Somos tan buenos como nuestra educación nos lo permite
MILITAR OBLIGA A INGERIR HECES FECALES A PREMILITAR Hay muchas posturas sobre estos hechos: “bien hecho”, “ahora están hechos de leche”, “son maricas”, “que abusivo el instructor” y otros. Pero estas apreciaciones son más relevantes de lo que parecen, esto no se reduce a...
MILITAR OBLIGA A INGERIR HECES FECALES A PREMILITAR
Hay muchas posturas sobre estos hechos: “bien hecho”, “ahora están hechos de leche”, “son maricas”, “que abusivo el instructor” y otros. Pero estas apreciaciones son más relevantes de lo que parecen, esto no se reduce a simplemente un supuesto abuso, esto es el destape de una distorsión en el adiestramiento que se ha convertido en una actitud socialmente aceptada y va en apoyo de una INVOLUCIÓN DE NUESTRO NIVEL CULTURAL CÓMO PAÍS.
La educación es una de las labores más delicadas que existen y más aún, cuando educas y/o adiestras a personas bajo un régimen castrense; el estudiante, en este caso el recluta, cree y da por hecho todo lo que se le dice y todo lo que se le hace y enseña a hacer, además esa persona lo replicará con sus próximos subalternos. En el caso de los soldados y premilitares, los padres de los mismos les confían sus hijos a persona que son expertos instruir, pero cuando el ego, y la borrachera de poder se disparan ocurren los excesos,de los cuales existe una gran cifra negra, lamentablemente jamás sabremos quien fue, por qué oen qué circunstancias, debido a que los abusos se aceptan socialmente y en el momento en que los padres alborotados ante tan bochornoso hecho, lo denuncian, tendremos como resultado la estigmatización de un adolecente, calificado con adjetivos como: “niña, hecha de o…n”. La gran mayoría de las personas que forman parte de este proceso, vale decir: premilitares, soldados nuevos, soldados antiguos darán por hecho que “niña” es un insulto. Pero ¿En qué punto es beneficioso para la sociedad considerar que pertenecer al sexo femenino es degradante? Y como resultado tendremos a cientos de personas que transmitirán esa premisa en sus hogares, este hecho es un factor muy importante de discriminación, el cual no es en absoluto el objetivo de realizar un servicio militar.
[caption id="attachment_45757" align="aligncenter" width="591"] Cristhian A. Rodriguez[/caption]
Por otro lado, hay una gran diferencia entre prueba de valor y sanción que las personas con bajo nivel de formación llegan a confundir.
Sanción: es una pena o medida impuesta a una persona que ha infringido alguna ley o reglamento; mismo que también describe las sanciones a emplearse.
Prueba de valor: actividad CON PROPÓSITOS ESPECÍFICOS, pueden ser de engrandecer el coraje de la persona en cuestión, por ejemplo. Cualquiera fuere el propósito, estas pruebas son planificadas y organizadas para lograr un objetivo específico en la persona que se está entrenando.
En el momento en que imponemos sanciones que dependen del estado de ánimo, de las experiencias vividas, de copia de películas, etc. Entramos en la improvisación y éstos son los resultados.
Este hecho representa una gran oportunidad para todos los institutos militares/policiales y cuarteles; ya que se presta a un momento de tomar medidas preventivas para evitar que se conviertan en lugares donde las enseñanzas van en detrimento cultural de la persona.
Tengo el honor de pertenecer al Centro de Entrenamiento Internacional Antinarcóticos Garras del Valor (CEIAGAVA) que es reconocido a nivel nacional e internacional por todos los países de Centro América, Sud América y parte de Europa; en este paso de mi vida profesional pude advertir, que en los 31 años que tiene esta institución, nunca se registraron abusos, jamás se golpeó a un estudiante y el producto es un funcionario con altos estándares de capacidad operativa y un coraje bastante engrandecido, debido a que nos basamos en lo técnico - científico para formar a los estudiantes y nuestros métodos y procedimientos no dependen de nuestro estado de ánimo o de algún aspecto subjetivo.
Es muy probable que este artículo de opinión incomode a más de uno, pero precisamente de eso se trata, de incomodar a las personas correctas para que tomen cartas en el asunto y asuman medidas preventivas para evitar que continúen o peor aún, que aumenten los malos hábitos, tabúes y hechos de discriminación en las instituciones castrenses.
