El acné, más que un problema dermatológico un desequilibrio nutricional
Para el diagnóstico de un cuadro de acné es necesario, descartar el origen y la razón, realizar una valoración profunda de antecedentes de lactancia en la infancia e historia del tiempo en la introducción de alimentos en la dieta es muy importante. Ya que de estos factores dependerá el...



Para el diagnóstico de un cuadro de acné es necesario, descartar el origen y la razón, realizar una valoración profunda de antecedentes de lactancia en la infancia e historia del tiempo en la introducción de alimentos en la dieta es muy importante. Ya que de estos factores dependerá el desarrollo y buen funcionamiento de los órganos.
La salud de la piel refleja la conducta y el comportamiento de órganos internos, es el reflejo directo de la salud de los mismos. Un erupción acneiforme (grano comúnmente denominado), la gente lo relaciona con problemas hormonales (menstruación), estres (nervioso), infeccioso, genético, hábitos higiénicos y otros.
Es importante reconocer todos estos factores y relacionar con el estilo de vida que se lleva, que pueden influir al momento de la erupción,inflamación e infección del folículo.
Pero algo muy importante al momento del diagnóstico es valorar más allá de las causas ya citadas ; es necesario resaltar la importancia de la valoración nutricional ,de esta forma dar una solución profunda y sostenida; realizar un cambio de estilo de vida que mejore buscando no solo una piel saludable suave y fresca sino que sea la respuesta al buen funcionamiento de cada órgano interno y su relación cómo sistemas complejos .
Las erupciones dérmicas no deben pasar inadvertidas ya que son señales de desordenes en la alimentación o carencias nutricionales que favorecen su formación.
Las erupciones (o granos),nos orienta a estados de estreñimiento crónico, consumo exagerado de lácteos (queso) y/o derivados y su intolerancia o sensibilidad, mayor consumo de azúcares, una dieta desequilibrada, sensibilidad a la proteína animal (huevo, pollo).esta sensibilidad muchas veces desencadenada por la ausencia de la lactancia materna o introducción de fórmulas o alimentos alergénicos cuya repercusión se observa a una edad posterior (15 a 50 años y más), es importante por ello el diagnóstico, valoración y terapia nutricional mínimo una vez al año para cambiar, mejorar estilos de vida saludables.
La salud de la piel refleja la conducta y el comportamiento de órganos internos, es el reflejo directo de la salud de los mismos. Un erupción acneiforme (grano comúnmente denominado), la gente lo relaciona con problemas hormonales (menstruación), estres (nervioso), infeccioso, genético, hábitos higiénicos y otros.
Es importante reconocer todos estos factores y relacionar con el estilo de vida que se lleva, que pueden influir al momento de la erupción,inflamación e infección del folículo.
Pero algo muy importante al momento del diagnóstico es valorar más allá de las causas ya citadas ; es necesario resaltar la importancia de la valoración nutricional ,de esta forma dar una solución profunda y sostenida; realizar un cambio de estilo de vida que mejore buscando no solo una piel saludable suave y fresca sino que sea la respuesta al buen funcionamiento de cada órgano interno y su relación cómo sistemas complejos .
Las erupciones dérmicas no deben pasar inadvertidas ya que son señales de desordenes en la alimentación o carencias nutricionales que favorecen su formación.
Las erupciones (o granos),nos orienta a estados de estreñimiento crónico, consumo exagerado de lácteos (queso) y/o derivados y su intolerancia o sensibilidad, mayor consumo de azúcares, una dieta desequilibrada, sensibilidad a la proteína animal (huevo, pollo).esta sensibilidad muchas veces desencadenada por la ausencia de la lactancia materna o introducción de fórmulas o alimentos alergénicos cuya repercusión se observa a una edad posterior (15 a 50 años y más), es importante por ello el diagnóstico, valoración y terapia nutricional mínimo una vez al año para cambiar, mejorar estilos de vida saludables.