Como en 2014, Montes se suma al tercer candidato más valorado
Como en un revival cinco años después, Óscar Montes presentaba su opción para las elecciones nacionales en la misma esquina de la plaza Luis de Fuentes; esta vez era Óscar Ortíz y no Jorge Tuto Quiroga, el candidato que recibía los loores y esta vez Montes no era el alcalde sino el...
Como en un revival cinco años después, Óscar Montes presentaba su opción para las elecciones nacionales en la misma esquina de la plaza Luis de Fuentes; esta vez era Óscar Ortíz y no Jorge Tuto Quiroga, el candidato que recibía los loores y esta vez Montes no era el alcalde sino el exalcalde; esta vez no era Jaime Paz Zamora quien repartía bendiciones sino Rubén Costas; y esta vez no había un entronque histórico de adenistas, miristas y emenerristas en busca de la reconquista nacional bajo las siglas del Partido Demócrata Cristiano (PDC), sino dos agrupaciones con fuerte raíz en sus departamentos que presentaban un acuerdo pragmático para tratar de colocar diputados y senadores en la Asamblea Legislativa Plurinacional bajo el poco propositivo nombre de “Bolivia Dijo No”.
El pasado sábado en Entre Ríos, la Asamblea de la agrupación departamental Unidos para Renovar (UNIR) acabó de deshojar la margarita. Óscar Ortíz recibió el sí quiero y Demócratas aceleró para desplegar la cabalgata que se vio frustrada el 15 de Abril, cuando el Gobernador cruceño se quedó con los crespos hechos ante el enésimo “me lo pensaré”.
Victoria
El MAS ganó las elecciones en 2014 con el 51 por ciento de los votos y sumó un diputado uninominal más que en 2009
Finalmente primó lo pragmático y la agrupación, como ya anunció su presidente Víctor Hugo Zamora en entrevista con este medio, optó por la opción que le ha garantizado colocar “a gente de nuestra plena confianza” en los puestos de salida.
“Desde esta alianza estamos construyendo la verdadera unidad de las organizaciones políticas, las plataformas ciudadanas y las personas que no quieres ser indiferentes (…).por eso este acuerdo con UNIR es fundamental, porque muestra que aquí está la verdadera ciudadanía. No necesitamos disfrazarnos de ciudadanos porque incorporamos a los ciudadanos. Así se ganó el referéndum del 21F”, señaló el candidato Óscar Ortíz.
“Oscar y Edwin representan personas íntegras. Una persona íntegra es aquella que piensa de una manera y siente, habla y actúa de la misma manera. Para eso hay que tener valor, hay que tener entereza y no hay que tener ‘cola’. Y eso representa Oscar, una persona que ha enfrentado los casos más bullados de corrupción en Bolivia”, expresó el exalcalde tarijeño que a la fecha ha logrado cerrar algunos de sus casos más polémicos, pero que sigue siendo investigado por la Justicia.
Un escenario diferente
Pese a que en Tarija importan más las elecciones departamentales que las nacionales, por un asunto más matemático que racional, las diferentes fuerzas departamentales de oposición siempre han buscado enganches nacionales para tener una voz en el parlamento nacional. Esto ha generado tensiones entre facciones, como en 2009, donde el acuerdo entre Mario Cossío y el propio Montes coparon la plancha de Convergencia Nacional y dejaron fuera a Wilman Cardozo, que tuvo que buscar su curul en solitario con Alianza Social de René Joaquino.
Encuestas colocan a Ortíz en tercera posición
La última encuesta nacional que se ha publicado con datos en Tarija ha sido la de Ipsos para RTP en abril, una de las consideradas más confiables en el país. En esa encuesta que a nivel nacional colocaba a Evo Morales con 33%; a Carlos Mesa con 28% y a Óscar Ortíz con 7%. La tendencia se viene manteniendo.
A nivel departamental, Mesa lograba un 41 por ciento de apoyo, Evo Morales un 18 por ciento y Óscar Ortíz un 5 por ciento; mientras tanto, ni Virginio Lema (MNR) ni Jaime Paz Zamora (PDC) sumaban el porcentaje suficiente para conservar la sigla.
Para Víctor Hugo Zamora no se trata de dividir, sino que en Bolivia, por identidad sociológica “es muy difícil que haya un solo candidato de la oposición”.
En 2014 la situación fue más compleja. Samuel Doria Medina llevaba cinco años preparando su asalto a la Presidencia pero su convocatoria de unidad no acabó cuajando cuando tuvo que desprenderse del MNR para unirse a los Demócratas de Rubén Costas. La jugada y el bajo porcentaje que sumaba Doria Medina frenó a los líderes tarijeños e incluso Camino al Cambio se desmarcó de la opción.
En junio apareció Jorge Quiroga con el Partido Demócrata Cristiano, que nunca llegó a despegar en las encuestas, pero que en Tarija recibió el apoyo del MNR, con Johnny Torres como artífice y UNIR, con Óscar Montes, Rodrigo Paz y Jaime Paz. A nivel nacional, Tuto se quedó en el 9 por ciento pero en Tarija alcanzó el 19 por ciento y se llevó una diputación uninominal, una plurinacional y una senaduría. El MAS se llevó la uninominal 40 con 40 por ciento de los votos gracias a la división entre UDA y PDC, que además, por casualidades del destino, significó el curul dos tercios.