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Escrito por Tte. Cristhian A. Rodriguez
Jefe de Curso del Centro de Entrenamiento Internacional Antinarcóticos “Garras del Valor” C.E.I.A.GA.VA
Hay muchas posturas sobre estos hechos: “bien hecho”, “ahora están hechos de leche”, “son maricas”, “que abusivo el instructor” y otros. Pero estas apreciaciones son más relevantes de lo que parecen, esto no se reduce a simplemente un supuesto abuso, esto es el destape de una distorsión en el adiestramiento que se ha convertido en una actitud socialmente aceptada y va en apoyo de una INVOLUCIÓN DE NUESTRO NIVEL CULTURAL CÓMO PAÍS.
La educación es una de las labores más delicadas que existen y más aún, cuando educas y/o adiestras a personas bajo un régimen castrense; el estudiante, en este caso el recluta, cree y da por hecho todo lo que se le dice y todo lo que se le hace y enseña a hacer, además esa persona lo replicará con sus próximos subalternos. En el caso de los soldados y premilitares, los padres de los mismos les confían sus hijos a persona que son expertos instruir, pero cuando el ego, y la borrachera de poder se disparan ocurren los excesos,de los cuales existe una gran cifra negra, lamentablemente jamás sabremos quien fue, por qué oen qué circunstancias, debido a que los abusos se aceptan socialmente y en el momento en que los padres alborotados ante tan bochornoso hecho, lo denuncian, tendremos como resultado la estigmatización de un adolecente, calificado con adjetivos como: “niña, hecha de o…n”. La gran mayoría de las personas que forman parte de este proceso, vale decir: premilitares, soldados nuevos, soldados antiguos darán por hecho que “niña” es un insulto. Pero ¿En qué punto es beneficioso para la sociedad considerar que pertenecer al sexo femenino es degradante? Y como resultado tendremos a cientos de personas que transmitirán esa premisa en sus hogares, este hecho es un factor muy importante de discriminación, el cual no es en absoluto el objetivo de realizar un servicio militar.
[caption id="attachment_45757" align="aligncenter" width="591"] Cristhian A. Rodriguez[/caption]
Por otro lado, hay una gran diferencia entre prueba de valor y sanción que las personas con bajo nivel de formación llegan a confundir.
Sanción: es una pena o medida impuesta a una persona que ha infringido alguna ley o reglamento; mismo que también describe las sanciones a emplearse.
Prueba de valor: actividad CON PROPÓSITOS ESPECÍFICOS, pueden ser de engrandecer el coraje de la persona en cuestión, por ejemplo. Cualquiera fuere el propósito, estas pruebas son planificadas y organizadas para lograr un objetivo específico en la persona que se está entrenando.
En el momento en que imponemos sanciones que dependen del estado de ánimo, de las experiencias vividas, de copia de películas, etc. Entramos en la improvisación y éstos son los resultados.
Este hecho representa una gran oportunidad para todos los institutos militares/policiales y cuarteles; ya que se presta a un momento de tomar medidas preventivas para evitar que se conviertan en lugares donde las enseñanzas van en detrimento cultural de la persona.
Tengo el honor de pertenecer al Centro de Entrenamiento Internacional Antinarcóticos Garras del Valor (CEIAGAVA) que es reconocido a nivel nacional e internacional por todos los países de Centro América, Sud América y parte de Europa; en este paso de mi vida profesional pude advertir, que en los 31 años que tiene esta institución, nunca se registraron abusos, jamás se golpeó a un estudiante y el producto es un funcionario con altos estándares de capacidad operativa y un coraje bastante engrandecido, debido a que nos basamos en lo técnico - científico para formar a los estudiantes y nuestros métodos y procedimientos no dependen de nuestro estado de ánimo o de algún aspecto subjetivo.
Es muy probable que este artículo de opinión incomode a más de uno, pero precisamente de eso se trata, de incomodar a las personas correctas para que tomen cartas en el asunto y asuman medidas preventivas para evitar que continúen o peor aún, que aumenten los malos hábitos, tabúes y hechos de discriminación en las instituciones castrenses.
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Escrito por Tte. Cristhian A. Rodriguez
Jefe de Curso del Centro de Entrenamiento Internacional Antinarcóticos “Garras del Valor” C.E.I.A.GA.VA