René Renjifo Llanos: el chapaco alzao, enamorado de su tierra
La voz es la expresión acústica primaria del ser humano, original, es una exhalación interior que busca una urgente comunicación, por tanto, busca ser escuchada y comprendida; en este hálito de existencia, el cultivo de la voz puede llevar a la belleza excelsa y cautivadora al oído, una voz...



Desde siempre se pensó en la magia de la voz y el canto, así surgen los extraordinarios relatos de sirenas y, en la hora actual, perduran los mitos de la voz en el canto.René Renjifo Llanos, nació en Tarija el 29 de diciembre de 1954, sus padres, don Telmo Renjifo y doña Francisca Llanos. Él es el tercero de seis hermanos: Dora; Humberto; Juan; Carlos y María Luisa Renjifo Llanos. Realizó sus estudios primarios en las escuelas seccionales de Padcaya y José Manuel Ávila de Tarija, los secundarios en el Colegio Nacional “San Luis” de la capital chapaca. Posteriormente, culminó sus estudios de Terapeuta Físico en la Universidad Mayor de “San Andrés” de la ciudad de La Paz, con un posgrado en la Universidad de Chile.La niñez del artista transcurrió en la comunidad de Chaguaya; fue impactado por el paisaje de la zona, el santuario que le da religiosidad a la región y las costumbres bien marcadas de los vecinos. También lo cautivó las festividades patronales en el pueblo y fechas cívicas de la escuela, así como los ejecutantes de los diversos instrumentos musicales típicos del departamento, todo aquello le dio un rumbo a sus inquietudes, las que luego definirían su vida de artista. Tanto en la escuela como el colegio, se destacó por su voz, fuerte y bien timbrada, se inclinó por las tonadas y cuecas, su participación fue ineludible en los actos cívicos. Los padres del artista se instalaron en el barrio Abaroa de Tarija, desde allí fue al colegio, ésta fue una forma de relacionarse y conocer el canto de Los Embajadores del Guadalquivir; Los Cantores del Valle; Los Montoneros de Méndez; Los Ecos de Tarija, Cecilio Mealla y otros trovadores, quienes fueron su inspiración para el canto, asimismo, los poetas tradicionales que le transmitieron la belleza de la palabra. Desde muy joven escribió poemas y luego composiciones musicales.La Tarija que frecuentó René Renjifo, fue la bohemia y cantora, alternó con aficionados al canto y con cultores de la música de mucho respeto, puesto que se hizo amigos de cantores y poetas que asistían a las diferentes peñas folklóricas o centros culturales. Por aquella época compuso el tema “Enamorada”.Por razones de estudio, se trasladó a la ciudad de La Paz, allí, desplegó su actividad artística a todos los centros culturales y adoptó el pseudónimo de “Chapaco Alzao”. De esta manera, visitó los diferentes pueblos y ciudades de Bolivia, fue invitado a importantes festivales, como el Festival de la canción Boliviana de Oruro (Segundo Lugar); el Festival Minero Universitario, donde obtuvo el primer lugar como solista; además del Festival Retorno a la Democracia; el Festival Nacional de la Cultura en Sucre y Potosí. Asimismo, obtuvo importantes premios y reconocimientos a su labor artística.Es autor de 149 composiciones musicales, de las cuales, gran parte están grabadas en sus ocho discos compactos: “Añoranzas del pago”; “Coplas de mi pueblo”; “Margarita del Guadalquivir”; “Sangre Weenhayek”; “Lo mejor del Chapaco Alzao”; “Leyenda del Silbaco”; “Poesía costumbrista” y “Boico”.Uno de sus últimos discos Compacto “Boico”, está dedicado a un personaje que vivió en Villa Montes, los datos que se citan fueron extraídos del libro “Personajes Inolvidables de Tarija” escrito por René Aguilera Fierro, la existencia se relata como sigue, se llamaba Nahum Boico, descendiente de Yugoslavos, de niño fue normal. Cuando tenía diez años de edad, un día salió junto a su padre rumbo a Tampinta en compañía de su perro; al atardecer, Nahum retornó con su perro, el padre nunca más apareció pese a que se formaron brigadas de búsqueda y rescate; en el lapso que estuvo en el monte es muy posible que haya recibido una impresión muy fuerte por lo que pudo sucederle a su padre; esta desaparición marcó el rumbo de su destino. A partir de ese día Boico nunca más volvió a hablar, al poco tiempo falleció la madre, este hecho hizo que busque la soledad en el río Pilcomayo. Por temporadas permanecía en casas de vecinos o conocidos, luego desaparecía, se lo podía ver en el río Pilcomayo o sencillamente dormía donde le encontraba la noche, comía lo que pescaba en el río o que le invitaban los amigos. Nunca fue mendigo ni agresivo o mal intencionado.Cuando había que rescatar personas ahogadas, se lo buscaba a Boico, jamás se rehusó a hacerlo, era un voluntario asombroso, no cobraba, le reconocían por voluntad propia. Su resistencia bajo el agua era impresionante, era superior a lo normal. La única familia que aún vive, son sus dos hermanas, la una vive en Inglaterra y la otra en Australia, fueron recogidas de niñas por misioneros evangélicos suecos; a Boico también se lo quisieron llevar, pero no quiso ir, no quería dejar el Pilcomayo. Pasados los 60 años, murió de cáncer en la garganta, sus restos fueron enterrados en el cementerio general de Tarija. El encargado de sus últimos días fue un súbdito sueco que vivió en la capital chapaca. “Boico”, es palabra guaraní, “Mboi” es serpiente o víbora y “Koo” es chaco o monte, se traduciría como: Es una serpiente; víbora del monte.El artista René Renjifo, le compuso un sentido y romántico tema musical “Boico”, con aires de río y bailecito oriental, nombre que le dio a su último disco compacto. Su canto es festivo, alegre, profundo, de estilo personal y único que lo lleva a perdurar entre los cantautores clásicos de Bolivia.
Detalles sobre la vida del artista
Lejos de su tierra Por razones de estudio, se trasladó a la ciudad de La Paz, allí, desplegó su actividad artística a todos los centros culturales y adoptó el pseudónimo de “Chapaco Alzao”. De esta manera, visitó los diferentes pueblos y ciudades de Bolivia, fue invitado a importantes festivales
Composiciones Es autor de 149 composiciones musicales, de las cuales, gran parte están grabadas en sus ocho discos compactos: “Añoranzas del pago”; “Coplas de mi pueblo”; “Margarita del Guadalquivir”; “Sangre Weenhayek”; “Lo mejor del Chapaco Alzao”; “Leyenda del Silbaco”; “Poesía costumbrista” y “Boico”.
BoicoUno de sus últimos discos Compacto “Boico”, está dedicado a un personaje que vivió en Villa Montes, los datos que se citan fueron extraídos del libro “Personajes Inolvidables de Tarija” escrito por René Aguilera Fierro,