En octubre se unen los dos extremos del túnel de la Queñua
El túnel de la variante Falda de la Queñua avanza a un ritmo tal que los frentes Iscayachi y San Lorenzo se unirán antes de fin de octubre, según el jefe de Control y Monitoreo de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Hibernón Bermúdez Vargas,
Esta variante comprende la construcción de un túnel de 1.200 metros de longitud. La empresa constructora inició las obras en septiembre de 2008, abriéndose paso desde el frente Iscayachi, en el que la etapa de perforación ya concluyó, avanzando más de 600 metros. En la actualidad se encuentran realizando las obras de acabado, protección, drenaje superficial y subdrenaje, según pudo constatar El País.
En el frente San Lorenzo es donde ahora se encuentra el equipo de perforación (denominado "Jumbo"), así como máquinas que hacen la limpieza de las rocas que, en cada turno (dos por día), resultan de la explosión interna. Ya se avanzó casi 280 metros lineales, faltando sólo unos 320 metros más para encontrar la otra punta.
En medio de ruidos y gases tóxicos, obreros e ingenieros trabajan a un ritmo de hasta seis metros diariamente, sin pausas, en jornadas que duran 24 horas. El ritmo de trabajo permite afirmar que en septiembre o, en el peor caso, en octubre, ya se habrá unido las dos puntas del túnel, con lo que sólo restará las obras de acabado, drenaje e iluminación, por lo que entre febrero y marzo de 2011 el túnel podrá entrar en servicio al público.
La inversión prevista llega ya al monto de 10,44 millones de dólares, en tanto que la supervisión tiene un costo de casi 3,9 millones de bolivianos.
Los trabajos son realizados bajo la observación de ingenieros supervisores y expertos ambientalistas, quienes se aseguran que el daño ambiental sea inmediatamente remediado, según un plan aprobado por la autoridad competente.
El inicio del túnel en el frente Iscayachi está a una altura de 3.402 metros sobre el nivel del mar. Desde ahí se baja con una pendiente del 5% hasta desembocar en el frente San Lorenzo, a una altura de 3.339 metros sobre el nivel del mar, registrándose un desnivel total de 63 metros.
Esta obra es dirigida por ingenieros y técnicos bolivianos con experiencia en trabajos similares en distintos puntos del país. "Los tuneleros nos encontramos siempre y vamos de un lugar a otros. Somos siempre los mismos", contó a manera de anécdota, pero con orgullo, el Superintendente del frente San Lorenzo.
El País pudo constatar que las obras en la vía que conduce desde San Lorenzo hasta el inicio del túnel también avanzan, luego de paralizaciones por distintas causas. Los equipos de la constructora brasileña OAS estaban concluyendo trabajos de excavación, por lo que el vehículo de ABC pudo llegar sin inconvenientes hasta el túnel mismo.