Tanto Montes, como Torres, como Víctor Hugo Zamora niegan que con su apoyo al Partido Demócrata Cristiano (PDC) facilitaran entonces los dos tercios del Movimiento Al Socialismo, cuyas consecuencias se han sentido a lo largo de la legislatura.
En cualquier caso, la alianza Montes – Ortíz no es idéntica a la de 2014, puesto que en esta ocasión la familia Paz corre con Jaime Paz candidato bajo la sigla del PDC y el MNR de Torres tiene candidato propio: Virginio Lema. Entre los tres buscarán mejorar ese 19 por ciento que juntos lograron con Tuto Quiroga.
El pasado sábado en Entre Ríos, la Asamblea de la agrupación departamental Unidos para Renovar (UNIR) acabó de deshojar la margarita. Óscar Ortíz recibió el sí quiero y Demócratas aceleró para desplegar la cabalgata que se vio frustrada el 15 de Abril, cuando el Gobernador cruceño se quedó con los crespos hechos ante el enésimo “me lo pensaré”.
Victoria
El MAS ganó las elecciones en 2014 con el 51 por ciento de los votos y sumó un diputado uninominal más que en 2009
Finalmente primó lo pragmático y la agrupación, como ya anunció su presidente Víctor Hugo Zamora en entrevista con este medio, optó por la opción que le ha garantizado colocar “a gente de nuestra plena confianza” en los puestos de salida.
“Desde esta alianza estamos construyendo la verdadera unidad de las organizaciones políticas, las plataformas ciudadanas y las personas que no quieres ser indiferentes (…).por eso este acuerdo con UNIR es fundamental, porque muestra que aquí está la verdadera ciudadanía. No necesitamos disfrazarnos de ciudadanos porque incorporamos a los ciudadanos. Así se ganó el referéndum del 21F”, señaló el candidato Óscar Ortíz.
“Oscar y Edwin representan personas íntegras. Una persona íntegra es aquella que piensa de una manera y siente, habla y actúa de la misma manera. Para eso hay que tener valor, hay que tener entereza y no hay que tener ‘cola’. Y eso representa Oscar, una persona que ha enfrentado los casos más bullados de corrupción en Bolivia”, expresó el exalcalde tarijeño que a la fecha ha logrado cerrar algunos de sus casos más polémicos, pero que sigue siendo investigado por la Justicia.
Un escenario diferente
Pese a que en Tarija importan más las elecciones departamentales que las nacionales, por un asunto más matemático que racional, las diferentes fuerzas departamentales de oposición siempre han buscado enganches nacionales para tener una voz en el parlamento nacional. Esto ha generado tensiones entre facciones, como en 2009, donde el acuerdo entre Mario Cossío y el propio Montes coparon la plancha de Convergencia Nacional y dejaron fuera a Wilman Cardozo, que tuvo que buscar su curul en solitario con Alianza Social de René Joaquino.
Encuestas colocan a Ortíz en tercera posición
La última encuesta nacional que se ha publicado con datos en Tarija ha sido la de Ipsos para RTP en abril, una de las consideradas más confiables en el país. En esa encuesta que a nivel nacional colocaba a Evo Morales con 33%; a Carlos Mesa con 28% y a Óscar Ortíz con 7%. La tendencia se viene manteniendo.
A nivel departamental, Mesa lograba un 41 por ciento de apoyo, Evo Morales un 18 por ciento y Óscar Ortíz un 5 por ciento; mientras tanto, ni Virginio Lema (MNR) ni Jaime Paz Zamora (PDC) sumaban el porcentaje suficiente para conservar la sigla.
Para Víctor Hugo Zamora no se trata de dividir, sino que en Bolivia, por identidad sociológica “es muy difícil que haya un solo candidato de la oposición”.
En 2014 la situación fue más compleja. Samuel Doria Medina llevaba cinco años preparando su asalto a la Presidencia pero su convocatoria de unidad no acabó cuajando cuando tuvo que desprenderse del MNR para unirse a los Demócratas de Rubén Costas. La jugada y el bajo porcentaje que sumaba Doria Medina frenó a los líderes tarijeños e incluso Camino al Cambio se desmarcó de la opción.
En junio apareció Jorge Quiroga con el Partido Demócrata Cristiano, que nunca llegó a despegar en las encuestas, pero que en Tarija recibió el apoyo del MNR, con Johnny Torres como artífice y UNIR, con Óscar Montes, Rodrigo Paz y Jaime Paz. A nivel nacional, Tuto se quedó en el 9 por ciento pero en Tarija alcanzó el 19 por ciento y se llevó una diputación uninominal, una plurinacional y una senaduría. El MAS se llevó la uninominal 40 con 40 por ciento de los votos gracias a la división entre UDA y PDC, que además, por casualidades del destino, significó el curul dos tercios.
Tanto Montes, como Torres, como Víctor Hugo Zamora niegan que con su apoyo al Partido Demócrata Cristiano (PDC) facilitaran entonces los dos tercios del Movimiento Al Socialismo, cuyas consecuencias se han sentido a lo largo de la legislatura.
En cualquier caso, la alianza Montes – Ortíz no es idéntica a la de 2014, puesto que en esta ocasión la familia Paz corre con Jaime Paz candidato bajo la sigla del PDC y el MNR de Torres tiene candidato propio: Virginio Lema. Entre los tres buscarán mejorar ese 19 por ciento que juntos lograron con Tuto Quiroga.