Tres personas encarceladas por transportar 30 kilos de cocaína en Tarija

La justicia dictó este martes la detención preventiva para dos varones y una mujer que el domingo por la noche fueron capturados en posesión de casi 30 kilogramos de cocaína, cuando intentaron burlar los controles en la tranca de Pajchani. Ahora deberán permanecer en el penal de Morros Blancos mientras se desarrolla la investigación en su contra.

La audiencia se instaló ayer por la tarde en el Juzgado Mixto de San Lorenzo, donde se logró demostrar la probabilidad de autoría, también los riesgos de fuga y obstaculización, por lo que se determinó su encarcelamiento por los siguientes meses.

Su captura fue producto de los controles móviles realizados por parte del personal de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico (FELCN) el domingo por la tarde en la carretera al norte.

De acuerdo al informe de las autoridades, el caso se destapó cerca de las 16:30, al tiempo de requisar varios vehículos que hacían fila para pasar por el control de Pajchani.

Al realizar este trabajo, los efectivos notaron que el conductor de un vehículo presentaba una actitud nerviosa y rechazaba llamadas de otra persona. Al incautar su dispositivo móvil, notaron que se estaría comunicando con las personas de otro motorizado que venía por detrás; es decir que estaría trabajando como guía para avisar sobre los controles y confirmar que podría pasar con la droga.

Inmediatamente los efectivos iniciaron un rastrillaje intensivo por la carretera para poder identificar al segundo vehículo que esperaba la orden para avanzar. Aunque intentaron darse a la fuga, los uniformados lograron alcanzarlos cuando se encontraban a la altura de la comunidad de Iscayachi. Sin embargo, uno de los acompañantes del conductor bajó y comenzó a correr hasta perderse en la maleza, aprovechando la intensa neblina ya entrada la noche.

Acto seguido se trasladó los motorizados, a las dos personas de esta vagoneta y al ciudadano retenido en Pajchani a dependencias de la FELCN para proceder con la entrevista y la requisa correspondiente.

Es así que se encontró 29 paquetes en cuyo interior había una sustancia que con el narcotest se logró comprobar que se trataría de cocaína, en un peso total de 29.960 gramos. Estos paquetes en forma de ladrillos iban escondidos en compartimentos secretos en las puertas, los guardabarros y el tablero de control.

Los efectivos también procedieron a la incautación de sus dispositivos móviles y una suma de dinero que tenían en su poder.