbús recauda mensualmente unos 30.758 bolivianos al mes, de ese monto se debe realizar una serie de gastos para el mantenimiento del vehículo, como ser el cambio de aceite, engrase, repuestos, cambio de llantas y batería una vez al año, y otros. Según un dirigente del sector, al día se logra una ganancia de 200 bolivianos.
El micro A
El País realizó un viaje en el micro A en el momento de menos afluencia de pasajeros, entre las 09.05 y las 10.50, desde la parada en la nueva terminal hasta Tomatitas, en el trayecto de ida utilizaron el transporte 53 personas y en el retorno 36, en total 89 pasajeros. Si se cancela 1,80 bolivianos, en total el conductor recauda 160,2.
Si realiza ocho vueltas al día (información proporcionada por un conductor que no quiso ser identificado), en este tiempo alcanza la suma de 1.281,6 bolivianos. Si solo trabaja seis días a la semana, llega a ganar 7.689,6 y al mes 30.758,4 bolivianos.
El secretario general del sindicato La Tablada, Víctor García, contó que su organización agrupa a unas 10 líneas de transporte en el que se encuentran la A, B, D, S, C G, CH, y también las bifurcaciones. La línea A es la que tiene el recorrido más largo, va de San Mateo hasta la nueva terminal de buses.
Apuntó que el trabajo de conductor es incomprendido porque debe despertar a las cinco de la mañana para preparar la movilidad, revisar el aceite, el agua, limpiar, “deja a la familia durmiendo y a su retorno los pilla durmiendo”, porque retorna entre las 9 y 10 de la noche, a veces 10.30, “cuando busca hacer un poco más de renta”. Según García, realizan unas seis vueltas.
El vehículo nuevo requiere de un mantenimiento, indicó, lo que se puede hacer es cada mes un cambio de aceite casi mensual a los 20 días, lavado semanal, se hace el engrase. El cambio de llantas traseras suele hacerse cada año, las ruedas delanteras cada seis meses porque son las que más se desgasta. Cada una tiene un costo de 1.200 bolivianos. En total son ocho las que necesita adquirir.
Otros gastos suponen el cambio de batería de manera anual, “algunas duran más que otras”, para el sistema de frenos se debe comprar pastillas, el juego cuesta 380 bolivianos y las balatas más económicas están a 120. Además, cada día se debe comprar combustible por un valor de 120 bolivianos.
“La ganancia es más o menos unos 200 bolivianos por día, pero los imprevistos nunca están exentos, de todo esto. A veces tropezamos con los usuarios que critican este micro viejo, pero ese micro viejo cuesta más mantenerlo que uno que está en condiciones. Uno nuevo debe costar por los 70.000 dólares”, sostuvo.
EL APUNTE
El 8 de febrero de 2018, el Gobierno Municipal de La Paz había firmado un convenio con el Municipio de Tarija para la transferencia de conocimientos del servicio municipal de transporte Pumakatari a la ciudad de Tarija. Como primer paso se debería constituir una entidad que administre y ponga en marcha el debido funcionamiento de los buses, como se hizo en la sede de Gobierno.
Al respecto, en febrero de este año, el secretario de Movilidad Urbana, Horacio Calisaya, sostuvo que se quiere retomar ese proyecto, pero con los actores involucrados que son los Sindicatos de Micros, “La Tablada” y “Luis de Fuentes”, además de las Cooperativas de Servicios Públicos “Chaguaya” y “Tarija”.
“Vamos a coordinar directamente con los transportistas para mejorar el tema del servicio público, tenemos un acercamiento con los cuatro sindicatos y cooperativas de micros, estamos trabajando directamente con ellos, ellos están de acuerdo en la necesidad de actualizar las rutas, realizar algún alargue para brindar mayor cobertura para el usuario”, explicó en esa oportunidad.
Al momento el municipio no contempla la creación de un servicio masivo de transporte urbano.
El micro A
El País realizó un viaje en el micro A en el momento de menos afluencia de pasajeros, entre las 09.05 y las 10.50, desde la parada en la nueva terminal hasta Tomatitas, en el trayecto de ida utilizaron el transporte 53 personas y en el retorno 36, en total 89 pasajeros. Si se cancela 1,80 bolivianos, en total el conductor recauda 160,2.
Si realiza ocho vueltas al día (información proporcionada por un conductor que no quiso ser identificado), en este tiempo alcanza la suma de 1.281,6 bolivianos. Si solo trabaja seis días a la semana, llega a ganar 7.689,6 y al mes 30.758,4 bolivianos.
El secretario general del sindicato La Tablada, Víctor García, contó que su organización agrupa a unas 10 líneas de transporte en el que se encuentran la A, B, D, S, C G, CH, y también las bifurcaciones. La línea A es la que tiene el recorrido más largo, va de San Mateo hasta la nueva terminal de buses.
Apuntó que el trabajo de conductor es incomprendido porque debe despertar a las cinco de la mañana para preparar la movilidad, revisar el aceite, el agua, limpiar, “deja a la familia durmiendo y a su retorno los pilla durmiendo”, porque retorna entre las 9 y 10 de la noche, a veces 10.30, “cuando busca hacer un poco más de renta”. Según García, realizan unas seis vueltas.
El vehículo nuevo requiere de un mantenimiento, indicó, lo que se puede hacer es cada mes un cambio de aceite casi mensual a los 20 días, lavado semanal, se hace el engrase. El cambio de llantas traseras suele hacerse cada año, las ruedas delanteras cada seis meses porque son las que más se desgasta. Cada una tiene un costo de 1.200 bolivianos. En total son ocho las que necesita adquirir.
Otros gastos suponen el cambio de batería de manera anual, “algunas duran más que otras”, para el sistema de frenos se debe comprar pastillas, el juego cuesta 380 bolivianos y las balatas más económicas están a 120. Además, cada día se debe comprar combustible por un valor de 120 bolivianos.
“La ganancia es más o menos unos 200 bolivianos por día, pero los imprevistos nunca están exentos, de todo esto. A veces tropezamos con los usuarios que critican este micro viejo, pero ese micro viejo cuesta más mantenerlo que uno que está en condiciones. Uno nuevo debe costar por los 70.000 dólares”, sostuvo.
EL APUNTE
El 8 de febrero de 2018, el Gobierno Municipal de La Paz había firmado un convenio con el Municipio de Tarija para la transferencia de conocimientos del servicio municipal de transporte Pumakatari a la ciudad de Tarija. Como primer paso se debería constituir una entidad que administre y ponga en marcha el debido funcionamiento de los buses, como se hizo en la sede de Gobierno.
Al respecto, en febrero de este año, el secretario de Movilidad Urbana, Horacio Calisaya, sostuvo que se quiere retomar ese proyecto, pero con los actores involucrados que son los Sindicatos de Micros, “La Tablada” y “Luis de Fuentes”, además de las Cooperativas de Servicios Públicos “Chaguaya” y “Tarija”.
“Vamos a coordinar directamente con los transportistas para mejorar el tema del servicio público, tenemos un acercamiento con los cuatro sindicatos y cooperativas de micros, estamos trabajando directamente con ellos, ellos están de acuerdo en la necesidad de actualizar las rutas, realizar algún alargue para brindar mayor cobertura para el usuario”, explicó en esa oportunidad.
Al momento el municipio no contempla la creación de un servicio masivo de transporte urbano.