Presidente interino de la FBF
Marco Rodríguez: “Un día nos vamos a ver las caras como hombres”
Los momentos de tensión fueron evidentes y hasta hubo roces entre los miembros de las fuerzas
"Había una mala intención de los dirigentes, eso para que no haya Congreso, ellos (sin precisar quiénes) fallaron una vez más. Un día nos vamos a ver las caras como hombres, las cosas no se hacen a escondidas", declaró Marco Rodríguez, quien es otro de los presidentes de la Federación Boliviana de Fútbol, reconocido y apoyado por un grupo de dirigentes de las asociaciones y el denominado G-8 en cuyo grupo se encuentra San José que también tiene dos dirigencias.
Pasado el mediodía de este jueves a horas para el partido entre las selecciones de Ecuador y Bolivia en el estadio Hernando Siles, de La Paz un grupo de policías llegó al hotel donde se encuentran los dirigentes del denominado G-8 (The Strongest, San José, Always Ready, Nacional Potosí, Real Potosí, Aurora, Municipal Vinto y Real Santa Cruz) y el Comité Ejecutivo de la FBF, con órdenes de aprensión y un supuesto amedrentamiento en contra de Fernando Costas, aunque este último no pudo ser verificado.
Los momentos de tensión fueron evidentes y hasta hubo roces entre los miembros de las fuerzas del orden y dirigentes, desde las distancia se podía observar la confusión que había, cada uno con su versión de los hechos, pero no menos cierto es que las peleas internas en la FBF llegó hasta la justicia ordinaria, además la posición de uno y otro bando es marcado, unos con estatutos en mano que desconoce el congreso que se desarrollará entre el viernes y sábado al que no acudirán el grupo denominado G-6 (Bolívar, Wilstermann, Oriente Petrolero, Blooming, Guabirá y Royal Pari).
"Supuestamente había una orden de aprensión, después huyeron, vemos una justicias totalmente parcializada. Robert Blanco (reconocido como presidente de la FBF mediante un amparo constitucional) pagó al fiscal eso dicen, uno no sabe si es verdad o mentira. Pese a todo iremos para adelante, no hay que temer", añadió Rodríguez quien tras el incidente se fue al estadio Hernando Siles, donde se enfrentaron los seleccionados de Bolivia y Ecuador a puertas cerradas por disposiciones de la CONMEBOL.
Al parecer la novela del sillón presidencial continuará mientras los dirigentes no dejen de lado sus intereses personales, además de demostrar quién es más en la FBF en el que se dice que el titular gana más de 40 mil dólares mensuales, no menos cierto es que la pelea entre dirigentes ya trascendió en el ámbito internacional y la calificación no es para menos "vergonzosa" desde todo punto de vista.
Como si ello fuese poco para el viernes está previsto un encuentro de dirigentes en el que analizarán varios temas, entre ellos modificar un artículo para que las determinaciones se asuman por simple mayoría y así el G-8 tomar medidas que pueden o no ser beneficiosos para el fútbol, pero que sí seguirá con la marcada división entre los 14 clubes profesionales, hecho que no se vio hasta el pasado año.